Economía
Unión Europea fijó plazo de dos meses a Twitter para cumplir su nueva ley de contenidos en línea
La plataforma tiene hasta el 25 de agosto para cumplir con la ambiciosa ley europea.
La Unión Europea advirtió el jueves al dueño de Twitter, Elon Musk, que la plataforma tiene hasta el 25 de agosto para cumplir con la ambiciosa ley europea sobre contenidos en línea y moderar los mensajes peligrosos.
“Si la tecnología no está lista, deben tener suficientes recursos para igualar la brecha. Hablé de este tema en específico con Elon Musk”, dijo a periodistas el comisionado europeo Thierry Breton, tras una reunión en la sede de Twitter en la que también estuvo presente la nueva directora ejecutiva de la plataforma, Lina Yaccarino.
Breton dijo que comunicó al equipo de Twitter —Musk partícipe por videoconferencia desde Nueva York— que “hay algunas áreas que serán críticas de inmediato cuando el reglamento sea aplicable”.
Se trata “específicamente de todo lo relacionado con el abuso infantil, que es un tema capital para nosotros en Europa, también la desinformación en las elecciones”, según Breton.
La visita de dos días a San Francisco del mayor comisionado europeo de tecnología se produce apenas semanas después de que la Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés) del bloque europeo caiga sobre las grandes plataformas, incluidas Facebook e Instagram, así como TikTok y Twitter.
Toda la atención está sobre Musk, quien desde que tomó control de la red social del pajarito, ha modificado de forma abrupta muchas reglas sobre qué lenguaje está permitido en la plataforma, incluso si se considera ofensivo o si implica odio o desinformación.
Esto está en directa contraposición con la nueva legislación europea. En una visita a París la semana pasada, Musk aseguró tener toda la intención de cumplir con las demandas de la DSA, una ambición que el bloque europeo saludó.
Pero con la nómina de Twitter recortada al mínimo y los equipos de moderación de contenidos diezmados, los observadores dudan de que Musk esté en condiciones de mantener su compromiso.
Elon Musk insistió en la regulación de las IA en Vivatech 2023
Elon Musk habló hace unos días con el Chairman of the Supervisory Board of Publicis Groupe, Maurice Lévy, en el marco de Vivatech (París), a la que también se han unido la CEO de Orange, Christel Heydemann; Image & Environnement LVMH, Antoine Arnault; y la Chief Digital and Marketing Officer de L’Orèal, Asmita Dubey, sobre Neuralink, la empresa centrada en la integración de tecnología de inteligencia artificial en el cerebro humano, Musk ha compartido que planean tener el primer dispositivo de implante humano a finales de año.
Se dirigirá a personas con tetraplejia, que han perdido la conexión del cerebro con el cuerpo, para que puedan recuperar el movimiento.
Musk, que también apoyó la creación de OpenIA en sus inicios, ha destacado en la necesidad de regular las superinteligencias, insistiendo en la idea de que pueden tener “resultados catastróficos” para la civilización si la inteligencia artificial generativa no se crea con cuidado.
Así mismo, afirmó que es consciente de que la adquisición de Twitter ha sido una apuesta cara, pero confía en que los cambios que está haciendo, en su visión de proteger la libertad de expresión, acaben convenciendo a los usuarios más críticos.
Lévy repasó su carrera, en la que hay fundación, cofundación y ayuda a la fundación de distintas empresas, como Tesla, PayPal, XpaceX, y OpenAI. Twitter, sin embargo, llegó a su currículo mediante la adquisición que cerró en octubre de 2022, por 44.000 millones de dólares (una cifra similar en euros).
“Si soy tan inteligente por qué pagué tanto por Twitter”, cuestiona a modo de broma. Antes de ser el dueño era un usuario, y de esta experiencia aprendió lo que, para él, estaba mal en la popular plataforma. Empezando por el tratamiento que hacían sus anteriores responsables de la libertad de expresión, un tema con el que siempre fue crítico.
Su idea de la libertad de expresión es que la gente se expresa, sin importar si lo que dice no guste a los demás. Incluso si resulta ofensivo o hace daño. “Queremos asegurarnos de que digan lo que no pueden decir en el lugar del que vienen. En cierta forma es una señal de salud”, dijo.
*Con información de AFP.