Economía
Atención: sigue creciendo la deuda externa en Colombia; en junio subió US$11.542 millones frente al mismo mes de 2022
Como porcentaje del PIB, la deuda representa el 56,1 %, de acuerdo con el reporte del Banco Central.
Más de la mitad del producto interno bruto (PIB) de Colombia representa la deuda externa, y esta cifra continúa al alza, con base en el más reciente informe del Banco de la República.
Y es que en el más reciente año, la cifra creció en US$11.542 millones, hasta los US$187.529 millones reportados a junio de 2023. Este dato, al mismo periodo del año pasado estaba en US$175.986 millones.
De igual manera, como porcentaje del PIB, la deuda externa registró un ascenso desde el 51,3 %, anunciado en el sexto mes de 2022, hasta el 56,1 % en el presente año.
Respecto a la deuda privada, se reportó un incremento en dólares de US$5.992 millones, desde los US$75.059 millones registrados en 2022, hasta los US$81.051 millones. Mientras que, como porcentaje del PIB, pasó del 21,9 % al 24,2 %.
Tendencias
Por otro lado, la deuda pública subió en dólares en US$5.550 millones, pues pasó de US$100.927 millones a US$106.478 millones. Y subió como porcentaje del PIB, que terminó en junio de 2022 en 29,4 % y lo mismo hizo en 2023, en 31,8 %.
Frente al mes pasado reportó una ligera subida de US$896 millones, pues en mayo, la deuda fue de US$186.633 millones, y se mantuvo como porcentaje del PIB en el 56 %.
Ojo con lo que puede dañarle el caminado a la reducción de la inflación, según Moody’s
La inflación en Colombia llamó la atención de la agencia de calificación Moody’s, una de las cuatro más grandes del mundo. Pues según dijo, la volatilidad de las materias primas podría provocar una inflación elevada.
Con este factor en el escenario, Moody’s mencionó actualizar su pronóstico económico para el tercer trimestre. Allí, estima que si bien el crecimiento en los mercados emergentes seguirá siendo relativamente bueno durante los próximos 12 a 18 meses, incluso con la difícil situación económica que se cierne sobre el mundo, las amenazas aún existen.
En este contexto, se refiere al obstáculo que supondrá la volatilidad de los precios de las materias primas para lograr el objetivo deseado de reducir la inflación.
Por tal motivo, “los bancos centrales de los mercados emergentes pueden enfrentar mayores dificultades para brindar una mayor flexibilidad en la política monetaria”.
En opinión de la calificadora de riesgo, la inflación seguirá cayendo, pero cuidado: “algunos países están expuestos a presiones inflacionarias provocadas por la reciente recuperación de los precios de las materias primas”.
Según la agencia de calificación, el escenario base supone una desaceleración del crecimiento de los precios hasta finales de 2024.
Del mismo modo, Moody’s estima que los principales problemas de dicha caída en el aumento de precios está relacionada principalmente con el petróleo, el gas y los alimentos.
La situación afectará en un principio a América Latina e India, en donde los fenómenos meteorológicos adversos ya comenzaron a afectar el rendimiento de los cultivos y a aumentar los precios internos, recordó la firma.
Esta senda de desaceleración de la inflación, a su vez, comenzará a reducir las tasas de interés de referencia utilizadas por los bancos centrales para controlar el aumento de los precios. Según la agencia de calificación, “es poco probable que los tipos de interés más bajos debiliten las monedas locales”.
El estudio de Moody’s incluyó una amplia visión general de los países. Por ello, la firma concluye que “algunos mercados emergentes pueden comenzar a reducir las tasas antes de finales de este año, pero es poco probable que haya un recorte amplio en todos los mercados emergentes”.
Colombia, por ejemplo, aún no ha comenzado a recortar las tasas de interés, pero todas las señales apuntan a un comienzo apresurado en la reunión del directorio del Banco de la República en septiembre.