Macroeconomía
En $6,2 billones van los sobrecostos de Hidroituango a raíz de la emergencia de 2018
EPM prevé que las unidades de generación uno y dos entren en operación antes del próximo 30 de noviembre, siempre que se cumpla con las pruebas técnicas requeridas.
La emergencia que inició el 28 de abril de 2018 en Hidroituango puso en aprietos a Empresas Públicas de Medellín (EPM), no solo porque esta hidroeléctrica va a generar el 17 % de la energía que se consume en Colombia, sino porque volver a encauzar el proyecto ha significado sobrecostos por $ 6,2 billones.
Inicialmente, la inversión estimada para construir Hidroituango era de $ 11,4 billones, pero ahora su costo va en $ 17,6 billones. Incluso, llegó a ser de $ 18,3 billones, pero bajó porque las aseguradoras del proyecto hicieron pagos adicionales por $ 2,9 billones, que permitieron tener una disminución de $ 661.000 millones en los costos.
El más reciente incremento presupuestal para Hidroituango se aprobó este miércoles tras una reunión de la junta directiva de EPM y es de $ 2,2 billones por la actualización de las inversiones de obra, gastos preoperativos, gastos financieros y las demás actividades requeridas para la culminación y puesta en operación de la central.
La compañía aclaró que el costo de $ 17,6 billones no incluye posibles variaciones asociadas al valor de las ofertas que se reciban como parte del proceso de contratación, que tiene por objeto la terminación de las obras de la segunda etapa de la hidroeléctrica, que comprende cuatro unidades de generación.
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EPM también explica que el aumento en el costo total de Hidroituango se debe a la ejecución de obras adicionales requeridas para su estabilización y puesta en servicio, y las actividades derivadas de nuevos acuerdos y requerimientos ambientales y sociales.
Además del desplazamiento de la fecha de finalización del proyecto, en la medida que se priorizó la entrada en operación de las cuatro primeras unidades de generación, ajustes al cronograma de entrada en operación y a la variación de factores macroeconómicos, incluida la disparada del dólar en Colombia, que se encuentra por encima de los $ 4.800.
“EPM cuenta con la solidez financiera para seguir haciendo las inversiones requeridas con el fin de garantizar la terminación de las obras y la entrada en operación de la futura central hidroeléctrica”, aseguró la compañía.
Al 30 de septiembre de 2022, Hidroituango tenía un avance general del 89,71 % y un costo total ejecutado de $ 13,6 billones. De acuerdo con la evolución de los frentes de obra, se prevé que las unidades de generación uno y dos entren en operación antes del próximo 30 de noviembre, siempre que se cumpla con las pruebas técnicas requeridas.
En los próximos días comenzarán las pruebas dinámicas para verificar el comportamiento de las unidades con el agua proveniente del embalse, lo que permitirá revisar la operación de los diferentes equipos electromecánicos. Esto se suma a las pruebas en seco que se adelantan desde hace un par de meses y que consisten en ensayar los diferentes sistemas eléctricos y mecánicos sin la presencia de agua.
Asimismo, la compañía estima que las unidades de generación tres y cuatro inicien operación antes del 30 de noviembre de 2023. Estos hitos son claves para que Hidroituango pueda cumplir con las Obligaciones de Energía Firme (OEF) asignadas en las subastas del cargo por confiabilidad en las que ha participado el proyecto.
Si alguna de estas cuatro unidades de generación no entra en operación en el tiempo establecido, EPM se expone a que la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) le haga efectiva una garantía que suma unos $ 850.000 millones aproximadamente.
Las entradas en operación de la segunda etapa de la hidroeléctrica (unidades de la cinco a la ocho) se tienen previstas para 2026. EPM aseguró que en la medida que se vayan materializando nuevos escenarios o cambios en la situación actual, estos se irán incorporando en el análisis del costo total y del cronograma del proyecto.