Dólar en Colombia arrancó este viernes con tendencia al alza: $ 4.753,10

El precio del dólar en Colombia arrancó con una leve tendencia al alza sus operaciones este viernes 23 de diciembre en medio del panorama de calma que se mantiene en el mercado de divisas por las festividades de fin de año y el fenómeno de lateralización que está viviendo desde comienzo de semana. Para hoy no se esperan mayores cambios en su cotización, puesto que los flujos de capitales han venido disminuyendo y muchos inversionistas cesaron actividades y ahora se alistan para 2023.

De acuerdo con la Bolsa de Valores de Colombia, la moneda oficial de los Estados Unidos arrancó esta oportunidad con un precio de apertura de 4.749 pesos, cediendo 11 pesos y 61 centavos respecto a la Tasa Representativa del Mercado que la Superintendencia Financiera fijó para hoy en 4.760 pesos con 11 centavos, luego de la jornada de ayer jueves, en la que tampoco se presentaron grandes variaciones en su cotización. Desde el pasado lunes esta divisa se mueve en un rango de 10 pesos hacia arriba o hacia abajo.

No obstante, pese a que su primer valor fue a la baja, luego de esto empezó a subir y con corte a las 9:00 de la mañana, ya logra máximos de 4.761 pesos, mientras que su mínimo toca los 4.745. Por ahora su cotización promedio es de 4.753 pesos con 10 centavos y todo apunta a que no se moverá mucho desde este punto de referencia. Cada vez están más cerca de cumplirse los pronósticos que hablan de que el dólar cerrará 2022 entre los 4.750 y los 4.800 pesos.

En medio del ambiente de calma que por ahora reina en los mercados, los inversionistas siguen expectantes a cualquier dato o noticia que pueda ayudar a fortalecer los ánimos en los últimos días que le quedan a este año. Esto con el fin de romper hacia abajo una vez más la barrera del dólar y lograr que el peso colombiano le siga recortando terreno a la moneda estadounidense.

“Estamos en el último día antes de Navidad, los mercados están en relativa calma, pero a la espera del dato de inflación que se deriva del PIB en Estados Unidos, los mercados por ahora se mueven con una expectativa orientada a que este indicador muestre un poco la realidad en la que se mueve este país, con un costo de vida que no cede tan rápido como muchos esperan y que las proyecciones de la Fed son un poco más pesimistas de lo que en realidad se ve con el paso de los meses”, dijo Juan Eduardo Nates, analista de Credicorp Capital.

Desde el pasado lunes el dólar viene enfrentando un fenómeno de lateralización, con el cual su precio no subirá ni bajará con fuerza durante los próximos días. Los expertos sostienen que es normal que este tipo de cosas sucedan durante los periodos cercanos a festividades o fin de año, ya que muchos inversionistas se van a descansar y esto hace que baje considerablemente el flujo de capitales.

“No hay que olvidar que la liquidez ya está bastante reducida y muchas monedas entraron en la recta final, por lo que no se esperan mayores cambios. Con esto también se ve que pese a que hay flujos importantes en el mercado, los diversos intentos por seguir rompiendo el dólar hacia abajo no han dejado los frutos esperados, aunque el optimismo en el mercado se mantiene vigente y básicamente todos por ahora se preparan para lo que vendrá el próximo año, donde, por ejemplo para Colombia, se esperan unas tasas de interés altas por un buen tiempo”, agregó Nates.

Por ahora los mercados digieren las perspectivas para 2023 presentadas ayer jueves por el Ministerio de Hacienda. Según el jefe de esta cartera, José Antonio Ocampo, se “revisó al alza el crecimiento esperado de 2022″, pasando ahora a 8,2 %. Mientras que para el próximo año, indicó que se prevé “una desaceleración del ritmo de crecimiento”, por lo que las proyecciones del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se ubican en el 1,3 %.

En este contexto, el déficit fiscal en 2022 se ubicaría en 5,5 %, con un ajuste fiscal de 1,6 puntos porcentuales del PIB frente al déficit registrado en 2021 (7,1 %). “Este resultado representa un sobrecumplimiento de la regla fiscal de 2,9 % del PIB e incluye el pago de $4 billones adicionales para financiar el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC)”; acotando que con esta reducción, la deuda del Gobierno nacional “se reduciría de 60,8 % del PIB en 2021 a 59,6 % en 2022″.