Con cambios a la Regla Fiscal, el límite de deuda del Gobierno ahora será del 71 % del PIB

Uno de los pocos artículos que sobrevivió de la reforma tributaria presentada anteriormente por el entonces ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, es el que modifica la regla fiscal en Colombia.

Las modificaciones buscan que la Regla Fiscal no solo tenga ahora un objetivo de déficit fiscal (como venía funcionando), sino también de reducción de la deuda.

La regla fiscal se creó con el objetivo de garantizar la sostenibilidad de la deuda pública y de la economía del país, delimitando un objetivo claro de déficit fiscal que el Gobierno debía cumplir año a año y que iba disminuyendo con el tiempo.

Sin embargo, a pesar de que Colombia ha cumplido de manera responsable con la regla fiscal durante estos años, dicho cumplimiento no ha estado ligado con una reducción del endeudamiento público, el cual, de hecho, ha venido incrementando.

Estos altos niveles de deuda fueron una de las causantes de que S&P Global Ratings y Fitch Ratings le rebajaran la calificación y le quitaran el grado de inversión a Colombia.

Ahora, con las modificaciones incluidas en la reforma fiscal radicada en el Congreso de la República, la regla fiscal establece un límite de deuda de 71 % del PIB y el ancla de deuda de 55 % del PIB.

“La regla fiscal buscará asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas, de tal forma que no se supere el límite de deuda. El incumplimiento de los valores mínimos del balance primario neto estructural implicará el incumplimiento de la regla fiscal”, dice el artículo 30 del proyecto de ley.

Esto quiere decir que si el país pasa el límite de deuda (más allá del 71 % del PIB), se puede llegar a un escenario de insostenibilidad de las finanzas públicas. En contraste, el 55 % del PIB sería el nivel ideal de la deuda del país, teniendo en cuenta su situación actual.

Según datos del Ministerio de Hacienda, al cierre de junio la deuda del Gobierno Nacional Central fue del 61,7 % del PIB.

Es de mencionar que el comité de la regla tiene en cuenta distintos aspectos como los precios e ingresos provenientes del petróleo, el ciclo económico y demás factores al momento de modificarla o cambiarla.

Ahora bien, en caso tal de que el país se enfrente a una nueva crisis o a factores externos que afecten sus finanzas públicas, la regla fiscal podrá ser modificada o suspendida (como ya sucedió) para atender dichas emergencias.

“La regla fiscal tendrá una cláusula de escape, que permitirá realizar un desvío temporal del cumplimiento de las metas fiscales fijadas en este artículo, en el caso de que ocurran eventos extraordinarios, o que comprometan la estabilidad macroeconómica del país. En caso de que ocurran estos eventos, el Consejo Superior de Política Fiscal (Confis) podrá activar esta cláusula de escape, previo concepto no vinculante del Comité Autónomo de la regla fiscal”, dice el proyecto de ley.

Además será el Gobierno el que reglamentará el funcionamiento, particularmente la duración máxima de la desviación de las metas fiscales, la magnitud de esta desviación y la senda de retorno al pleno cumplimiento de las metas fiscales, en caso tal de que sea necesario.

La normativa también establece que el balance primario neto estructural del Gobierno Nacional Central no podrá ser inferior a -4,7 % del PIB en 2022, -1,4 % del PIB en 2023, -0,2 % del PIB en 2024 y 0,5 % del PIB en 2025, independientemente del valor de la deuda neta que se observe.

“Las metas establecidas por medio de este proyecto de ley buscan evitar que el endeudamiento sobrepase los niveles en los cuales se pondría en riesgo la sostenibilidad de las finanzas públicas”, dijo el Ministerio de Hacienda en la exposición de motivos del proyecto.

Hay que recordar que la regla fiscal fue suspendida en 2020 y 2021 para que el país pudiera incrementar el gasto y atender las necesidades económicas derivadas de la pandemia del coronavirus.

La reforma también crea el Comité Autónomo para la Regla Fiscal el cual es una versión fortalecida, con mayores funciones, independencia y capacidad operativa, frente al actual Comité Consultivo de la Regla Fiscal.

“La sostenibilidad fiscal es una condición necesaria para lograr la estabilidad macroeconómica, lo que a su vez es necesario para asegurar el poder adquisitivo de la población, el crecimiento económico y la equidad”, dijo el Ministerio de Hacienda.