Divisas
Dólar abre el último día del mes sobre $4.400 y sigue asustando al bolsillo: así se cotiza el 31 de octubre
La divisa americana se ha impulsado al alza en las últimas jornadas.
El dólar inició la cotización de este 31 de octubre en un precio de $ 4.400, lo que significó una baja $ 13 frente a la tasa representativa del mercado definida por la Superfinanciera para hoy, que se ubica en $ 4.413.
En cuanto a los movimientos de la moneda, esta registra hoy un comportamiento con baja volatilidad, teniendo en cuenta que el precio máximo al que llegó durante los primeros minutos es de $ 4.402. Por su parte, el precio mínimo de la divisa hasta ahora es de $ 4.390. El precio promedio es de $ 4.396.
En cuanto a las transacciones del dólar, el volumen negociado hasta el momento se ubica en 60,25 millones, registrando además un volumen promedio de 396,38 millones.
A nivel global, el índice del dólar, que compara la divisa americana con una cesta de otras seis monedas, hoy registra un comportamiento a la baja, pues registra una variación de 0,17 % llegando a las 104.037 unidades.
Tendencias
¿Cómo se mueven los mercados este 31 de octubre en el mundo?
La Bolsa de Nueva York abrió a la baja el jueves, con inversores preocupados por los costos de desarollo de la inteligencia artificial (IA) tras los resultados de Meta y Microsoft.
En los primeros intercambios, el Dow Jones cedía 0,48 %, el tecnológico Nasdaq, 1,05 %, y el S&P 500, 0,78 %.
La inflación de la eurozona registró en octubre un repunte, levemente por encima de las expectativas, y se situó en 2,0 % interanual, aunque en general se mantuvo alineada con la meta definida por el Banco Central Europeo (BCE).
En septiembre la inflación de la zona del Euro había sido estimada en 1,7 %. Para octubre, el mercado aguardaba un índice de 1,9 %, de forma que el 2,0 % apuntado por la agencia europea de estadísticas Eurostat quedó por encima de la previsión.
La agencia Eurostat anunció que los precios de los servicios aumentaron en octubre el 3,9 %, al tiempo que el renglón de alimentos (que incluye el tabaco y las bebidas alcohólicas) subió 2,9 %.
Los servicios ya habían aumentado 3,9 % en septiembre, pero los alimentos experimentaron un avance de medio punto porcentual.
Simultáneamente, los precios de la energía experimentaron un retroceso de -4,6 %.
En tanto, la inflación subyacente —que excluye de la medición a productos con precios volátiles— se mantuvo estable en 2,7 %, aunque el mercado esperaba una desaceleración a 2,6 %.
Este escenario mantiene en el centro de las atenciones al BCE, que a partir de junio inició recortes en sus tasas de referencia.
En la víspera, Eurostat anunció que el PIB de la eurozona había crecido 0,4 % en el tercer trimestre del año en curso, un resultado que también superó las expectativas pero resultó pálido ante el 0,7 % que registró Estados Unidos en el mismo período.
Así, se espera que el BCE mantenga en su reunión de diciembre la tendencia de recortes de las tasas de referencia.
Entre las principales economías de la eurozona, Alemania registró en octubre una inflación de 2,4 %; Francia, 1,5 %, e Italia, 1,0 %.
España registró inflación de 1,8 %, y Portugal, 2,6 %, de acuerdo con Eurostat.
En un extremo, Eslovenia registró en octubre inflación de 0,0 % al tiempo que Bélgica tuvo el indicador más elevado, de 4,7 %.
Sin embargo, el 2,4 % de Alemania concentró la atención ya que el país había exhibido una inflación de 1,8 % en septiembre, siendo que en el tercer trimestre del año la locomotora económica de la UE escapó de una trayectoria recesiva.
Para el economista Bert Colijn, del banco ING, el resultado de la inflación en octubre representó un “toque de realismo sobre el proceso desinflacionario de la zona del euro”.
Para Colijn, “si uno ignora las confusas señales de corto plazo, vemos una economía de la eurozona que continúa luchando por recuperarse, con datos del PIB del tercer trimestre que exageran el impulso debido a eventos puntuales”.
“Incluyendo las cifras de aceleración del crecimiento del PIB (...), los datos de esta semana han proporcionado cierto contrapeso a la cautelosa visión del BCE sobre la inflación”, apuntó Colijn.