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Dian anda de visita: nadie, de los obligados a hacerlo, puede vender productos ni servicios sin expedir factura electrónica
Al igual que lo hizo en los consultorios, la entidad sigue poniendo la lupa. El plan es revisar 101 proveedores tecnológicos. Las personas que van a recibir la factura no tienen por qué entregar información personal distinta a la del nombre, la cédula y el correo.
De nuevo, la Dian sorprendió con sus inesperadas visitas. Esta vez, el turno fue para los proveedores tecnológicos de factura electrónica, es decir, los que venden el ‘software’ para que los negocios puedan implementar el sistema, que es obligatorio para casi todos, a partir del primero de abril.
Solo están exentos de la facturación electrónica 10 grupos, entre los que están los que no son responsables de IVA, los fondos de empleados, los bandos, los pensionados y las cooperativas.
De resto, en todos los demás negocios no debe haber ningún ciudadano que adquiera un bien o servicio salir sin que quede habilitado para recibir la factura en su correo. Llegar a la generalidad del uso de ese mecanismo seguramente se tomará su tiempo, teniendo en cuenta el alto porcentaje de informalidad que hay en Colombia.
No obstante, las visitas de la Dian buscan justamente promover la expedición de este documento, que, según la autoridad tributaria en el país, no tiene por qué ser complicado de cumplir.
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Según la Dian, la elección de los proveedores de software de factura electrónica, como grupo sujeto a visitas tiene el fin de verificar la razón por la cual están pidiendo datos que no son requeridos para expedir el documento electrónico.
Desde la perspectiva de la Dian, el hecho de que le pidan a las personas datos como el RUT (Registro Único Tributario), dirección de la casa, teléfono y hasta la profesión y el lugar donde trabajan, podría ir contra la seguridad de los ciudadanos o podría estarse constituyendo en un negocio para ellos, el de construir bases de datos para comercializarlos.
¿Qué información busca la Dian en las visitas?
Según confirmó la autoridad tributaria, durante las visitas a este grupo en particular se indaga acerca de “los modelos de servicio de facturación que ofrecen los proveedores tecnológicos a sus clientes, los datos obligatorios en los sistemas para crear un adquiriente y facturar electrónicamente, y los documentos obligatorios que debe aportar el adquiriente para que le expidan una factura electrónica en su sistema.
La entidad explicó también que, en las visitas, se trata de “conocer si el sistema permite facturar electrónicamente mientras el cliente se encuentra en caja sin ningún registro previo”.
Adicionalmente, la Dian busca establecer si los proveedores tecnológicos realizan controles para “garantizar que en su sistema todas las facturas recibidas son efectivamente enviadas a validación previa de la entidad recaudadora”.
¿Qué pasa después de las visitas?
Según confirmó la Dian, el mensaje que queda de las visitas es de ‘hágalo bien’. Sin embargo, de llegarse a establecer conductas anómalas, que estén establecidas como sancionables, la entidad procederá a elaborar pliego de cargos y llamado a rendición de explicaciones.
“Diariamente se reciben más de 6,5 millones de facturas, notas débito y/o crédito, los proveedores tecnológicos transmiten cerca del 90 % de los documentos a validación”, estableció la Dian, y agregó que, “en la actualidad, son 101 los proveedores tecnológicos habilitados por la Dian, que prestan los servicios a más de 673.000 facturadores electrónicos a nivel nacional”. Debido a la importancia de masificar la factura electrónica, como herramienta que ayudará a controlar la evasión tributaria, la meta es que todos tengan una visita.