“Nos estamos adaptando a las necesidades de un mercado que quiere controlar mucho más su experiencia”: Manuel Ambriz, CCO de Avianca

El jueves Avianca hizo uno de los anuncios más importantes de sus últimos años: la apertura de 23 nuevas rutas desde Colombia y otros países estratégicos para la compañía, como Ecuador, Costa Rica y Guatemala, con lo cual la empresa avanza en su plan de recuperación, luego de varios meses marcados por la pandemia del coronavirus, que ha afectado a toda la industria por igual.

Una de las cosas que más llamó la atención de estos nuevos itinerarios es que a Bogotá solo le tocó una ruta nueva, la cual conectará directamente con la ciudad de Toronto, Canadá. Según detalló en entrevista con SEMANA el director comercial de Avianca, Manuel Ambriz, esta decisión está relacionada con las persistentes limitantes operacionales de la terminal aérea de la capital y también para descongestionar El Dorado.

Sin embargo, el ejecutivo explicó que más que descentralizar la operación de la ciudad, en donde está gran parte del negocio de Avianca, ven oportunidades de crecimiento en regiones donde la demanda y el mercado viene expandiéndose de manera importante, como es el caso de Medellín y Cali, “que necesitan tener más rutas domésticas e internacionales”.

Desde Cali partirán vuelos a ciudades como Nueva York (Estados Unidos), Cancún, Ciudad de México (México), San José (Costa Rica) y Quito (Ecuador); mientras que desde Medellín se volará a Aruba, Ciudad de México, Orlando (Estados Unidos), San José, Quito y Guayaquil (Ecuador).

“Vemos que tenemos oportunidades de crecimiento con rutas que no habíamos operado antes y que ahora queremos tener. Con relación a esto, uno de los objetivos que tenemos es conectar mejor al país, pues hemos estado muchos años enfocados en Bogotá”, agregó Ambriz, quien se unió a la compañía hace un par de meses, luego de desempeñar importantes cargos en compañías como Vueling, Level o Volaris.

Reconfiguración de la flota

Otra de las apuestas que está haciendo Avianca para adaptarse cada vez más a las necesidades actuales del mercado aéreo colombiano es la reconfiguración de su flota, para lo cual ha integrado nuevos aviones que empezarán a cubrir tanto destinos nacionales, como internacionales próximamente.

Hace un par de semanas, la aerolínea anunció que con este proyecto se pondrá a la venta un 20 % más de sillas por avión, lo cual generará una disminución permanente en el precio de los tiquetes, al haber más oferta en el mercado; igualmente, reducirá la huella de carbono y el impacto ambiental que genera la operación.

Dentro de esta nueva estrategia también se cambiará la configuración de la flota existente de aviones A320 y además se incorporarán 20 nuevas aeronaves, que aun no cuentan con los ajustes definitivos de las cabinas y que en algunos casos también tienen diferencias con el look and feel actual, pero que se irán integrando de manera gradual, aunque Ambriz aseguró que las cabinas mantendrán su diferenciación, negando el rumor que existe sobre una posible desaparición de la zona ejecutiva en estos vuelos.

“(La reconfiguración) es algo que va a pasar para toda nuestra red, aunque vamos a empezar con el mercado doméstico, lo cierto es que extenderemos esto a todos los mercados para los que Avianca opera”, indicó el ejecutivo.

De igual forma, resaltó que otro de los objetivos de la empresa “es llevar su servicio a más geografías, más gente y a mejores precios”, lo cual se logrará teniendo más asientos en los mismos aviones.

Con esta nueva estrategia de costos, Avianca espera empezar a competir con precios del modelo low-cost, el cual se ha extendido no solo en Colombia, sino en el mercado global de las aerolíneas, pues los usuarios cada vez son más consientes de que solo quieren pagar por lo que usan, de modo que el mercado se ha ido enfocando en ofrecer tarifas que incluyan solo lo necesario para el pasajero.

“Nos estamos adaptando a la necesidades del mercado, que quiere controlar mucho más su experiencia”, manifestó Ambriz, quien además destacó que Colombia podría emular la experiencia de México, que hace 14 años logró duplicar el número de pasajeros transportados en el mercado doméstico.