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Reformar o transformar la salud: análisis desde la innovación
Por: José Mutis O., country manager para SAS Colombia & Ecuador.
Históricamente se ha sabido, pero es en los últimos años que lo hemos terminado de entender: la importancia que tiene en la sociedad y para los países y la economía, el tener sistemas de salud sólidos, eficientes y funcionales que impacten verdaderamente en mejores servicios para los usuarios y que sean lo suficientemente viables financieramente para subsidiar incluso a aquellas poblaciones que no puedan pagar por los servicios.
Buscar hacer más eficientes los sistemas de salud es una preocupación latente en todos los países latinoamericanos. En Colombia hemos venido hablando en el último tiempo del proyecto de reforma a la salud que el gobierno ha presentado y que ha sido y sigue siendo analizado por los diferentes frentes especializados y de opinión pública en el país.
Como representante de una empresa como SAS, que acompaña con sus soluciones de inteligencia artificial y analítica los procesos de transformación digital de la mayoría de las empresas de sectores como el de la salud en el mundo, quiero aportar al análisis desde el punto de vista de la innovación, que es de lo que me ocupo todos los días y de lo que se debería estar ocupando cada vez más el país con miras a su transformación digital y a su bienestar en el futuro.
El proyecto de ley a la reforma a la salud, tal y como quedó radicado y aprobado en primera instancia, abarca un total de 120 páginas en las que se incluye 19 veces la palabra “transformación” (ninguna asociada a “digital”), 2 veces las palabras “big data” y tan solo una vez la palabra “analítica” (y eso que la analítica es considerada como un pilar cada vez más importante en la transformación de las industrias en el mundo para el aprovechamiento de los datos en función de generar cada vez más innovación, eficiencia y crecimiento).
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En el total del texto se menciona ocho veces la “inteligencia artificial” y 20 veces la palabra “innovación”, ninguna de ellas asociada a “responsabilidad” y “ética” (un punto que es cada vez más relevante cuando se habla de incorporar temas de Inteligencia Artificial).
La reforma, en uno de sus apartes esenciales, plantea que “el nuevo sistema de salud desarrollará un sistema de información único, público, transparente, disponible en línea, que usando los últimos recursos tecnológicos de Big Data, Procesamiento Digital de Imágenes, cadena de bloques y demás recursos para Inteligencia Artificial, permita recuperar el máximo de información económica, clínica, científica, tecnológica, técnica y administrativa…”.
Y en su Artículo 89 menciona que “la plataforma tecnológica de la red de prestación de servicios tendrá las siguientes especificaciones:
1. Dispondrá de módulos de gestión de información de los servicios de la red, que permitan agenciar debidamente cada solicitud de remisión, así como el seguimiento y registro de toda referencia y contrarreferencia.
2. Estará conectada al Sistema Único Público de Información Integral en Salud y será parte del mismo.
3. Mantendrá la trazabilidad de manera inmodificable, con la posibilidad de generar los respectivos soportes, ofreciendo respaldo en la información a los requerimientos de la Auditoría Médica.
4. Poseerá la capacidad de generar datos que sirvan para la elaboración de reportes estadísticos y administrativos y la creación de un informe bimestral para la Administración Departamental, la Dirección Regional de Salud y el Ministerio de Salud y Protección Social.
5. Contará con tecnologías de última generación e inteligencia artificial que actualizan automáticamente y de manera continua la información para ser entregada en tiempo real al Sistema de Salud y conforme a las exigencias del Ministerio de Salud y Protección Social”.
Debemos reconocer que es positivo que ya se tengan en cuenta aspectos como estos en un proyecto de ley tan importante para el país y sus habitantes. Son buenos indicios, pero no resultan suficientes.
Tal y como lo establece el proyecto, el nuevo modelo de salud, está basado íntegramente “en un sistema Único de Información / Plenamente interoperable / Basado en tecnologías de última generación e inteligencia artificial” (esta es una de las 8 veces en las que se hace referencia directa a la inteligencia artificial). Las pocas referencias a las tecnologías que están presentes en el proyecto no dan claridad del cómo realmente se va a hacer la reforma del sector y por qué es importante apalancarse en las nuevas soluciones disponibles en el mercado gracias a la tecnología para lograr resultados en verdad valiosos.
Es claro para todos que hay que hacer cambios en un sector tan estratégico en la actualidad como es el de la salud. Se es consciente de la necesidad de incorporar soluciones de inteligencia artificial, analítica, big data, internet de las cosas y demás recursos y tecnologías avanzadas para modernizar el sector y hacerlo más eficiente. Pero hay que ser estratégicos en la manera en que se hagan los cambios no solo para que resulten bien en las necesidades actuales, sino para que anticipe escenarios futuros y pueda resolver los próximos desafíos que se puedan llegar a presentar.
Mi mensaje es que hay que ver este momento como el tiempo ideal para hacer transformaciones y no reformas y para ello es necesario acompañar las buenas intenciones que se puedan tener con quienes tienen la experiencia y el conocimiento para recorrer estos caminos e implementar las nuevas soluciones de la mejor manera posible. La participación de las empresas tecnológicas en esta transformación es más que definitiva.