Agricultura
Estados Unidos hará una inversión de USD 51,5 millones para apoyar agricultura colombiana
Esta apuesta busca fortalecer la competitividad del campo colombiano.
En un reciente evento realizado en Bogotá, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid) anunció una importante inversión de USD 51,5 millones destinada a apoyar el sector agrícola colombiano mediante la Actividad de Agricultura Sostenible (SAA). Esta iniciativa tiene como objetivo primordial impulsar modelos de agronegocios lícitos, rentables y climáticamente inteligentes en áreas afectadas por conflictos y con alta prevalencia de cultivos ilícitos.
De acuerdo con Usaid, con esto se busca fomentar el desarrollo sostenible del campo colombiano y contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a los cambios de uso del suelo.
El director encargado de Misión de Usaid en Colombia, Jeremiah Carew, explicó que la SAA opera bajo un enfoque de sistemas de mercados inclusivos, lo que implica la promoción del apropiamiento local y la sostenibilidad en todas sus iniciativas. Para alcanzar sus metas, la actividad se asocia con actores tanto públicos como privados, creando una sinergia que permita desarrollar e implementar intervenciones regionales efectivas.
“Entre las cadenas principales que recibirán apoyo se encuentran el café, cacao, lácteos, frutas, hortalizas y caucho, abarcando tres corredores geográficos en Colombia: Catatumbo, Caquetá y Bajo Cauca-Sur de Bolívar. Con este paso, la duración de esta implementación abarcará hasta febrero de 2028″, dijo Carew.
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Destacó, además, que los resultados buscados con esta inversión son ambiciosos: apalancar USD 30 millones de inversiones, sacar al menos 30 mil hogares de la pobreza, formar alianzas con el sector privado que involucren al menos 80 compañías, aumentar las ventas del productor en un 100 % y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50 % en distintas cadenas de valor.
Usaid explicó que la inversión se centrará en mejorar el acceso al mercado para los productores rurales, facilitando acuerdos de abastecimiento de largo plazo con agronegocios, procesadores, exportadores y minoristas. Estos acuerdos fortalecerán la capacidad de los productores para acceder a los mercados y recibir precios justos por sus productos.
Además, se buscará aumentar la productividad de los cultivos mediante el fortalecimiento de la capacidad técnica de los productores y las organizaciones productivas. Para ello, se promoverá la adopción de prácticas climáticamente inteligentes, como los métodos de cultivos intercalados, que consisten en sembrar dos o más especies simultáneamente en la misma superficie para prevenir la expansión de cultivos en tierras boscosas.
Otro enfoque clave de la SAA será fomentar la adopción de modelos de agricultura climáticamente inteligente (CSA), como los agroforestales y silvopastoriles. Estos modelos no solo promueven la conservación y reducción de emisiones derivadas del cambio de uso de la tierra, sino que también aumentan el secuestro de carbono y protegen contra los impactos negativos del cambio climático. En este sentido, la actividad trabajará en conjunto con actores públicos y privados para desarrollar incentivos y marcos regulatorios que favorezcan la adopción de prácticas agrícolas sostenibles.
“La inversión también se enfocará en mejorar la infraestructura en las áreas rurales, fortaleciendo la capacidad de los actores locales para diseñar propuestas de infraestructura, como proyectos de vías terciarias, y para operar y mantener la infraestructura después de la construcción. Para ello, se promoverá la coordinación entre las partes interesadas públicas, privadas y comunitarias para alinear los recursos necesarios para la inversión en infraestructura”, agregó Jeremiah Carew.
El Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural destaca la importancia del sector agropecuario en la economía colombiana, el cual representa entre el 6 % y el 8 % del producto interno bruto (PIB) nacional y genera el 15 % del empleo en el país. Sin embargo, las áreas rurales enfrentan desafíos en términos de competitividad, lo que demanda la implementación de estrategias y soluciones para mejorar la productividad y el desarrollo integral del campo.
La colaboración entre Estados Unidos y Colombia en esta iniciativa representa un paso significativo en el compromiso conjunto con el desarrollo sostenible del sector agrícola y la lucha contra la pobreza rural. La inversión en agricultura sostenible no solo beneficiará a los productores, sino que también contribuirá a la protección del medioambiente y la reducción de la huella de carbono en el país. Se espera que estas acciones impulsen el crecimiento económico y la estabilidad en las zonas rurales, brindando oportunidades para mejorar la calidad de vida de las comunidades rurales y promoviendo un desarrollo sostenible y equitativo en Colombia.