Petróleo
El petróleo sigue afectado por la Opep+ y no sale de sus niveles más bajos del año
Su precio ha cedido más de un 40 % en los últimos seis meses.
Tras haber rozado récords históricos en marzo, los precios del petróleo cayeron fuertemente hasta rondar su nivel de principios de 2022, con la parálisis económica eclipsando el temor a la escasez por la guerra en Ucrania.
El declive podría incitar a los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y a sus socios de la OPEP+, empezando por Rusia, a ajustar su oferta y así intentar incentivar los precios en la reunión que celebrarán el domingo.
Las dos referencias mundiales del crudo están ahora muy lejos de sus niveles alcanzados en marzo, cuando casi registraron máximos históricos, a más de 130 dólares el barril, unos días después de que empezara la invasión rusa de Ucrania. Desde entonces, el WTI perdió un 43 % y el Brent, un 41 %.
Basta con recordar los resultados del pasado viernes -25 de noviembre- cuando las cotizaciones del petróleo terminaron a la baja y el Brent del mar del Norte para entrega en enero cerró así con caída de 2,08 % a 83,63 dólares en Londres, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) para igual entrega cedió 2,12 % a 76,28 dólares.
El descenso se produce en medio de una inflación dominante, con el fantasma de la recesión planeando sobre el Reino Unido y otros países y un incremento de casos de covid-19 en China, segundo país consumidor y primer importador de crudo del mundo.
El aumento de casos de coronavirus en China, aunque su número siga siendo bajo en relación con los 1.400 millones de habitantes que tiene el país, “incrementa la probabilidad de un confinamiento generalizado”, subrayó Caroline Bain, analista de Capital Economics.
Además, la aplicación de Pekín de su política “cero covid”, que conlleva confinamientos masivos y test PCR casi diarios, “ha perjudicado gravemente al crecimiento de la segunda economía mundial y,por ende, a la demanda de crudo”, afirmó por su parte Craig Erlam, analista en Oanda.
Los analistas no descartan que la OPEP y sus socios decidan reducir de nuevo sus objetivos de producción para apoyar los precios, que son ya inferiores a los de octubre, cuando la alianza decidió recortar drásticamente sus cuotas de producción para noviembre, a 2 millones de barriles diarios.
Los inversores están también pendientes de las discusiones en torno a una limitación del precio del petróleo ruso, defendida por una coalición de países del G7, la Unión Europea y Australia. Pero queda por ver cómo reaccionaría Rusia a ese tipo de medida, pues el Kremlin ya advirtió que Moscú dejará de suministrar petróleo a quienes apliquen esa iniciativa.
La mirada puesta en Venezuela
El gobierno de Nicolás Maduro y la oposición de Venezuela firmaron el pasado sábado en México un acuerdo para liberar 3.000 millones de dólares bloqueados por sanciones, al que Estados Unidos respondió con una flexibilización de sus restricciones petroleras contra este país.
Tras el convenio, en la reactivación de negociaciones después de 15 meses de suspensión, la administración de Joe Biden autorizó al gigante energético Chevron a retomar parcialmente sus actividades de extracción de petróleo en Venezuela.
Delegados del presidente Nicolás Maduro y la oposición acordaron “hacer todas las gestiones ante las autoridades e instituciones, nacionales y extranjeras” para “obtener los fondos legítimos de la República que se encuentren congelados en el sistema financiero internacional” y utilizarlos en proyectos sociales.
Estados Unidos saludó este acuerdo de “protección comercial” y resal tó que permitirá un alivio inmediato de las sanciones impuestas por Washington a Caracas.
“Nos unimos a la comunidad internacional en saludar el reinicio de negociaciones” entre las dos partes, luego de casi un año y medio de parálisis, expresó una alta fuente del gobierno estadounidense sobre las tratativas relanzadas en México.
El informante señaló a la AFP que el acuerdo da cuenta de “importantes pasos en la dirección correcta” en Venezuela, que recibió minutos después un alivio de sanciones con la autorización de Washington a Chevron para retomar parcialmente sus actividades de extracción petrolera en el país caribeño.
Según el Departamento del Tesoro, Chevron puede retomar en parte las actividades de la empresa de la que es copropietaria en Venezuela con la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), si se asegura que “PDVSA no reciba ningún ingreso de las ventas de petróleo realizadas por Chevron”.
En un comunicado, Chevron confirmó que había recibido la autorización para reanudar parcialmente sus operaciones y reiteró su “compromiso de llevar a cabo nuestra actividad dentro del marco normativo impuesto” para “seguir siendo una presencia constructiva en el país”.
*Con información de AFP.