Seguros
“Los empresarios no podemos pensar en pequeño”, dice presidente de una aseguradora nacional que tiene 4 millones de clientes
La empresa se encuentra en un proceso de transformación, en el que ha invertido dos millones de dólares. Advierte sobre problemas con el Soat y con el seguro de cumplimiento.
En medio de la desaceleración económica que vive el país, con la caída en el consumo y los sectores industrial y comercial a la baja, la industria aseguradora nacional ha logrado mantener su negocio, pese al incremento que han tenido las primas de las diferentes pólizas que comercializan.
Una de las firmas que pasa hoy por un buen momento es Aseguradora Solidaria, entidad cooperativa y propiedad de la Red Los Olivos, la cual ha conseguido crecer en los primeros seis meses de este año a un ritmo del 11,8 % frente a un avance de 5,7 % de la industria en el ramo de productos generales.
Su presidente, Andrés Rojas, atribuye los buenos resultados a que tiene una siniestralidad inferior a la de sus competidores (con un promedio del 36 %), así como a una red comercial de 40 oficinas en todo el país.
Igualmente, dice que es consecuencia de su apuesta por el país, la cual incluye un respaldo al Gobierno, “porque es lo que tenemos. Nada sacamos si todo el tiempo nos estamos quejando, diciendo que eso no se puede o lamentándonos porque sacaron una norma. Tenemos que unirnos para sacar al Gobierno adelante porque nos conviene a todos”, asegura este ejecutivo.
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En su concepto, la labor de los empresarios consiste en hacer el trabajo que le corresponde hasta donde puedan. “Si nosotros aquí todos los días nos quejamos por lo que está pasando, pues el ambiente se prestaría para que no creciéramos o que estuviéramos dando pérdidas. Pero el mensaje es el contrario, hay que trabajar así el entorno esté difícil. Aquí lo que tenemos que dar es la milla extra para que este tema funcione”, reitera.
Rojas comenta que están en un proceso de transformación comercial en el que han invertido dos millones de dólares, el cual comenzó en 2022 y cuya implementación arrancará en firme en 2025, aunque admite que “muy seguramente si este no estuviera ligado a una planeación estratégica”, tal vez –como muchos otros empresarios– estarían sin hacer mayores cambios mientras se resuelve el momento de transición e incertidumbre que vive el país.
Pero, al tiempo, está convencido de que los empresarios tienen una responsabilidad con su gente (en su caso son 800 empleados directos) y con el país y, por ende, no pueden pensar en chiquito y deben buscar seguir creciendo en la medida de sus posibilidades.
“Eso se vio en la época del covid cuando hubo empresas que mantuvieron sus esquemas, protegieron a su gente e incluso ganaron menos o perdieron. Pero hoy viven los gloriosos porque el mercado los ha reconocido y sus empleados están más comprometidos”, precisó.
Aseguradora Solidaria, que para este año tiene la meta de facturar 800.000 millones y a junio ya iba en la mitad, es una compañía con una participación de mercado del 3,4 % y entre sus fuertes está el seguro de vehículos (particularmente atienden taxis), así como el Soat.
Frente a este último, que es una póliza que cada vez ofrecen menos aseguradoras, Rojas señala que tiene tres problemáticas, que como sector están tratando de solucionar con el Gobierno. La primera es deficiencia de la tarifa, la segunda el fraude y la tercera, su elevado nivel de accidentalidad, lo que evidencia la falta de campañas de prevención.
“El trabajo con el Gobierno ha sido evaluar cómo subir las tarifas para que el dinero alcance, pero teniendo en cuenta que el alza no puede ser mucha porque crecería la evasión, la cual se calcula en 50 %”, dice el presidente de Aseguradora Solidaria, al tiempo que advierte que el fraude es más grave que el tema de la tarifa.
“En ese frente hay mucha contaminación, con entidades de salud que cobran por los procedimientos muchísimo más de lo que realmente valen. El Soat no es un barril sin fondo y a eso hay que sumarle la falta de controles, pues 700 municipios del país no tienen control de tránsito”.
Este directivo también se refirió al ramo de cumplimiento, que es el que garantiza el cumplimiento de las obligaciones contractuales de una de las partes en un contrato, el cual pasa hoy por un momento difícil. “Está apretado, porque el Gobierno no ha ejecutado al ritmo que esperábamos y, como consecuencia, muchas entidades públicas no han expedido pólizas”.
La meta de esta aseguradora es poder masificar más sus productos, basados en su estrategia comercial y seguir creciendo su base de clientes, que actualmente supera los cuatro millones. “La idea es poder tener productos fáciles de entender, sencillos y de costos bajos”, reiteró.