Inversión
Este es el panorama que los inversionistas institucionales contemplan para el 2022
Los inversionistas consideran, entre otras cosas, que la covid-19 ha influido en las perspectivas que se tienen del sector de las tecnologías de la información.
Los inversionistas institucionales son los grandes protagonistas en el movimiento de los recursos en el mundo y, en muchos casos, la gasolina para el desarrollo de proyectos y el crecimiento en la valoración de las empresas.
Se trata de las inversiones que hacen los fondos de pensiones –públicos y privados-, aseguradoras, fundaciones y fondos soberanos, entre otros. Sus apuestas son clave para determinar el rumbo de los negocios y la economía global.
Natixis Investment Managers –una de las gestoras de activos más importantes de planeta- encuestó a 500 inversores institucionales que gestionan colectivamente 13,2 billones (millones de millones) de dólares en activos en todo el planeta.
El 62 % de los inversionistas institucionales espera que la demanda reprimida de artículos de gran valor sea un importante motor de crecimiento en 2022, lo que se conoce como “gastos aplazados por la pandemia” (revenge spending).
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Sin embargo, las preocupaciones también son evidentes. La mayoría de los encuestados cree que los responsables políticos tienen en última instancia las claves de la recuperación económica y que esas políticas están detrás del actual desequilibrio de la oferta y la demanda, la inflación y las valoraciones distorsionadas de las acciones. Casi siete de cada diez (68 %) creen que cuando los bancos centrales dejen de imprimir dinero, el largo mercado alcista llegará a su fin, pero no será en 2022.
La encuesta reveló que los inversores institucionales tienen previsto realizar pocos cambios generales en su asignación general a las acciones (39 %), los bonos (37 %), el efectivo (5 %) y las alternativas u otras (19 %) en el año que viene. En cambio, se están posicionando para hacer movimientos tácticos.
Frente a las inquietudes que los asisten, para siete de cada diez inversionistas institucionales encuestados el aumento de la inflación es el principal riesgo de la cartera, aunque son más propensos a creer que es estructural (55 %) que cíclico (45 %), resultado de una combinación de política monetaria flexible y bajos tipos de interés.
La inflación plantea una serie de problemas económicos a largo plazo, pero la política de tipos de interés deja en su concepto retos de inversión más inmediatos a los equipos institucionales, ya que el 64 % de los encuestados cita los tipos de interés como principal riesgo de la cartera.
Más de la mitad (56 %) considera que las interrupciones de la cadena de suministro son el mayor riesgo para la recuperación. Los bancos centrales desempeñan un papel destacado en la evolución de los mercados para las instituciones y el 47 % considera que una política menos favorable es un riesgo. Aunque los factores económicos tradicionales son los mayores riesgos en este momento, las nuevas variantes de la pandemia, como ómicron, siguen ocupando el tercer lugar en su lista de riesgos económicos.
A pesar de ello, el 60 % afirma que cree que la vida volverá a la normalidad pre-covid después de la pandemia, lo que se espera que se refleje en las tendencias comerciales.
“Las instituciones se centran menos en el streaming y los productos digitales, y predicen en cambio que veremos experiencias en persona, como teatros, restaurantes y viajes, superando al comercio en casa, como las compras online y Netflix”, asegura la firma.
Más de una década de tipos bajos, y algunos incluso en territorio negativo durante la pandemia, han hecho que las instituciones busquen con mayor intensidad la rentabilidad. Los activos privados y los alternativos han sido buscados en 2021, con el 84 % de los inversionistas institucionales invirtiendo ahora en capital privado, el 81 % en deuda privada y el 81 % en infraestructuras.
Para 2022, los inversionistas han señalado como sectores más atractivos las tecnologías de la información (45 %), la sanidad (41 %) y las infraestructuras (40 %), seguidos de la energía (34 %).
Sin embargo, menos de la mitad de los encuestados (45 %) cree que los activos privados ofrecerán un refugio seguro en caso de corrección del mercado, ya que los mercados privados siguen subiendo hasta alcanzar un nivel récord.
Al 69 % de los encuestados le preocupa que las instituciones hayan asumido demasiado riesgo en su búsqueda de rentabilidad.
“La alta volatilidad y las valoraciones distorsionadas hacen que la gestión activa sea la estrategia preferida. La gestión activa será fundamental para los inversores institucionales que deseen ser selectivos a la hora de encontrar las mejores oportunidades y lograr una mejor rentabilidad ajustada al riesgo. Tres cuartas partes de los encuestados afirman que sus inversiones activas superaron los índices de referencia en los últimos 12 meses”, señala Natixis.
Los inversores institucionales también se están acercando a los activos digitales, ya que el 28 % ya invierte en criptomonedas, y cuatro de cada diez creen que un activo digital es una oportunidad de inversión legítima.
El 59 % de las entidades cree que el sector energético tendrá mejores resultados en 2022, ya que la recuperación económica impulsa la demanda. Casi la mitad (49 %) considera que la salud tendrá un rendimiento superior en respuesta a la demanda de covid y a las posteriores campañas de vacunación en todo el mundo.
La covid también ha influido en las perspectivas del sector de las tecnologías de la información, que se puso de moda durante los cierres patronales, cuando el trabajo desde casa ha impulsado la necesidad de soluciones informáticas a domicilio.
Finalmente, se espera que los mercados tradicionalmente defensivos sean los que obtengan los mayores resultados, ya que el 35 % de los inversores institucionales prevén que el sector inmobiliario obtendrá resultados inferiores y el 27 % los servicios públicos.