Caribe y los Llanos, las regiones que más se afectarían con propuesta de Petro de acabar la exploración petrolera

Uno de los temas que ha sido más polémico en la campaña electoral que se adelanta en Colombia es el futuro del petróleo en el país, pues el candidato Gustavo Petro, quien lidera en las encuestas presidenciales, ha reiterado en varias ocasiones que quiere suspender la exploración del crudo.

De hecho, la idea de Petro, en caso tal de ganar las elecciones presidenciales, es suspender la exploración petrolera de manera inmediata e incluso también ponerle un freno a las exportaciones de crudo.

“Cuando cesa la exploración de petróleo tenemos doce años de reserva. Si dejamos de exportar, tenemos doce años en los que las reservas van a sostener la demanda interna de petróleo”, dijo Petro durante su intervención en el pasado Congreso Nacional de Minería.

La propuesta de Petro traería graves consecuencias negativas para algunas regiones del país, en especial aquellas en que se desarrolla la actividad petrolera y en las que se reciben cada año los recursos provenientes de las regalías.

Hay que mencionar que el presupuesto del Sistema General de Regalías para 2021-2022 es de $ 17,3 billones, de los cuales, casi todo ($ 16,1 billones) está destinado a adelantar proyectos de inversión que permitirán reactivar la economía.

Este presupuesto de regalías se distribuye en las regiones y zonas del país donde se llevan a cabo los procesos de producción y exploración de petróleo. De hecho, el Gobierno tiene proyectada la distribución de regalías de la siguiente manera:

• Región Caribe: $ 3,6 billones.
• Región Llano: $ 2,9 billones.
• Región Centro Oriente: $ 1,7 billones.
• Región Pacífico: $ 1,4 billones.
• Región Centro Sur Amazonía: $ 1,2 billones.
• Región Eje Cafetero: $ 1,05 billones.

La suspensión de la exploración de petróleo trae consigo que se merme la inversión de las firmas extractivas, impidiendo así que lleguen recursos a distintas zonas del país, dineros que suelen ser utilizados para la construcción de vías, escuelas, hospitales y demás.

Además, dentro de la reforma a las regalías que se aprobó a inicios de este año, el Congreso acordó que las comunidades étnicas (pueblos indígenas, las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras, y el pueblo Rrom) tengan una asignación para los próximos dos años de $ 358.000 millones, los recursos para Ciencia, Tecnología e Innovación pasaron de 9,5 % a 10 % ($ 1,54 billones) y la asignación para la paz será de $ 1,1 billones.

De acuerdo con el Marco Fiscal de Mediano Plazo de 2021, los ingresos tributarios de la Nación por las rentas petroleras en 2020 fueron de $ 3 billones y se prevé que para 2021 sean de $ 1 billón, por la caída de los precios del crudo que se vio en 2020.

Hay que aclarar que los ingresos petroleros llegan a Colombia con un año de retraso. Es decir, en 2021 los ingresos por las rentas petroleras provienen de la actividad de 2020 (año en el que los precios alcanzaron a tocar mínimos históricos), y que en 2022 los recursos petroleras estarán ligados a la actividad y condiciones del presente año.

Ya para 2022, la proyección es que los ingresos tributarios derivados del petróleo aumenten nuevamente a 0,3 % del PIB y que la cifra llegue hasta 0,6 % y del PIB en 2023.

Aparte de los ingresos petroleros por el pago de impuestos, Colombia recibe año a año dividendos de Ecopetrol gracias a los buenos resultados y la gestión que realiza la empresa que, si bien está en un proceso de transición energética, tiene a la exploración y producción de petróleo como su principal fuente de negocio.

Para 2021, se estima que los dividendos que entregue Ecopetrol bajen desde los $ 6,5 billones entregados en 2020 hasta los $ 619.000 millones. Ya en 2022, y gracias al repunte de los precios del crudo, se estima que los dividendos de la petrolera sean de $ 7,6 billones.