¿El ciclo alcista de las tasas de interés continúa?

Desde que se conoció el reporte de la inflación en los Estados Unidos -para diciembre del 2022 y que se ubicó en 6.5%- un interrogante que ha estado rondando entre conocedores y no conocedores de tema económicos es que si se está próximamente a tener un alivio significativo en el costo de vida.

Aunque todavía es prematuro dar una respuesta, las proyecciones de los expertos sugieren que los precios de los alimentos, bienes y servicios irán cayendo durante el 2023. Esto lo han expresado desde el JP Morgan, una de las entidades financieras más respetadas de los Estados Unidos, así como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Pero ¿continúa o no la tendencia alcista de las tasas de interés pese a que la inflación está cediendo en algunos países?. Frente a este interrogante, el área de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, realizó un análisis a estos eventos macroeconómicos, donde la conclusión principal es que continuarán los ajustes de las tasas, pero será a un ritmo menor con respecto a lo que fue en el 2022.

Destaca el informe que desde que comenzó el fenómeno alcista de la inflación y que obligó a tomar medidas por vía incremento de las tasas de interés, en las economías desarrolladas -es decir, Estados Unidos, Europa y Reino Unido- el ajuste fue progresivo por 11 meses consecutivos; por lo que al finalizar el 2022, las tasas se ubicaron en 3.25%, marcando el nivel más alto que se conoce desde el primer trimestre del 2008.

En el caso de las economías emergentes, el balance general que dejó el ajuste de las tasas de interés, fue superior si se compara con el de las economías desarrolladas y con el global (4.19%). Al cierre del año pasado, las tasas de interés en los denominados países de economías emergentes se situó en 5.58%, pero en América Latina fue el más alto registrado (11.90%); mostrando con esto, que fue en esta región del mundo donde más impactó el alza de las tasas de interés para controlar la inflación.

Pese a lo anterior, el análisis del Banco de Bogotá señala que los ajustes a las tasas de interés han venido reduciéndose en los últimos meses, por lo que si bien en América Latina el tema ha sido más complejo, se prevé que comience a registrarse un descenso, debido a que en el entorno internacional ya se está haciendo evidente una disminución en la inflación.

Así las cosas, si este indicador sigue mejorando en las economías desarrolladas, es decir, que siga bajando la inflación; se espera que haya un “efecto contagio” hacia las economías emergentes. Por lo que, en el escenario más optimista, el análisis sugiere que el pico de las tasas de interés se estaría alcanzando hacia el segundo trimestre del 2023. Esto, significa que después de ese periodo, se prevé que comience a verse una menor presión sobre la economía y que por ende, los ciudadanos sentirán un alivio en sus bolsillos por la caída en el costo de vida.

Aunque el panorama global pareciera ir aclarándose en este aspecto. En América Latina se estaría frente a dos escenarios: mientras que en países como Chile y Brasil se viene observando una estabilidad con respecto a las tasas de interés, como consecuencia de la bajada que registra la inflación; caso contrario se está presentando en Colombia, Argentina, Perú y México, donde no cede la inflación y se prevén ajustes significativos en las tasas de interés.

En el caso del país, analistas consultados por SEMANA han expresado que a raíz del balance anual que dejó la inflación en el 2022 (13,12%) y que estuvo por encima de todos los pronósticos, no se descarta que el Banco de la República aumente en 100 puntos básicos la tasa de interés, pasando de 12% a 13%.