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Biden alista la mayor subida de impuestos en EE. UU. en casi 30 años

Al igual que en Colombia, el país norteamericano tendrá que conseguir recursos para pagar el próximo paquete de ayudas por la pandemia. Estos serían los sectores impactos.

15 de marzo de 2021
| Foto: afp

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tienen en sus planes realizar la mayor subida de impuestos en ese país en casi 30 años, con el fin de pagar el próximo programa de ayudas económicas, que será más grande de los dos ya avalados.

Así lo revela este lunes Bloomberg, citando a personas cercanas al proceso tributario, quienes señalan que la deuda pública no será suficiente para una próxima ley de estímulos fiscales, con lo cual los tributos serán el salvavidas.

“Si bien está cada vez más claro que los aumentos de impuestos serán un componente, los asesores clave ahora se están preparando para un paquete de medidas, que podrían incluir un aumento tanto de la tasa impositiva corporativa como de la tasa individual para personas con altos ingresos”, señala el portal económico.

Y desde el propio gobierno de Biden se ha confirmado que será necesaria una subida impositiva. De hecho, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha dicho que por lo menos una parte de la próxima ley de beneficios fiscales tendrá que pagarse directamente.

Para esto le apuntan a una subida de tarifas de los grandes capitales de personas naturales y empresas.

De acuerdo con Bloomberg, pasar esta iniciativa no será una tarea sencilla en el Congreso. No obstante, el reto podría ser positivo para la administración Biden. Aseguran que, de lograrse, los mayores recursos permitirían financiar proyectos clave en infraestructura, clima y protección de los más pobres.

Yanet Yellen, secretaria del Tesoro de EE. UU., ha dicho que parte de la próxima ley de ayudas fiscales deberá ser financiada con mayores impuestos. | Foto: Bloomberg

Pero también hacerle frente a una situación que sucede incluso en Estados Unidos y es la inequidad que existe en el sistema tributario de esa nación.

Esta premisa le apunta, sin dudas, a que los estadounidenses más ricos paguen más impuestos, aunque no a un nivel extremo como lo planteó la senadora demócrata, Elizabeth Warren, para quien debería aplicarse un impuesto absoluto sobre el patrimonio.

Así las cosas, se espera que la propuesta sea un reflejo de las propuestas de campaña de Biden, de acuerdo con fuentes consultadas por Bloomberg.

Y, al igual que sucedería en Colombia -donde se analiza eliminar o posponer la entrada en vigencia de beneficios creados hace dos años-, el gobierno de EE. UU. le apuntará a repeler parte de las gabelas creadas por la administración de Donald Trump en el 2017.

Estas son algunas de las ideas que se barajan por parte del equipo económico de la Casa Blanca:

  • Aumentar la tasa de impuesto de renta para empresas de 21 % a 28 %.
  • Reducir beneficios para las llamadas empresas de traspaso (en estas, los ingresos del negocio pasa a través de su dueño).
  • Subir el impuesto de renta para personas que ganen más de US$ 400.000 al año.
  • Incrementar el alcance que tienen los impuestos a las herencias.
  • Imponer una mayor tasa para las ganancias de capital para personas que ganen al menos US$ 1 millón al año.

Si bien estas son medidas que aún están siendo analizadas y de las que no hay confirmación de que se tomarán, se trata de un plan que permitiría financiar el próximo paquete de ayudas del estado norteamericano, que ha prometido seguir acompañando a los ciudadanos en la dura situación que trajo la covid-19.

Y aunque los escenarios son difícilmente comparables, algo similar sucede en Colombia. El gobierno de Iván Duque alista una reforma fiscal, con la que busca financiar las ayudas y gastos adicionales que tuvo que hacer por cuenta de la pandemia.

Según el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, se buscará recaudar unos $ 15 billones anuales con esta iniciativa, que se prevé discutir a partir de abril de este año.

Los recursos los conseguiría ampliando el número de productos que hoy pagan una tarifa plena de IVA, incrementando la cantidad de colombianos que pagan impuesto de renta y reduciendo algunos beneficios tributarios.