Economía
¿Cuándo podrían comenzar a descender las tasas del Banco de la República?
En la reunión de este viernes, no se espera que la junta del Emisor modifique las tasas.
En una decisión ampliamente anticipada, los expertos y analistas prevén que la junta directiva del Banco de la República mantenga sin cambios la tasa de intervención en 13,25 % durante su reunión de junio, que se llevará a cabo este viernes (30 de junio).
Esto marcaría el final de la fase de incrementos que comenzó en septiembre de 2021, cuando se observó el mayor ajuste monetario en lo que va del siglo XXI, con un aumento de 1.150 puntos básicos en la tasa repo en tan solo 22 meses.
De acuerdo con un reciente informe de Investigaciones Bancolombia, la razón principal detrás de esta expectativa de pausa en el incremento de las tasas de interés es la evolución reciente de la inflación y las expectativas inflacionarias.
En los últimos meses se ha observado un descenso en la inflación anual, impulsado por la caída en los precios de los alimentos y la estabilización de otros componentes básicos. Esto ha llevado a una reducción notable en las expectativas de inflación a 12 y 24 meses, según la encuesta del Banco de la República.
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Por tal razón, una de las incógnitas que se han generado es sobre cuándo comenzará la junta del Emisor a bajar las tasas de interés.
En ese sentido, la más reciente encuesta de expectativas del Banco de la República dice que el primer descenso podría darse en septiembre de este año, y se podría ver un descenso de 25 puntos básicos.
Y en abril del próximo año se podría dar que los tipos de interés en Colombia caigan del 10 %.
Así mismo, las expectativas inflacionarias derivadas del mercado de deuda pública también han experimentado reducciones significativas.
A su vez, la expectativa de inflación a un año, un indicador que el Banco de la República monitorea de cerca, ha disminuido desde el 7,4 % a principios de año hasta el 5 % en la última semana, alcanzando su nivel más bajo desde diciembre de 2021. Además, varios indicadores líderes de la actividad económica han mostrado un deterioro importante en lo que va del año, lo cual indica una transmisión más evidente de la política monetaria contractiva a la economía.
Se destaca la caída del 0, 8 % en el Índice de Seguimiento de la Economía (ISE) del Dane en abril, impulsada por una disminución en las actividades primarias y secundarias, así como el aumento en la tasa de desempleo entre marzo y abril.
Por otro lado, los resultados de la cuenta corriente y el déficit fiscal indican una mejora en la vulnerabilidad externa del país, en línea con una menor percepción de riesgo y una apreciación de los principales activos locales.
En cuanto al diferencial de tasas de interés y su impacto en los flujos de capital, la pausa adoptada por la Reserva Federal de Estados Unidos podría influir en la decisión del Banco de la República. En la última semana, el diferencial se mantuvo en 8,15 puntos porcentuales, su nivel más alto desde 2008.
Se espera que el primer recorte de tasas se produzca en octubre, marcando el comienzo de una fase predominante en 2024, en respuesta a la desaceleración económica y la tendencia a la baja de la inflación.
Para el último trimestre de 2023 se proyecta un recorte de tasas de solo 75 puntos básicos, lo que llevaría la tasa repo a un 12,5 % al cierre del año. Esto se debe a los posibles efectos inflacionarios del fenómeno de El Niño, así como a la indexación de una alta inflación anual y la posible subida del salario mínimo.
Sin embargo, una vez que estos eventos se disipen en 2024, se espera un recorte adicional de 400 puntos básicos, lo que llevaría la tasa repo a un 8,5 % al finalizar el año.