Presupuesto
Consejo de ministros con la tijera afilada para ajustar las finanzas públicas. Se espera recorte de $20 billones
El gabinete del presidente Petro se encuentra reunido en la Casa de Nariño para definir en dónde hacer el necesario ajuste.
Tal como lo anunció el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, en su intervención en la Convención Bancaria la semana pasada en Cartagena, hoy lunes 10 de junio, pese a ser día festivo, se convocó al consejo de ministros para de forma conjunta definir en dónde recortar el presupuesto de 2024, establecido en 503,2 billones de pesos.
“El Gobierno efectivamente entiende que no se va a conseguir la meta de recaudo de este año, por lo tanto, parte del presupuesto va a quedar desfinanciado y tenemos que ajustarnos por el lado de la caja y por el lado del gasto. Ese ajuste por el lado del gasto significa que el mensaje que estamos enviando es que va a haber un ajuste por 20 billones de pesos en reducción de gasto “, aseguró Bonilla ante el auditorio de banqueros y explicó que esa medida se va a tomar en dos momentos.
El primero se anunció la semana pasada y consistió en bloquear algunas apropiaciones de gasto en todas las entidades que se financian con el Presupuesto General de la Nación. Las apropiaciones son el término jurídico para referirse a las partidas del presupuesto que se destinan a cada entidad pública y que son viables una vez cuentan con Certificados de Disponibilidad Presupuestal (CDP). En otras palabras, cuando un organismo como la Procuraduría, la Fiscalía o un Ministerio va a contratar un servicio solo lo puede hacer cuando desde el Ministerio de Hacienda les dan el respectivo CDP y lo que se planteó es frenar la expedición de nuevos CDP y solo responder por los que ya están vigentes.
El segundo momento, precisó Bonilla, consiste en identificar dónde están los 20 billones de pesos de ajuste. “Entonces, esperamos concertar eso. Esto debe quedar listo en el consejo de ministros del lunes festivo. Debe quedar ahí para que salga el decreto al día siguiente. Después de esa circunstancia, el presupuesto vuelve a quedar liberado para que las entidades pidan los certificados de disponibilidad presupuestal”, puntualizó.
Lo más leído
La reunión inició hacia las 6 de la tarde y se espera que vaya hasta altas horas de la noche, pues cada cartera deberá definir en dónde recorta.
También al intervenir en la Convención Bancaria, el presidente Gustavo Petro confirmó el recorte de gasto, que dijo le fue recomendado por sus ministros del lado económico, y con una de sus acostumbradas onomatopeyas, hizo la mímica de unas tijeras, diciendo “¡chum!, toca recortar”, aunque aclaró que no se va a rebajar el gasto que tiene que ver con la población más pobre.
¿Cómo sería el ajuste?
El exministro y rector de la Universidad EIA, José Manuel Restrepo, quien calificó como “adecuada y responsable” la decisión del bloqueo preventivo de los CDP, señaló que recortar 20 billones de pesos del presupuesto puede generar un proceso de ralentización mayor al que ya experimenta la economía.
El exdirector de la Dian, Lisandro Junco, agregó que en efecto es un recorte duro, “casi al estilo Milei en Argentina, con motosierra en mano”, que puede generar más desempleo y que va a llevar a recomponer la economía, pero es necesario.
Sin embargo, el panorama podría ser aún más desolador según las cuentas del Departamento de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá. Sus estimaciones indican que el Gobierno esperaba obtener ingresos por 352,4 billones en todo 2024, pero estos llegarían máximo a 292,3 billones, lo que implicaría un descalce cercano a 60 billones de pesos. Si bien una parte se completa con deuda, ésta ya casi está a tope, por ende, el ajuste en gasto debería ser mayor y lo estiman en 48 billones de pesos, más del doble de la cifra de la que ha hablado el ministro de Hacienda.
Se espera que junto con los anuncios sobre la forma como se ejecutará el recorte de gastos se prepare también el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP), un documento estratégico y de planeación en el que el Gobierno se traza la hoja de ruta para manejar las finanzas públicas y que tiene plazo para presentar al Congreso hasta el próximo 15 de junio.