Economía
¿Qué llevó a la crisis financiera de Tigo?
El Gobierno se ha reunido con los socios para tratar de llegar a un acuerdo.
Una de las sorpresas en el sector empresarial y de las telecomunicaciones fue la crisis financiera de Tigo UNE, donde una de las opciones para salvarla sería una capitalización de las empresas que tienen la mayor parte accionaria de la empresa, en ese caso EPM con 50 % y Millicom con 49 %.
Sin embargo, hasta el momento, la única empresa, aparentemente interesada en el proceso de capitalización es Millicom.
Según esta entidad, se necesitan US$ 150 millones para que la compañía pueda seguir en pie y no afecte el servicio de los más de 12 millones de usuarios que tiene, informó en una carta enviada a Mauricio Lozano, ministro de las TIC.
“La necesidad de esta capitalización viene siendo discutida entre los socios —y apoyada con firmeza por Millicom— de tiempo atrás, por lo menos, desde el año 2022. El monto necesario de capital patrimonial a ser aportado por los accionistas, según la información brindada por la administración, asciende a un monto mínimo total de 150 millones de dólares”, se leía en la carta.
Tendencias
Las pérdidas de Tigo-UNE, durante 2022, ascendieron a 473.000 millones de pesos. Incluso, el mismo ministro, Mauricio Lozano, aseguró que la “situación es delicada” y señaló que el Gobierno le extendió el plazo a la empresa hasta octubre para presentar una garantía para el uso del espectro. Debido a sus números en rojo, la empresa no logró conseguir dicha garantía en septiembre.
Este martes 12 de septiembre, también se reunieron los propietarios de la empresa de telecomunicaciones y el Gobierno Nacional para llegar a acuerdos para salir al paso de la situación.
Lo que llevó a la crisis
De acuerdo con Alberto Samuel Yohai, presidente de la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones, quien asegura que no ha conocido los balances financieros de la compañía, desde su perspectiva desde afuera, algunas de las acciones que llevaron a esta crisis financiera a Tigo UNE remiten a los desafíos del sector.
“El año pasado hubo unos retos enormes que sobrepasaron el sector. En primer lugar, es un sector que exige unas inversiones y capital, las cuales son denominadas en dólares. Puedo suponer que en un año, como lo fue el 2022, que estuvo marcado por tanta volatilidad como la TRM (Tasa Representativa del Mercado) y un incremento importante, versus como el que se conocía como el normal, frente al año anterior, se fueron encareciendo”.
Otro de los puntos que destaca Yohai es el alza de las tasas de interés, de la que no solo ha sido víctima el país, sino todo el comercio mundial.
“Las tasas de interés también fueron creciendo. Puedo imaginar, sin conocer el detalle de los números de Tigo, ni el estado de resultados de la empresa, que eso generó algún descuadre. Por lo mismo, lo de la tasa, siendo empresas que generan ingresos en pesos colombianos, siendo menor a su valor en dólares, genera un desbalance sobre los números”.
Una bola de nieve
Como una especie de bola de nieve fue viviendo la compañía desde 2016, donde ya alertaba de ingresos en rojo por márgenes de pérdida y principalmente por deudas.
En 2016, la pérdida fue de $145.539 millones. No fue hasta 2021 cuando esta compañía presentó los números en rojo más altos en siete años con un total de $ 572.495 millones de pérdidas. En este período, solo vio ganancias durante 2019 con $ 26.699 millones.