Economía
Cinco regiones del país desaceleraron su crecimiento económico durante el primer trimestre del 2023
Estas dificultades se han presentado a nivel mundial, y podían ser proyectadas, en parte como una consecuencia de las medidas de emergencia que tuvieron que ser tomadas durante la pandemia Covid-19.
Este inicio de año ha estado cubierto de coyunturas económicas para toda la nación, a pesar de los síntomas que parecen indicar principios de mejoría para la economía del país, los primeros tres meses del año parecen haber dejado algunas secuelas en ciertas regiones del territorio colombiano.
Estas dificultades se han presentado a nivel mundial, y podían ser proyectadas, en parte como una consecuencia de las medidas de emergencia que tuvieron que ser tomadas durante la pandemia Covid-19, para ayudar a la población general a sobrellevar esa época de crisis sanitaria, humanitaria y de fondos.
De esta manera lo exponen los boletines económicos regionales presentados por el Banco de la República, que indican los efectos de la tan esperada y mencionada, desaceleración, que ya venía siendo proyectada a causa de las coyunturas monetarias que se asomaban durante finales del año pasado, y que ya se están viviendo en este 2023.
Algunas regiones del país, han sufrido esta desaceleración de manera más marcada que otras, de acuerdo a los informes, Bogotá, Eje Cafetero, Noroccidente, Costa Caribe y Suroccidente, de manera más concreta.
Esto sumado al desempleo, la inflación, y el aumento al costo de vida durante este inicio de año, ha amplificado las dificultades de los habitantes de estas regiones, y sus sectores productivos.
En el caso concreto de Bogotá, la capital del país muestra indicadores que dan señales de decrecimiento y, tal vez, es el territorio que tiene una de las cifras más contrastantes si se compara con los resultados obtenidos en el 2022, los sectores más afectados por esta desaceleración son: El transporte, especialmente con la suspensión de algunas operaciones aéreas, la industria manufacturera, el comercio y algunos elementos concretos del sector construcción.
En el caso del Eje Cafetero, las industrias más afectadas fueron las relacionadas con las actividades agropecuarias, con pérdidas de dinamismo, y afectaciones más claras en la región de Caldas.
Para Noroccidente, estas afectaciones se vieron incluso más acrecentadas a causa de las tasas de interés, y la inflación lo que implico contracciones para la producción industrial, las ventas minoristas, y los sectores agropecuarios y de construcción.
En la Costa Caribe, el consumo interno se vio fuertemente afectado, especialmente en lo relacionado al consumo de los hogares, el transporte, a causa del cese de operaciones de Ultra Air y Viva Air, sumado a la disminución en la venta de viviendas, lo que ha desencadenado consecuencias para el sector de las construcciones.
En la región Suroccidente del país, las mayores consecuencias, se relacionaron a las ventas del consumo, a causa de la prudencia en gastos y costos, por lo que en esta región, entre los rubros más afectados se encuentran, la venta de automotores nuevos, y la producción manufacturera, además de descensos en la actividad agropecuaria y de transporte.
Las únicas regiones que lograron desmarcarse de estas dificultades, fueron la región central, y el suroriente del país, donde hubo ligeros crecimientos para algunas industrias, lo que se mostró gracias en buena parte, a desempeños positivos en el turismo, acompañado de la industria bovina y de la palma, como un fruto procesado.
De esta manera, se espera que el desarrollo de las dinámicas económicas que han permitido un respiro dentro de la actualidad financiera de la nación, permita mejorar estas situaciones regionales, que en algunos casos podrían llegar a requerir medidas políticas para fortalecer algunos rubros de producción.