La extorsión es la nueva plaga de los cafeteros, asegura presidente de la Federación de Cultivadores

Pese a que el agro es uno de los sectores con mayor dinamismo en la economía nacional, los cafeteros están expresando sus preocupaciones sobre las dificultades que enfrenta hoy su industria. A pesar de destacar avances en eficiencia y gestión dentro del gremio, así como mejoras en la comercialización y los mercados, la Federación de Cafeteros reconoce que la sostenibilidad económica de la caficultura en Colombia está en riesgo debido a la falta de rentabilidad.

A través de un mensaje en la red social X, su presidente Germán Bahamón, aseguró que es crucial abordar y superar los desafíos actuales, tomando medidas tanto para resolver los problemas inmediatos como para implementar cambios estructurales que permitan a los productores participar más activamente en la cadena de valor.

“A pesar de los esfuerzos en 2023 para mantener la producción en medio de la estrechez económica, fue un año extremadamente difícil para la comunidad cafetera, y no se puede permitir que se repita”, aseguró.

Aunque hay esperanzas para la cosecha de 2024, desafortunadamente, el clima ha sido un factor adverso. Por lo tanto, desde la Federación valoran los anuncios de la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica Flórez, sobre créditos, especialmente para la renovación de las plantaciones de café, y esperan obtener más detalles sobre el plan de apoyo a la fertilización que se ha mencionado, asegurándose de que no haya discriminación regional.

“Es evidente que se necesita un apoyo significativo en este momento para mejorar los ingresos de los caficultores. No se ha experimentado una bonanza reciente; más bien, se enfrentan bajos niveles de productividad, problemas significativos con la broca y precios bajos. Si no se toman medidas contundentes, podría haber una crisis”, alertó Bahamón.

Temor por la seguridad

El presidente del gremio cafetero también aprovechó para hacer un llamado a las fuerzas de seguridad con el fin de que devuelvan la tranquilidad a las regiones cafeteras, ya que “la extorsión se ha convertido en una nueva plaga”.

La creciente ola de extorsiones es cada vez más preocupante en Colombia. Según datos del portal Siedco, basados en estadísticas de la Policía Nacional, los casos de este delito han experimentado un alarmante aumento en los últimos cuatro años.

En 2020, se reportaron 8.188 casos, cifra que aumentó a 8.342 en 2021, 9.791 en 2022 y 9.871 en 2023. Esto representa un incremento del 20,5 % en comparación con el año base de 2020. Los departamentos más afectados fueron Cundinamarca, Antioquia, Atlántico, Valle del Cauca y Norte de Santander, donde se concentraron la mayoría de las denuncias.

En el gremio cafetero insisten en que “la unidad es su fortaleza y que con ella pueden superar la división y el pesimismo, avanzando siempre hacia adelante”.

Igualmente, Bahamón reconoce que existe preocupación en la relación con el equilibrio entre precios y costos. “En el próximo Comité Nacional, se propondrá la activación del Fondo de Estabilización de Precios del Café (FEPC), aunque es importante tener en cuenta que los recursos disponibles pueden no ser suficientes para cubrir todas las necesidades”, advirtió.

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