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Se cayó el crédito de EPM con el BID para Hidroituango, ¿por qué tendrán que pagar por anticipado?
No hay claridad en la prórroga con los contratistas. Había un hito que decía que en octubre debían tener claro quién continuaría con la obra. Gerente de EPM dio las explicaciones del caso.
Pese a que EPM (Empresas Públicas de Medellín) insistía en que mantenía conversaciones permanentes con el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) sobre el crédito que estaba vigente para financiar Hidroituango, finalmente se cayó el proceso, por lo cual, la empresa tendrá que hacer el pago de manera anticipada, de lo que ya le había desembolsado la entidad de la banca internacional.
Según expresó el gerente de EPM, Jorge Carrillo, durante una rueda de prensa realizada este jueves en Medellín, existía un hito en medio del crédito con el BID, que era de 900 millones de dólares, del cual, ya se había hecho un desembolso de 450 millones de dólares.
El mencionado hito implicaba que, a 30 de octubre de 2021, EPM debía tener resuelto el tema de continuidad del contrato con el consorcio constructor, cuya vigencia es el 31 de diciembre de 2021.
Luego de conocer el fallo de primera instancia de la Contraloría General, que involucró como responsables fiscales a 26 personas naturales y jurídicos, entre ellos, al constructor de la hidroeléctrica, el BID empezó a mostrar su preocupación y a anunciar que se retiraría, como financiador del proyecto, ante la inseguridad que generaba el eventual cambio de contratista.
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Para ese momento, EPM señalaba de manera reiterada que se mantenía en conversaciones con el organismo de la banca multilateral. Este jueves, se dio a conocer que las conversaciones, apuntaban, entre otras, a extender ese plazo estipulado en el mencionado hito (30 de octubre), mientras se resolvía el tema de la continuidad del contratista. Dicho plazo -en medio de los diálogos- se extendió hasta el 30 de noviembre, motivo por el cual, apenas empezó diciembre, fue anunciado el pago anticipado que hará EPM a el BID. En otras palabras, se cayó el crédito con la entidad financiadora.
De forma paralela, se adelantaban reuniones con los contratistas para establecer una posible prórroga. El preacuerdo suscrito y anunciado a la opinión pública hablaba de 8 meses, los cuales, según explicó Carrillo, continúan en pie, pues lo único que no se puede permitir EPM es suspender el avance de la obra, con la cual, se ha prometido que en el segundo semestre de 2022, habrán prendido dos de las 8 turbinas que incluye la hidroeléctrica para suministrar energía al país.
Cuando apareció el fallo de segunda instancia de la Contraloría general, de nuevo, varias cosas cambiaron. La decisión del organismo de control pasó al Consejo de Estado, en donde resolverán -entre otras- la inhabilidad de los contratistas, quienes hacen parte de los 26 imputados con responsabilidad fiscal, por los daños que ha ocasionado la falla ocurrida en 2018, en el proyecto Ituango. Esa situación ha ocasionado demora en la entrada en operación de la generadora de energía, y sobrecostos.
Dentro de las explicaciones entregadas por el gerente de EPM, sobre el pago anticipado del crédito a el BID, hay que señalar que, se llegó a un acuerdo, luego de los análisis jurídicos del caso, para hacer el pago de un solo envión. Pero, en ningún momento se afectará la financiación del proyecto, el cual requiere en total una inversión de $18,3 billones.
Tampoco habrá un impacto sobre las finanzas de EPM, entidad que, según se mencionó en la rueda de prensa, está sana financieramente. De hecho, la plata para pagarle anticipadamente -y de contado al BID- saldrá de la caja que tiene disponible EPM, mientras que se recordó que la compañía adelanta un plan de desinversión de algunos de los activos que tiene, entre ellos, su participación en UNE.
Tres alternativas
La continuidad de las obras en Hidroituango es la prioridad y la preocupación de todos los colombianos. El gerente Carrillo indicó que han previsto varios escenarios, de manera que puedan actuar para que las obras no se detengan ni por un segundo.
En este momento siguen siendo ejecutadas por el consorcio CCC Ituango, cuyo contrato vence el 31 de diciembre. Avanzan en conversaciones con ellos sobre una prórroga, pues, “en estos momentos, no están inhabilitados”. De manera simultánea, se lanzó el famoso Plan Mireya, que, según confirmó Carrillo, está inactivo, pues es una medida contingente que se utilizará en el eventual caso que no se llegue a un acuerdo de prórroga con los actuales contratistas o que el concepto del Consejo de Estado los inhabilite. También se hará el lanzamiento de una licitación para contratar nuevos constructores o recibir a los que el CCC Ituango les ceda el contrato, según el derecho que les asiste.
Lo cierto es que, desde EPM señalan que trabajan para buscar todas las alternativas necesarias, de forma que el encendido de las primeras turbinas sea una realidad en el momento en que está previsto en el cronograma.