ALIMENTACIÓN
Comer saludable: el mercado más barato en Colombia estuvo en $ 489.750 durante 2022, según encuesta
La alimentación es el rubro que más pesa si se devenga un salario mínimo o menos.
Más allá de tendencias o moda, la alimentación saludable se ha convertido en un tema de mayor relevancia en la vida de los seres humanos; no solo porque genera beneficios a la salud, sino porque representa un aporte significativo si se desea tener una buena calidad de vida.
Sin embargo, alimentarse sanamente también representa un desafío al bolsillo, debido a que los productos asociados no son tan asequibles a la hora de hacer el mercado, como es el caso de las frutas y verduras, y que según los datos más recientes del Dane, estuvieron entre las categorías de alimentos que registraron mayores alzas en precios.
De acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC), alimentos como la cebolla, el tomate, las legumbres y hortalizas, y las frutas frescas, registraron en el 2022 una variación anual en sus precios del 106,8 %, 33,7 %, 26,86 % y 22,81 %. Esto incide en que muchos hogares, especialmente de bajos recursos, opten por alimentos que no aportan a nivel nutricional, pero ayudan a saciar el hambre.
Pese a lo anterior, la firma Crowe Colombia dio a conocer los resultados de su más reciente encuesta de hábitos de consumo, en la que muestra que, a pesar de las dificultades económicas, los colombianos están apostándole, dentro de su alimentación, a la ingesta de productos saludables.
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Según los datos reportados, con base en una consulta realizada a 350 personas, el 89 % afirmó que consume alimentos saludables, frente al 11 % que expresó lo contrario.
De los que indicaron alimentarse sanamente, el 51 % dijo que consumía frutas de una a tres veces por semana, el 33 % lo hacía de tres a cinco veces por semana y un 15 % manifestó que comía este tipo de alimentos cerca de cinco veces a la semana. En cuanto a las verduras, el 43 % de los encuestados indicó que las consumía de una a tres veces por semana, frente al 41 % que lo hacía de tres a cinco veces y el 16 % las comía más de cinco veces a la semana.
Por su parte, en lo que respecta a proteínas (carne de res, cerdo, pollo y/o pescado), el 57 % dijo que consumía este tipo de productos más de cinco veces a la semana, en contraste con el 31 % y 12 % que indicó que lo hacía entre tres y cinco veces y hasta tres veces por semana, respectivamente.
Mientras tanto, en carbohidratos (granos, pan, arroz, cereales, etc.) se destaca que más del 50 % consume estos alimentos más de cinco veces al día, el 34 % dijo que lo hacía de tres a cinco veces por semana y el 16 %, que los consumía de una a tres veces.
Finalmente, en lácteos, el 42 % de los consultados afirmó consumirlos de una a tres veces por semana, el 31 % lo hacía de tres a cinco ocasiones por semana, seguido del 23 % que lo hacía cinco veces por semana y solo el 4 % indicó que los consumía ocasionalmente.
Otro dato importante a destacar es el relacionado con el presupuesto del mercado, para la compra de alimentos saludables. Al respecto, Crowe Colombia señala que el mercado más barato con alimentos saludables se encontraba en los supermercados de barrio con un costo de $ 489.750, mientras que la misma lista costaba $ 622.540 en los almacenes de grandes superficies y $ 886.420 cuando se compraba por medio de plataformas digitales con servicios de domicilio.
Además, si se mira lo anterior en términos de ingresos, la encuesta revela que, para el año pasado, un colombiano que ganaba un salario mínimo destinó el 59 % de este a la alimentación. En contraste con los que ganan el doble de un mínimo, que dedicaron el 41 % para alimentos y los que devengan tres salarios mínimos que gastaron el 25 % de su sueldo por este concepto. Mientras tanto, para aquellos ciudadanos que tienen ingresos de más de 10 millones de pesos mensuales, la alimentación solo significó el 2% de sus recursos.
“Con este ejercicio quisimos averiguar cómo cambiará para los colombianos la fórmula en la adquisición de los alimentos y de qué manera se afectará en el país la tendencia de la alimentación saludable que muchos colombianos ya habían adoptado en busca una mejor calidad de vida”, puntualizó Jenny Mendoza, socia de Auditoría de Crowe Colombia.