Inversionistas
Wall Street terminó en alza su primera sesión del mes de julio
No obstante, sigue sin recuperarse de su peor semestre en 40 años.
La Bolsa de Nueva York terminó al alza este viernes -1 de julio- animada por un aumento de compras sobre el cierre de la jornada y antes de un fin de semana festivo de tres días.
Al cierre de operaciones en la primera sesión del segundo semestre del 2022, el índice industrial Dow Jones ganó 1,05 %; el Nasdaq, de valores tecnológicos, avanzó 0,90 %, y el S&P 500 subió 1,06 %.
La pérdida de poder adquisitivo, la desaceleración de la economía y una industria que no levanta cabeza por cuenta de la inflación; siguen siendo los principales dolores de cabeza de expertos e inversionistas, que desconfían frente a una posible salida a esta crisis en el corto plazo.
Entre tanto, las principales bolsas europeas cerraron en leve alza este viernes, pese a la persistente preocupación de los inversores por la fuerte inflación y los temores a una desaceleración de la economía.
Tendencias
La Bolsa de París terminó con una subida de 0,14 % y la de Fráncfort, del 0,23 %. También cerraron en verde Milán (+0,29 %) y Madrid (+0,96 %). Londres terminó en equilibrio (-0,01 %).
Un petróleo que sube tras varios días de caídas
Los precios internacionales del petróleo subieron el viernes apoyados por la perspectiva de un largo fin de semana festivo en Estados Unidos y recortes de la producción en Libia.
El barril de Brent del Mar para entrega en septiembre, en su debut como contrato de referencia, terminó con alza de 2,38 % cotizado a 111,63 dólares en el mercado de Londres. De su lado, en Nueva York, el barril de WTI para entrega en agosto subió 2,52 % hasta los 108,43 dólares.
“En general, ante a un fin de semana de tres días en Estados Unidos, salvo imprevistos, no hay nada negativo que pueda afectar los precios del crudo”, comentó James Williams, de WTRG Economics, refiriéndose al festivo del 4 de julio, en el que se producen las mayores salidas de vacaciones del año.
La asociación de automovilistas de Estados Unidos (AAA) estima que casi 48 millones de personas se desplacen en coche o en avión, lo que supone un aumento del 3,7 % con respecto a 2021 y se acerca al nivel anterior a la pandemia de covid.
Esa perspectiva de mayor demanda de combustible, sostuvo los precios. Acontecimiento internacionales también pesaron a favor del crudo. En Libia, un país largamente inmerso en un caos político y económico, su petrolera nacional anunció pérdidas de más de 3.500 millones de dólares debido al cierre forzoso de grandes instalaciones.
Asimismo, el mercado no esperaba un alivio de la oferta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opec) y sus socios (Opec+). No obstante, el jueves los socios de la Opep+ renovaron su objetivo una extracción levemente mayor en este verano boreal y acordaron un aumento de la producción de 648.000 barriles diarios en agosto, como en julio; lo cual no sorprendió al mercado.
Se sigue desacelerando la industria en EE. UU.
General Motors (GM) y Toyota figuran entre las compañías que registraron menores ventas trimestrales de autos en Estados Unidos, en momentos que los problemas en la cadena de suministros siguen perturbando a la industria. En el trimestre que cerró el pasado 30 de junio, GM vendió 582.401 autos; un 15 % menos que el mismo período del año pasado.
GM aseguró que necesita componentes para 95.000 vehículos parcialmente construidos que espera entregar a finales de año. Ese escenario se ha convertido en normal en el último año, ya que los fabricantes de vehículos intentan desagotar sus stocks en medio de un limitado suministro de semiconductores y otras piezas clave para la industria.
GM reafirmó sus perspectivas de ganancias para todo el año, pero su beneficio neto del segundo trimestre, de entre 1.600 y 1.900 millones de dólares, estuvo por debajo del consenso de las estimaciones de los analistas.
Por su parte, Toyota anunció la venta de 531.105 unidades en el mismo periodo, lo que supone un descenso del 23 % en comparación contra el mismo trimestre de 2021. La empresa japonesa citó los “continuos problemas de inventario” que afectan a sus concesionarios. La empresa automotora Cox Automotive espera una caída del 19,3 % en las ventas de automóviles en Estados Unidos para el segundo trimestre.
“Aunque las condiciones económicas empeoraron en los últimos meses, la falta de suministros sigue siendo el mayor viento en contra que enfrenta la industria del automóvil”, opinó Charlie Chesbrough, economista senior de Cox.
De su lado, Hyundai Motor America también reportó sus resultados trimestrales en los que se registró un descenso de ventas del 23 %.
Con información de AFP.