El dardo del presidente Petro al sector minero-energético por el poco empleo que genera: esto es lo que hará en 2023

A Colombia, pese a todas las dificultades que enfrenta en materia económica y política, no parece irle tan mal en temas de empleo. La cifra oficial del desempleo se conocerá este miércoles 30 de noviembre, cuando el Dane revele el dato de octubre. Mientras tanto, el presidente Gustavo Petro puso el tema en la asamblea general de Anif, donde dijo que, para él, el empleo es el principal elemento a tener en cuenta cuando se trata de valorar un sistema económico.

Según el mandatario, es probable que el mercado laboral tampoco funcione mal en 2023, pese a los nubarrones que se ven venir, con la inflación global y la amenaza de recesión.

Y si se hace lo necesario y a tiempo, habrá menor probabilidad de que el tema del empleo funcione mal.

Lo necesario, –a su juicio– sería aplicar la llamada ‘política anticíclica’, que no es otra cosa que gastar los recursos públicos en lo que puede reactivar la economía, lo que debe ser medido en puestos de trabajo, agregó.

“Si tenemos expectativas de recesión en el mundo, algo que va a impactar nuestra tasa de crecimiento económico medido como PIB (producto interno bruto), entonces la política debe ser anticíclica”, enfatizó.

Según dijo Petro en su intervención durante la Asamblea de Anif, realizada este martes 29 en Bogotá, es claro que hay sectores económicos que tienen más incidencia en puestos de trabajo. En ese contexto, puso como ejemplo el sector minero-energético, que recientemente ha estado en medio de la polémica, no solo porque en la reforma tributaria es el llamado a aportar la mayor parte de los impuestos que incluyó el ya aprobado proyecto de ley, sino porque está en medio del modelo de transición energética al que le apunta el mundo, incluida Colombia.

¿Y cómo se reemplazan los dólares del petróleo?

Según Petro, “si comparamos el sector minero-energético con la construcción y el turismo, los dos últimos llevan la ventaja en intensidad de puestos de trabajo”. Petro también se refirió a la controversia que se ha desatado en el país porque los hidrocarburos son los que traen los dólares al país.

“Si no se mide la economía en puestos de trabajo, sino en dólares, claramente el primero lleva la ventaja”, dijo.

De nuevo, Petro agregó otra de las variables que están en el horizonte y, principalmente, en la polémica: “Si no se mide la economía en puestos de trabajo ni en dólares, sino en moléculas de CO₂ emitidas a la atmósfera, otro es el panorama y son las nuevas contabilidades que hay que tener en cuenta. El primero (el sector minero-energético) es el responsable de CO₂ y es el que nos lleva a tener una mayor tensión entre la vida y la inercia” (expresión que ha usado en los últimos días para enfatizar en la necesidad de un cambio).

En la alocución, Petro dijo que se requiere no solo un sistema económico descarbonizado, sino intensivo en generación de empleo, lo que dijo que se logra impulsando los sectores que hacen parte de la economía real y que, en sus palabras, “son los que construyen riqueza, como la industria”.

Esto, sin desconocer que hay otros que son esenciales, pero que no construyen riqueza, sino que son transferidores de ella, como el sector financiero. “La riqueza se crea en la producción de la agricultura, de la industria, de la construcción (que es parte de la industria), del turismo”.

“El turismo puede cambiar las divisas del petróleo”

Al decir del mandatario, si se toma ese corazón en el que se genera riqueza y se expande, se estaría dando en el blanco de lo que es la política contracíclica. Por esto, puso el foco en el turismo en particular, pues es el que puede “cambiar las actuales divisas de la factura petrolera, que son alrededor de 15.000 millones de dólares al año. Si lográramos llegar a una cifra cercana a esa, con el turismo, tendríamos un éxito en el objetivo de disminuir el riesgo de nuestra balanza de pago”, señaló.

Colombia, en la actualidad, no solo tiene un déficit en la balanza de pagos (cuando un país realiza un gasto mayor en sus transacciones internacionales que lo que ingresa por ellas), el cual llegó a 10.861,9 millones de dólares a septiembre, sino que está la amenaza de que se agrande.

El petróleo, que es el que más mueve las exportaciones del país hasta el momento, entraría en una senda reduccionista en cuanto a la demanda. “Si, como dice la Agencia Internacional de Energía, la demanda de petróleo en el mundo en 2030 bajará al 75 % de la actual, y los primeros petróleos en salir del mercado serán los pesados, como el que produce Colombia, hay que prever el riesgo que tenemos y que aumentará progresivamente”.

De esa manera, Petro puso todas sus esperanzas en el turismo, pues es el que puede permitir un reemplazo en el corto plazo.

Sin olvidar lo demás

Claro está, también habló de la necesidad de expandir prioritariamente la agricultura, porque “el mundo en crisis climática va a necesitar alimentos. Si hay inflación –entre otras– es por la escasez, y, a su vez, la escasez se presenta porque se agotan las tierras. Las primeras que se agotan son las del trópico, y se evidencia ya en las millones de personas de Suramérica y Centroamérica que están tratando de cruzar el río Bravo (hacia América del Norte), para buscar sitios en los que exista equilibrio entra agua y alimento”.

Durante la intervención, concluyó que para prever todas esas dificultades y generar empleo se necesita al sector financiero y al Estado. “Si las políticas de Estado aumentan la rentabilidad en la producción de alimentos (para eso hemos subsidiado fertilizantes, hay que hacer reforma agraria) y el sistema financiero privilegia inversiones en créditos, a la producción, podríamos sortear con éxito el problema: crece el empleo y se llega a una inversión de recursos financieros más sana”.