BIENESTAR
Atención integral en salud. ¿Qué tanto se aplica en Colombia?
La gestión de otros aspectos, diferentes a la salud, cobra cada vez más relevancia. ¿Cómo lograr esa integralidad?
La salud y el bienestar son uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y una de las justificaciones de la entidad para que estos sean priorizados en los países en desarrollo, expresamente reza: “El acceso a la salud y al bienestar es un derecho humano, y esta es la razón por la que la Agenda para el Desarrollo Sostenible ofrece una nueva oportunidad de garantizar que todas las personas, no solo las de mayor poder adquisitivo, puedan acceder a los más altos niveles de asistencia sanitaria”.
Aunque la ONU hace especial énfasis en la labor que debe adelantarse en el área de la salud, en tanto se estima que al menos 400 millones de personas en el mundo no tienen acceso a servicios básicos de esta índole, también advierte sobre la importancia de gestionar otro tipo de aspectos que contribuyen al mejoramiento de la calidad de vida.
Y, precisamente, una de las conclusiones del World Happiness Report 2021, publicación anual desarrollada por ese Organismo Internacional, es la necesidad de que entidades públicas y privadas propendan por el bienestar de las personas a través de programas que impacten positivamente las finanzas, la formación, las condiciones laborales, y la salud física y mental, entre otros aspectos.
Esta mirada holística del ser y de sus necesidades guía los esfuerzos de entidades como Compensar, que desde hace varios años viene trabajando en la implementación de un innovador modelo integrado de servicios de salud y caja, que involucra en la atención de los usuarios tanto a profesionales de la salud como de otras áreas, entre ellas, acondicionamiento físico, expertos en manejo de estrés, finanzas sanas, entre otros.
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“Este es el gran propósito que nos hemos trazado como organización, a través de la creación de un ecosistema de bienestar integral que transforma la experiencia de nuestros usuarios”, explica Jorge Guevara, gerente del modelo de salud de Compensar.
Salud: más que la ausencia de enfermedad
La definición de salud de la OMS como un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente como la ausencia de enfermedad, ratifica la importancia de desarrollar iniciativas para intervenir progresivamente en cada uno de estos aspectos, a fin de contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas y a empoderarlas para afrontar de la mejor manera posible los desafíos presentes y futuros, y, en línea con ello, Guevara agrega: “En Compensar no entendemos la salud como la carencia de enfermedad, sino como una oportunidad de mejorar la calidad de vida de las personas, trabajando en pro de su equilibrio físico, mental, social y espiritual’'.
Y justamente, en este sentido, la organización viene articulando cada vez más los esfuerzos entre sus unidades de Bienestar y Salud, lo que, según Juan Manuel Rivadeneira, gerente de Recreación, Educación y Deporte, ha permitido profundizar esta mirada global y desarrollar, por el momento, tres programas bandera:
1. Bienestar para el adulto mayor: este programa, dirigido a personas mayores de 60 años involucra en la atención a profesionales de la salud y a docentes del área de bienestar, mediante actividades enfocadas en el fortalecimiento de la motricidad, la estabilidad y el equilibrio, espacios de relacionamiento, entre otras. En este caso, según explica el gerente del modelo de salud de la entidad, los tratamientos farmacológicos son complementados con los no farmacológicos, estos últimos, “de cara a la implementación y fortalecimiento de hábitos saludables”.
Adicionalmente, en este segmento poblacional, se destaca la construcción de un Centro Especial para el adulto mayor, en Fusagasugá, Cundinamarca, que actualmente adelante Compensar y que tendrá capacidad para alojamientos de corta y larga estancia de 60 adultos mayores.
“Además de tener un clima que favorece su salud, este centro cuenta con amplias zonas verdes que les permitirá conectarse con la naturaleza, y piscinas, donde trabajarán actividades de motricidad dirigidas por docentes de bienestar”, profundiza Rivadeneira.
2. Centros de Bienestar Integral (CBI): se trata de sedes livianas y versátiles, ubicadas estratégicamente para facilitar el acceso a los afiliados a Compensar, quienes pueden encontrar en ellas una amplia oferta de servicios articulados con sus necesidades, así lo afirma Rivadeneira: “Esta metodología la estamos aplicando en las sedes San Roque, Chía, Sede Integral Suba y Autopista Sur, donde los afiliados con diagnósticos de hipertensión, obesidad o diabetes, por ejemplo, son objeto de una intervención global que involucra actividad física y programas de bienestar emocional, reportándose, por ejemplo, mejoras significativas en su fuerza muscular, elasticidad y peso”.
3. Atención a población vulnerable: dentro de los planes dirigidos a este segmento, se destaca Corazones Conscientes, del que hacen parte 253 colaboradores de Compensar con alto riesgo cardiovascular, además de programas abiertos de cuidados paliativos, para personas con diagnósticos terminales, otro para sobrevivientes de cáncer y uno más, enfocado en el cuidado de niños y niñas con enfermedades huérfanas o raras, este último, denominado Corazones Valientes, coordinado en alianza con el Instituto Roosevelt, gracias al cual se ha logrado disminuir, en este grupo de menores, las hospitalizaciones en Unidad de Cuidados Intensivos en un 80 por ciento y las urgencias en el orden del 55 por ciento.
El reto: ciudadanos productivos, saludables y felices
Según estimaciones de Compensar, mediante su modelo de bienestar integral, para el cierre de este año, espera haber impactado directamente a alrededor de 12.000 personas. Sin embargo, el reto será llegar a sus más de 4 millones de afiliados, tanto a caja como a salud, promoviendo de esta manera ciudadanos cada vez más productivos, saludables y felices. “Actualmente, los participantes de los programas llenan una encuesta de autopercepción de su bienestar, antes y después de ingresar, y es muy gratificante ver que el 90 por ciento de ellos mejoran su autopercepción a niveles de bienestar positivo. Eso es lo que queremos lograr con todas las personas que se irán vinculando”, concluyó Jorge Guevara.