Consumo
Confianza del consumidor en Colombia cayó con fuerza y volvió al terreno negativo
Todos los sectores socioeconómicos perciben un panorama negativo en el corto plazo.
El aumento constante de la inflación, que ya se ubica en sus niveles más altos de los últimos 23 años y los diferentes indicadores de la economía que se empiezan a desacelerar por cuenta de este aumento de costos, ya le están pasando factura al optimismo que hay en el país en materia económica y golpean con fuerza la confianza de los consumidores.
Por lo menos así se observa en los reportes del Índice de Confianza del Consumidor presentados por la Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo) presentados este lunes -8 de agosto-, según los cuales, este indicador cayó con fuerza para el mes de julio y regresó al terreno negativo.
Según esta fundación, para el séptimo mes del año el ICC registró un balance de -10,4 %, representando una reducción de 13,3 puntos porcentuales (pps) frente al mes anterior, cuando regresó a terreno positivo después de más de un año y se ubicó en el 2,9 %, nivel en el que no se pudo mantener por mucho tiempo.
“La caída en la confianza de los consumidores frente al mes pasado obedeció principalmente a una caída de 13,2 pps en el Índice de Expectativas del Consumidor y de 13,3 pps en el Índice de Condiciones Económicas”, dice este informe.
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Básicamente lo que esto quiere decir es que los colombianos perciben que en el corto y mediano plazo tendrán menos dinero para usar en sus hogares, razón por la cual deberán suprimir muchos gastos innecesarios y priorizar los más importantes, ya que (como se dice popularmente) la plata no alcanza para tanto.
Luis Fernando Mejía, presidente de Fedesarrollo, aseguró que si bien los resultados del mes pasado habían sido positivos, no se puede pasar por alto que muchas familias en el país siente que los efectos de la pandemia no han pasado del todo y esto, sumado a la inflación, está golpeando con fuerza su economía.
“Al comparar los resultados de lo corrido del tercer trimestre de 2022 con los del segundo trimestre, se observa un aumento en la valoración de los consumidores sobre la situación del país, mientras que sobre la situación de sus hogares y sobre la disposición de los consumidores a comprar bienes durables se observa una caída”, dijo Mejía.
Fedesarrollo agregó que para julio, el Índice de Confianza del Consumidor cayó en todos los sectores socioeconómicos, lo cual demuestra una menor confianza de los consumidores con respecto al mes pasado. A su vez, el índice se redujo en todas las ciudades encuestadas, excepto en Barranquilla.
Al ser consultados por su disposición a comprar vivienda, el índice de personas que ven positivo esta meta, cayó del -18,2 % al -35, %. Así mismo, para bienes durables esde indicador pasó del -36,8 % al 44, 7 % y en lo que respecta a vehículos, esta cifra bajó del -56,51 % al 59,9 %; dejando claro que no hay un buen panorama entre los hogares colombianos.
¿Estragos de la inflación?
Como un hito, pero que preocupa a los colombianos, calificó el director del Dane, Juan Daniel Oviedo, el dato de inflación de Colombia, en su variación anual a julio, que se ubicó en 10,21 %, cifra similar a la que se tuvo en abril de 2000, cuando el país llegó a un 10 %. Es decir, es la inflación más alta que se registra en este siglo.
Los alimentos siguen siendo el grupo de bienes y servicios que más presiona los precios, no solo con las compras que hacen los hogares en los supermercados, sino en el gasto que realizan en los restaurantes, donde el corrientazo tuvo un fuerte aporte.
En los doce meses seguidos la inflación de la comida fue de 24,61 %, en parte, por la situación que tiene Colombia, de importar muchos productos, lo que se da la mano con una tasa de cambio al alza. No en vano, gran parte de la presión en el costo de alimentos la puso el grupo de procesados.