Sostenible
Agencia Internacional de Energía se manifiesta en contra de nuevas explotaciones de combustibles fósiles
En entrevista con DW, Fatih Birol, director de la AIE, dice que las actuales explotaciones de petróleo, gas y carbón bastan, y no debe haber más para atenernos a los objetivos climáticos.
Fatih Birol, director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía, organización con sede en París, ha advertido que las empresas que aumentan la producción de combustibles fósiles contradicen los objetivos para detener el calentamiento del planeta.
“Si en sus estrategias están viendo un aumento constante en la producción de petróleo, gas o carbón... y, al mismo tiempo, dicen que la empresa está en línea con el objetivo de 1,5 grados centígrados, hay un problema”, dice a DW Fatih Birol.
Poner freno al cambio climático
Muchos gobiernos y empresas de todo el mundo prestan atención a lo que dice la AIE, una autoridad mundial en datos y análisis de energía. El grupo de países industrializados de la OCDE creó la agencia en 1973, tras una de las crisis del petróleo, con el objetivo de ayudar a asegurar el suministro de energía, la mayor parte de la cual procede de combustibles fósiles.
En los últimos años, la AIE ha ampliado su radio de acción, con el fin de ayudar a los países a poner freno al cambio climático. El compromiso de los líderes mundiales es tratar de mantener el calentamiento global en 1,5 grados por encima de los niveles preindustriales para finales de siglo. Si las políticas actuales continúan, el calentamiento podría ser casi el doble.
Algunas compañías de combustibles fósiles planean expandir sus operaciones. “Tenemos que reducir el consumo de petróleo, gas y carbón”, alerta Birol. “Y, si somos capaces de hacer eso, si logramos una trayectoria como esa, tanto los campos de petróleo y gas, como las minas de carbón existentes actualmente, son más que suficientes para satisfacer el crecimiento de la demanda”.
No explotar nuevos campos de gas o petróleo
“Perspectivas de la Energía Mundial”, (World Energy Outlook) es el informe insignia de la AIE, y se publica anualmente desde 1998. El texto proyecta cómo cambiará la oferta y la demanda de energía en todo el mundo si las políticas continúan siendo las mismas.
En 2021, el informe agregó un nuevo escenario histórico. Los gobiernos y los inversores comenzaban a estresarse por el cambio climático, y la AIE publicó una hoja de ruta para mostrar cómo la economía mundial podía alcanzar emisiones cero neto de dióxido de carbono para 2050. Según sus modelos de predicción, de esa forma continuaría el calentamiento máximo de hasta 1,5 grados hasta finales del siglo XXI. Birol afirma que ese escenario se usa ahora como “una biblia en el mundo de la energía y las finanzas, así como de muchos gobiernos, pero no de todos”.
Uno de sus hitos clave es dejar de gastar dinero en nuevos lugares para bombear, perforar y extraer combustible del suelo. La ruta hacia los 1,5 grados señala que no debe aprobarse “ningún nuevo campo de petróleo y gas”, ni “ninguna nueva mina de carbón o extensión de minas”.
Falta de reconocimiento de una “revolución” renovable
A pesar de sus duras palabras contra los combustibles fósiles, voces críticas advierten que la AIE ha tardado en comprender el crecimiento de la energía limpia.
Científicos y analistas han criticado al organismo por subestimar repetidamente la cantidad de electricidad que pueden producir el sol y el viento. Año tras año, sus influyentes informes han proyectado un crecimiento mucho menor de la infraestructura de energías renovables que el que después han llevado a cabo los países.
“Es normal recibir críticas de diferentes lados cuando eres la más importante organización energética”, se defiende Birol. “Pero la mayoría de los comentarios que recibimos dicen que estamos impulsando la energía limpia con tanta fuerza, que socavamos la importancia de los combustibles fósiles”.
“Sin ambigüedades” respecto a los combustibles fósiles
Los llamados para abandonar los combustibles fósiles han aumentado a medida que el planeta se calienta. Alarmada por el daño causado por el cambio climático y la contaminación del aire, la Organización Mundial de la Salud ha pedido un plan legalmente vinculante para eliminar gradualmente la exploración y producción de combustibles fósiles. En 2021, la OMS dijo que el cambio climático es la “mayor amenaza para la salud” que enfrenta la humanidad.
“Es muy simple”, dice al respecto Birol. “Si queremos alcanzar nuestro objetivo de 1,5 grados, no se puede utilizar tanto petróleo, gas y carbón como se usa hoy”. “Ahí no cabe ningún tipo de ambigüedad”.
*Entrevista de la DW.