“Salvemos a EPM de la debacle”, duro llamado de exmiembros de la junta directiva

Los miembros de la junta directiva de Empresa Públicas de Medellín, que renunciaron el año pasado en medio de una polémica, hicieron un llamado a la cautela y a que la compañía salga de la debacle en la que se encuentra.

Los exmiembros, que salieron de la junta al conocer la demanda de 9,9 billones de pesos en contra de los constructores, diseñadores e interventores de Hidroituango, emitieron un comunicado refiriéndose a la nueva crisis que se desató en EPM por cuenta de la confusa salida de la gerencia de Álvaro Rendón.

En primer lugar, indicaron que ven con mucha preocupación que en medio del debate político que se ha desatado en los últimos días, se han perdido de vista temas importantes como la sostenibilidad financiera, empresarial y operativa de EPM, y por consiguiente la estabilidad energética de Colombia.

Así mismo, agregaron que las actuaciones del alcalde de Medellín, Daniel Quintero, constituyen un “ataque inclemente, de impredecibles consecuencias, a los cimientos del gobierno corporativo que hicieron de EPM un referente de solidez y eficiencia empresarial”, y que además estas generaron un colapso de todos los canales que unían a la administración pública y al sector privado en Medellín.

También recordaron que ya se vienen presentando consecuencias tangibles por la violación al gobierno corporativo de EPM.

Entre estas, las advertencias de las calificadoras de riesgo, la incertidumbre frente al grupo en el sistema financiero nacional e internacional, la alta tensión entre los colaboradores y el desgaste importante en la confianza y reputación corporativa.

“¿Cómo seguirán reaccionando los acreedores de la empresa y las centrales de riesgo ante este nuevo desconocimiento de las más elementales reglas de manejo del gobierno corporativo? ¿Cuál es el norte estratégico con el que trabajan día a día los miles de empleados de EPM? ¿Cuál es la estabilidad que ofrece la compañía a quienes hoy son sus clientes y socios en Hidroituango y demás proyectos? ¿Se va a retrasar o no la entrada en operación de Hidroituango? ¿Qué piensan las autoridades y reguladores del sector, específicamente las Superintendencias Financieras y de Servicios Públicos al respecto? ¿El o la gerente entrante tendrá la idoneidad técnica y garantías reales para ejercer su cargo con independencia? ”, se preguntaron.

Bajo esta circunstancia, consideran que es es urgente convocar a una discusión para encontrar soluciones definitivas, corporativas y técnicas al margen del debate político. “La batalla campal que se construyó alrededor de EPM puede que le genere réditos a algunos de los actores involucrados, pero está llevando al traste una empresa que es patrimonio de los medellinenses y orgullo de los colombianos”, advirtieron.

Finalmente, indicaron que es urgente que se regrese a los lineamientos corporativos que hicieron que EPM fuera un referente empresarial para el continente.

“Por nuestra parte, seguiremos aportando ideas, propuestas, oídos abiertos y disposición. Salvemos de la debacle a EPM y al país de un riesgo para el sector energético innecesario, pero sobretodo, evitable”, concluyeron.

A pesar de que ya ha pasado más de una semana desde la salida de Rendón, el debate político en torno a EPM no cesa. En las últimas horas el expresidente Álvaro Uribe incluso dijo que el gobierno nacional debía intervenir a EPM, posibilidad que fue descartada de tajo por el presidente, Iván Duque.

Por su parte, el Alcalde Quintero le dijo a Uribe no llame al pánico económico. “Una vez renunció una junta a toda velocidad, esa renuncia se convirtió en una baja de la calificación. Imagínese a un expresidente del partido de Gobierno pidiendo que se intervenga y diciendo que se va a bajar la calificación y haciendo toda una serie de cuentas de lo que perdería la empresa si se baja la calificación, cuando las calificadoras lo que han dicho es que se mantiene”, aseguró Quintero”, advirtió.