EMPRESAS

Transporte intermunicipal de pasajeros reporta pérdidas superiores a los $20.000 millones ante bloqueos en vías nacionales

El gremio pidió que se adelanten las mesas de negociación con todos los actores involucrados en el paro nacional.

5 de mayo de 2021
Terminal Salitre Bogotá, Semana
Foto Guillermo Torres Reina / Semana
Terminal Salitre Bogotá, Semana Foto Guillermo Torres Reina / Semana | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

El sector de transporte de pasajeros también se ha visto afectado por cuenta de las jornadas de movilización que se han convocado en el país desde el pasado 28 de abril, pues debido al cierre de las vías nacionales y departamentales, las rutas no se han operado en su totalidad.

La Asociación para el Desarrollo Integral de Transporte Terrestre Intermunicipal (Aditt) señaló que los actos de violencia y vandalismo en diferentes departamentos del país han generado pérdidas de por lo menos $20.000 millones de pesos en este sector.

“Rechazamos todos los actos de violencia y los bloqueos en las vías que se han presentado en los últimos días, especialmente en los departamentos del Valle del Cauca, Cauca, Cundinamarca, Meta y Antioquia. Las alteraciones al orden público han generado temor en la ciudadanía y varias terminales de transporte han tenido que dejar de prestar el servicio. Así mismo, los despachos de vehículos por los corredores viales en donde se presentan bloqueos han sido suspendidos”, destacó el presidente de la Asociación, José Yesid Rodríguez.

Según Rodríguez, los empresarios de este sector han rechazado cierto tipo de iniciativas en el Congreso de la República que buscan crear el régimen regulatorio del sector transporte con enormes vacíos contra la informalidad y la ilegalidad, que hoy operan libremente sin controles ni sanciones, afectando directamente el sector formal del transporte terrestre.

Sin embargo, el líder gremial asegura que las vías de hecho, los bloqueos y el vandalismo no son el ingrediente que el país necesita para salir de la crisis. Junto a esto, invitó al Gobierno nacional y a todos los involucrados en las manifestaciones, a iniciar mesas de negociaciones “para lograr salidas concertadas” y que a la crisis generada por la pandemia “no se le puede sumar la violencia”.

A esto, Rodríguez añadió: “Todo tipo de manifestaciones y protestas deben realizarse de manera pacífica. La crisis generada por la pandemia nos ha dejado consecuencias económicas enormes, razón por la cual es esencial que el Gobierno nacional establezca medidas urgentes e inmediatas con todos los sectores, generando incentivos y alivios reales para las empresas formales, de tal forma que podamos contribuir a la generación de empleo y a la reactivación económica que tanto necesita el país, (pues) de lo contrario se produciría una quiebra masiva empresarial”.

La preocupación del sector de transporte de pasajeros ha sido la misma expresada también por el sector de transporte de carga y de los gremios agricultores y campesinos del país, que reclaman a las autoridades garantías para poder movilizar sus productos y que se realice el abastecimiento correspondiente de las principales ciudades del país, hasta ahora, las más afectadas por el paro.

A pesar del anuncio del Gobierno de retirar el proyecto de reforma tributaria, no se observa ninguna voluntad por parte de los manifestantes de levantar su movimiento, lo que pone en grave riesgo la estabilidad del país. De seguir estas protestas acompañadas de vías de hecho, se agravará el desabastecimiento dando lugar a una situación crítica”, expresó la presidenta del gremio, Nidia Hernández.

Por su parte, el presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie, manifestó su preocupación por los productos cárnicos y lácteos que se están perdiendo producto de los bloqueos y las complicaciones existentes para cumplir con la cadena de abastecimiento.

“En nuestro caso son miles de litros de leche botados por las alcantarillas y la imposibilidad de llevar el ganado a los centros de sacrificio, porque unos señores, que se autoproclaman pacíficos, deciden poner palos y piedras en las vías, impidiendo la libre movilización de personas y productos. No hay mayor violencia que coartar la libertad e impedir el derecho al trabajo y la subsistencia”, precisó.