Tiquetes a Bucaramanga se disparan ante posible debate entre Gustavo Petro y Rodolfo Hernández

Las aerolíneas que viajan a Bucaramanga quieren “hacer su agosto” gracias al “novelón” que se armó en el país a raíz del debate presidencial que ordenó el Tribunal Superior de Bogotá entre Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, antes de las elecciones programadas para este domingo 19 de junio.

Aunque en un principio Rodolfo Hernández estaba reacio a participar en este debate por considerar que era una “vía de abuso descarado e inconstitucional”, finalmente dijo que sí, pero con la condición de que se hiciera en la ciudad de Bucaramanga por “temas de seguridad”.

Aprovechando esta coyuntura, varias aerolíneas tienen los precios de los tiquetes por las nubes para viajar desde Bogotá hacia la capital de Santander, que actualmente es el lugar de residencia del candidato de la Liga de Gobernantes Anticorrupción.

Por ejemplo, en Avianca, solo el tiquete de ida cuesta 1.061.340 o 946.850 pesos, si la idea es viajar este jueves. El viernes se pueden conseguir pasajes un poco más económicos, los precios van desde los 306.770 hasta 1.061.340 pesos, dependiendo de la hora que se elija.

Si se llega a confirmar el debate presidencial, ya que hasta ahora no hay nada fijo, los pasajeros pueden pagar el sábado unos tiquetes que pueden estar entre los 266.770 y 631.260 pesos por un solo trayecto para llegar a la Ciudad Bonita.

Otra aerolínea que viaja a Bucaramanga es Latam Airlines, que ofrece un solo tiquete por 1.102.460 o 810.350 pesos para este jueves, mientras que para el viernes el más económico se consigue en 269.500 pesos. Quienes quieran viajar el sábado tendrán que pagar entre 235.900 y 415.660 pesos, dependiendo de la hora del vuelo.

Por su parte, Viva Air ofrece pasajes más asequibles para el bolsillo. Para hoy jueves se pueden comprar en, mínimo, 182.240 pesos, mientras que para el viernes solo hay un vuelo y cuesta 514.100 pesos, al igual que el sábado, pero ya el valor disminuye a 262.100 pesos.

El debate sí, pero no así

Desde el primer momento, Gustavo Petro le dijo que sí al debate. Caso contrario pasó con Rodolfo Hernández, que se demoró un buen tiempo en aceptar, ya que considera que la forma en que se consiguió que se realizara es ilegal. Además, enumeró varias condiciones para poder estar presente.

Por ejemplo, en el debate deben participar Marelen Castillo (fórmula vicepresidencial); Érika Sánchez, representante a la cámara electa por la LIGA; Adriana Vargas, coordinadora voluntaria de la campaña; Luisa Olejua, encargada de comunicaciones; Óscar Hernández, abogado que atendió la tutela, y Carlos Lemus, coordinador de voluntarios.

También pidió que se tengan en cuenta temas como la “campaña sucia de desprestigio de contendores políticos, alianzas politiqueras de los candidatos, uso abusivo de recursos del presupuesto para las campañas, violación de los topes de gastos, fuentes de financiación oscuras de la campaña y disposición de aceptar simple y llanamente los resultados electorales o condicionamiento a si única y exclusivamente le son favorables”.

Así mismo, Hernández le hizo un llamado a Petro para que asegure quién costeará los gastos de la transmisión en RTVC. “Supongo que usted dispondrá de sus multimillonarios recursos, lo pertinente, porque de mi parte no destinaré un solo peso, porque además considero que es un derroche innecesario de dineros”, le dijo.

Igualmente, le dijo al candidato del Pacto Histórico que él debe correr con los gastos de viaje de las seis personas que impusieron la tutela, ya que ellos deben asistir, so pena de incurrir en desacato al fallo dado por los magistrados.

El candidato de la Liga de Gobernantes Anticorrupción también afirmó que espera que las conductoras del debate sean Vicky Dávila, Darcy Quinn y Jessica de la Peña, así como tres hombres que se designen por mutuo acuerdo.