Ultra Air suspendió la venta de tiquetes hasta el 30 de abril. Los vuelos en Colombia quedaron cancelados

A un año de haber iniciado operaciones en el país, Ultra Air enfrenta dificultades que están poniendo en riesgo la continuidad de sus servicios, situación que ha llevado a la empresa a informar sobre la suspensión temporal de venta de tiquetes.

De acuerdo con información suministrada por el área de comunicaciones de la aerolínea de bajo costo, desde este jueves 23 de marzo y hasta el 30 de abril, no habrá venta de tiquetes “con el fin de reorganizar la operación para así cumplirle a los pasajeros y evitar contratiempos”.

Aclaró además que si bien se suspendieron las ventas, los usuarios que tengan reservas programadas en las fechas mencionadas, se les cumplirá el itinerario; al tiempo que indicó que cualquier novedad será notificada por los canales de información de la compañía.

Este anuncio de Ultra Air se da a conocer tras una serie de acontecimientos que se han presentado en las últimas 36 horas, por cuenta de la cancelación y reprogramación de vuelos, que han afectado a decenas de pasajeros en el Aeropuerto

“En el día de ayer se presentaron novedades con dos aeronaves las cuales sufrieron afectaciones técnicas, por lo cual se reprogramarán seis vuelos de hoy para los días posteriores”, informó.

En vista de esta situación, la Aeronáutica Civil a informar que viene realizando un seguimiento prioritario a lo que se viene registrando en la aerolínea de bajo costo. Aunque la autoridad indicó que Ultra Air continúa volando, precisó que presenta una reducción en su capacidad operacional por motivos técnicos; por lo que requirió a las directivas de la compañía aérea “para que informen y actualicen las condiciones actuales de sus operaciones”.

A esto se le suma que, de parte de la Superintendencia de Transporte, dictó una serie de medidas en torno a la compañía, debido a que presenta baja liquidez, lo cual dificulta el compromiso con las obligaciones a corto plazo, generando un riesgo de incumplimiento con sus acreedores. Indicando, también que la situación contractual relacionada con las aeronaves dispuestas para la prestación del servicio, refleja una posible vulnerabilidad a la capacidad operativa que permita cumplir con su objeto social, así como con las obligaciones a su cargo, principalmente aquellas relacionadas con proveedores y ventas anticipadas de tiquetes.

De acuerdo con lo expresado por el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, y la Superintendente de Transporte, Ayda Lucy Ospina, la aerolínea tiene seis aviones en operación y hasta el momento la aerolínea no ha incumplido con ninguna ruta. Sin embargo, manifestaron ambas funcionarios que se pudo verificar que ésta tiene problemas financieros, como lo han tenido la mayor parte de las aerolíneas, que han enfrentado un largo periodo de dificultades; derivadas por los impactos de la pandemia por la Covid-19, el aumento de la inflación y del valor de los tiquetes aéreos.

Por su parte, Ultra Air ha solicitado el apoyo del Gobierno nacional para continuar prestando sus servicios, reconociendo además que con la salida de JetSmart que desistió del proceso de compra que se venía adelantando, esto ha obligado a ajustar su operación; por lo que con inversionistas y banqueros se encuentra trabajando para implementar acciones que permitan mantenerse en el mercado aéreo.

“Reiteramos nuestra solicitud de apoyo al Gobierno Nacional con el fin de continuar prestando el servicio público esencial de trasporte aéreo de pasajeros, que es fundamental para la conectividad y el turismo, renglón primario de la economía de muchas regiones del país. Como empresa netamente colombiana, seguimos trabajando con nuestros 350 colaboradores directos, 1500 indirectos, proveedores, accionistas y las autoridades para defender el bajo costo en favor de todos los colombianos”, se lee en el comunicado emitido por la aerolínea.

La situación de Ultra Air se da a conocer a menos de un mes del cese de operaciones de Viva Air, por lo que hay temor dentro de la industria aérea colombiana de que más aerolíneas estén presentando situaciones similares y que con ello, se ponga en jaque la competitividad y crecimiento del país.