Peluquerías, restaurantes y tiendas de barrio, entre los 509.370 micronegocios que sacrificó la pandemia

Las estadísticas confirman ahora lo que antes eran vaticinios: en 2020, el golpe de la pandemia ahogó más a los pequeños negocios, como peluquerías, tiendas, restaurantes, el negocio de supervivencia del mototaxista o de la señora que confecciona cortinas para vender entre su vecindario.

Según la encuesta presentada este martes por el DANE, entre enero y octubre se perdieron 509.370 micronegocios, lo que equivale a una reducción del 8,7 % en comparación con 2019. Los que salieron del aire pertenecían fundamentalmente a los sectores de la construcción, del agro y de la manufactura (2/3 partes estaban en esas ramas). Un resultado que llama la atención es que, en el segmento de alojamiento y servicios de comida se registró cierta estabilidad en el mantenimiento de los negocios e, incluso, hubo un sesgo hacia la expansión (aumentaron en 0,1 %), lo que puede estar reflejando que las personas buscaron refugio, tras la crisis, en iniciar una actividad para generar ingresos: venta de empanadas, por ejemplo.

La afectación mayor se dio en los emprendimientos, o muy recientes (menos de 3 años) o más antiguos (más de 10 años).

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La concentración de los pequeños negocios que salieron sacrificados en el periodo analizado está en la zona urbana, pero el área rural no escapó al coletazo, puesto que también se perdieron actividades de rebusque en fincas que producían cultivos frutales para vender a pequeña escala.

Durante los primeros meses de 2020, los micronegocios pasaron de ser 5.864.673 en 2019 y tenían un personal ocupado de 8.300.415. En 2020, cuando la cifra bajó a 5.355.303, la caída en puestos de trabajo fue del 13,1 %, con lo cual el personal ocupado quedó en 7.215.171.

Desconocen las ayudas

Varios hallazgos del DANE a través de la encuesta de micronegocios llaman la atención. El 64,1 % de las actividades que adelantan los colombianos, en pequeña escala, no tuvieron acceso a las ayudas que activó el Gobierno durante la pandemia para darle un salvavidas, a través de programas como el PAEF (Programa de Apoyo al Empleo Formal). Solo un 18,2 % aparecen aplicando efectivamente a algún tipo de apoyo estatal, según el informe.

De igual manera, el hecho de que de los 5,3 millones de micronegocios que quedaban vigentes a octubre de 2020, 4,1 millones no tuvieran RUT, es otro dato clave que refleja la alta informalidad empresarial en el país.

También es clave poner el visor en la estadística, según la cual los micronegocios que más desaparecieron fueron los creados por un único propietario y los que surgieron porque el iniciador no tenía ninguna otra alternativa para generar ingreso, lo que señala una gran afectación entre la población más vulnerable.