Energía
Compra de gas de Colombia a Venezuela no sería un proceso fácil: esto es lo que debe evaluar el Gobierno
La infraestructura es uno de los problemas que debe enfrentar el Gobierno antes de iniciar la compra del hidrocarburo al vecino país.
El sector energético del país no ha pasado por buenos momentos durante el último año. Diferentes entidades y autoridades han elevado alertas al Gobierno Nacional, por el posible desabastecimiento de gas en los próximos meses. De hecho, un reciente análisis de la Asociación Colombiana de Grandes Consumidores de Energía Industriales y Comerciales (Asoenergía), dejó varias preocupaciones en el sector.
El análisis de la agremiación aseguró que el déficit entre la oferta y la demanda de gas iniciaría en los primeros meses del 2025, por lo que elevaron una petición urgente al Gobierno Nacional, más exactamente al Ministerio de Minas y Energía, para que adopten medidas urgentes para garantizar el suministro de gas natural.
Ante este panorama incierto, el Gobierno Nacional elevó desde el año pasado una propuesta con la que se buscaría iniciar la importación de gas desde Venezuela. La iniciativa generó todo tipo de controversias, pues aunque algunos piensan que puede ser una buena idea, otros aseguran que esta propuesta buscaría ayudar al régimen venezolano, fuertemente golpeado en su economía por los bloqueos de países como Estados Unidos.
Qué necesita evaluar el Gobierno antes de comprarle gas a Venezuela
La presidente de Naturgas, Lus Stella Murgas, se refirió a esta iniciativa del Gobierno Nacional, asegurando que actualmente existe un contrato vigente con Venezuela y Ecopetrol, que fue suscrito en 2007 y que terminará en 2027.
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“Hay que comenzar a hacer todos los chequeos como un proyecto regular. ¿Qué quiere decir todos los chequeos? Verificar desde el punto de vista jurídico, si es posible”, comentó Murgas.
Además de ello, aseguró que Ecopetrol le solicitó una autorización previa a la UFAD, sobre la cual aún no reciben respuesta. Además, este proceso también dependerá del levantamiento de las sanciones generales, para que se pueda dar la viabilidad jurídica.
“Comenzando con esos dos puntos, podemos empezar a hablar de las económicas y de las operativas. Y en lo que tiene que ver con la económica y la operativa, por supuesto, está la necesidad de recuperar el gasoducto y la infraestructura que permite esa importación”, aseguró.
Murgas además afirmó que el gasoducto para realizar la compra de gas, cuenta con 225 kilómetros, de los cuales 88 se encuentran en territorio nacional. Dicha infraestructura fue construida por PDVSA (Petróleos de Venezuela), es propiedad de PDVSA y es una inversión 100% de esa estatal petrolera.
Esta infraestructura debe ser recuperada, pues se dejó de utilizar en el 2015 tanto en territorio colombiano como venezolano, por lo que requerirá de inversión y tiempo para realizar la ejecución.
“Y una vez se supere tanto el tema económico, operativo y viabilidad, uno puede empezar a hablar de una factibilidad de importación desde Venezuela para lograr el abastecimiento y habilitar esa fuente externa que existe. Hay que evaluar el estado completo del tubo que, como digo, se dejó utilizar desde el año 2015″, afirmó. Respecto al tiempo que tardaría este proceso, Murgas aseguró que este no tardaría más de un año.
Respecto a la perspectiva de seguridad energética en Colombia, la directiva aseguró que el país puede ser un ejemplo de pragmatismo, pues contrario a dejar de producir hidrocarburos, se aumentará la producción de gas, además de tener un gran potencial en el gas costa afuera, el hidrógeno azul, hidrógeno verde y un potencial eólico.
“Hay tanta incertidumbre que uno no le puede poner una ficha o un solo número. Y puede apostar mal y no hay margen para el error. Entonces, lo más prudente es diversificar y seguir varias fuentes hasta que se vayan achicando las incertidumbres y vayamos encontrando cuál es el mejor camino. Pero estamos hablando justamente de una transición, no de un reemplazo abrupto. Transición por definición”, concluyó.