Estas son las millonarias cifras que deja el alquiler del estadio El Campín. ¿El precio justifica su estado?

El estadio Nemesio Camacho El Campín de Bogotá es el principal escenario de Bogotá. El recinto, que puede albergar a casi 40 mil personas, es el lugar insignia del deporte colombiano, pero en las últimas décadas se ha convertido en una de las tarimas principales para espectáculos de entretenimiento y cultura. El problema es que su ocupación se ha vuelto un problema, pues luego de ciertos espectáculos quedan espacios averiados, principalmente la gramilla.

Si bien Bogotá tiene otros escenarios para eventos deportivos, El Campín es el hogar de Independiente Santa Fe y Millonarios, dos de los clubes de fútbol que representan a Bogotá en la liga profesional de fútbol. Puede decirse que estos son los que principalmente usan el estadio, prácticamente una vez por semana lo utilizan; en otras palabras, son los clientes principales del escenario.

El tema con los conciertos es diferente, al igual que con el estadio, cada vez hay más espacios para albergar los espectáculos, pero el estadio es único para ciertos ‘shows’, principalmente por sus condiciones de capacidad e infraestructura.

A pesar de que cada semana no se presentan conciertos, casi siempre que se realizan se suscita una polémica por las condiciones en las que queda el estadio, puntualmente la gramilla. Esto último resulta clave para los partidos de fútbol, a tal punto que en caso de notar imperfecciones en el césped, los equipos terminan siendo sancionados.

El estadio El Campín es un escenario público, a cargo de la Alcaldía de Bogotá, puntualmente administrado por el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD). SEMANA se contactó con la entidad para conocer las tarifas del alquiler, además de consultar qué se hace en caso de que se dañe o afecte negativamente el escenario, luego de cualquier evento.

Las tarifas de El Campín varían dependiendo la cantidad de asistentes

Sobre el precio por alquilar el estadio, el distrito cobra un valor equivalente al 12,48 % de la taquilla recaudada. No obstante, lo mínimo que se cobra son 9.280.000 pesos. Quiere decir que si la recaudación por entradas no alcanza a cubrir ese monto, eso es lo mínimo que se cobra.

Hay un punto importante y es que dependiendo del aforo, se le da una clasificación al espectáculo:

• Clase A: 35.129 personas
• Clase B: 17.564 personas
• Clase C: 8.782 personas

El pago se hace por cada partido que se realiza en el estadio. Adicionalmente, se cobra por: puntos de expendio y venta de comida (tarifa que varía dependiendo del aforo), torres de iluminación ($1.160.000 pesos por hora) y si se colocan vallas o material publicitario ($134.560 por metro cuadrado).

“Al respecto, es importante mencionar que el Decreto 552 de 2018 que establece el marco regulatorio del aprovechamiento económico, determina que lo recaudado por aprovechamiento económico debe invertirse en la sostenibilidad y mantenimiento del escenario”, le dijo el IDRD a SEMANA.

¿Qué dicen los clientes?

Preguntar por los costos del estadio parece un tema tabú y los equipos se muestran muy reticentes a contestar por cifras exactas, principalmente porque sus respuestas o apreciaciones pueden generar algún tipo de malestar.

SEMANA se contactó con Santa Fe, quienes dieron una respuesta similar frente a las cifras del IDRD: les cobran el 12,48 % del recaudo de la taquilla, más la iluminación si el partido es de noche, sumado a los puntos de comidas, pero, se adiciona un pago por eventuales daños al escenario (que no especificaron).

Adicionalmente, se les exige un contrato por un año con el IDRD, más la firma de unas pólizas de cumplimiento y responsabilidad civil.

Por el lado de Millonarios no se tuvo respuesta directa hasta el momento de publicación de este artículo; de hecho, fuentes cercanas al club enfatizaron en que ese es un tema delicado, principalmente por las quejas sobre la condición actual de la gramilla de El Campín.

Además de los clubes de fútbol, SEMANA contactó con Páramo Presenta, uno de los organizadores de eventos más importantes de Colombia, que entre otros festivales, fueron los responsables por Monsters of Rock, concierto celebrado el 15 de abril de 2023 y que luego de su realización quedaron daños en la gramilla, que fueron denunciados por los hinchas y clubes de fútbol. De hecho, a Santa Fe le cayó una multa económica, impuesta por la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol) por 10 mil dólares, que buscan negociar con el IDRD, que son los responsables por las óptimas condiciones del estadio.

Páramo Presenta dio unas cifras completamente diferentes a las del IDRD y los equipos de fútbol. Claro está, si bien el uso del escenario es ajeno al desarrollo deportivo, el cambio de monto entre los valores son multimillonarios.

“El alquiler del estadio puede estar alrededor de los 860 millones de pesos. Esto cubre los días de montaje, concierto y desmontaje. Adicionalmente, hay que pagarle al IDU 76 millones por concepto de adecuación del espacio público, 180 de cláusula para el mantenimiento de la grama, más un cheque por 45 millones como seguro por daños adicionales. El aseo y la recolección de basuras pueden ser alrededor de 60 millones. Los cerramientos entre vallas, mallas y muros pueden estar en 220 millones aproximadamente”, señaló la compañía.

A pesar de las tarifas para la conservación del estadio, El Campín no está en óptimas condiciones

A todos los clientes el IDRD les cobran cuotas para la conservación del escenario, puntualmente de la gramilla. Páramo pagó 180 millones de pesos por ese concepto; de hecho, el distrito sabía de la magnitud del evento, por lo que exigió unas condiciones adicionales para usar la gramilla.

“De la mano del IDRD se cumplen unos protocolos de cuidado en la previa, durante el concierto y posevento. Para Monsters of Rock se trabajó de la mano del ingeniero José Varela y Equiver, el proveedor que nos pide el IDRD para el manejo de la cancha. Se hacen labores de corte con equipo tipo rodillo, localización y replanteo, suministro de arena de río gruesa y lavada, aireación, top-dressing, fumigación, suministro de fertilizante químico granulado y mejoradores de suelo, descompactación y cepillado, análisis del suelo con complemento nutricional, análisis de densidad radicular, estudio de infiltración y trabajos de densidad aparente y foliar, entre otros acondicionamientos de la cancha”.

SEMANA le preguntó al IDRD en qué consiste el mantenimiento del estadio El Campín y la respuesta fue que dentro de las actividades se realizan seis podas semanales. Además, el día del partido se efectúa una poda y cepillado para marcar las franjas de juego. Así mismo, se hace la demarcación con vinilo para cada partido y en el entretiempo de los mismos.

Al otro día de los partidos se hacen los arreglos a los daños en la grama causados por los guayos de los jugadores. Esto sumado a lo que le piden a los empresarios de los conciertos, hace que surjan inquietudes sobre el estado de la gramilla. Pues no se entiende cómo con esos cuidados el césped no está en buenas condiciones.

Las justificaciones del estado de la gramilla de El Campín

Hace unas semanas, luego de la presión mediática y las denuncias de los equipos de fútbol, el IDRD, soportado por un análisis realizado por la Universidad Jorge Tadeo Lozano, aseguró que el problema con el césped es por la presencia de: Fusarium sp. (hongo), Pseudomonas sp., Xanthomonas sp. (bacterias) y Pratylenchus sp. (nemátodos). Estos microorganismos surgen por los cambios drásticos de clima, a pesar de los procesos de fumigación y poda, que efectúa el distrito.

Dentro de las medidas adoptadas, el IDRD le dijo a SEMANA que se hizo un recambio de grama en la zona occidental central, de aproximadamente 260 metros cuadrados, trabajos planificados entre el 27 y el 3 de junio de 2023.

Se espera que con los trabajos de remodelación se asegure el óptimo estado de El Campín, principalmente de su gramilla, pues el escenario sirve, principalmente, para desarrollar partidos de fútbol. Dentro del proyecto, que intervendrá al Movistar Arena y las zonas aledañas, se mejorarán los vestuarios, se adecuará un museo del deporte, se añadirán restaurantes y comercios, además de otros espacios deportivos.

Se busca que el estadio sea capaz de soportar todo tipo de eventos, y es ese precisamente el llamado que hace Páramo Presenta, que recordó cómo los conciertos y festivales son una de las principales actividades de la economía colombiana: “En lo que va de 2023 se han hecho o anunciado cinco conciertos en El Campín. No es una gran cantidad si uno compara con otros estadios en capitales del continente (…) Son escenarios multipropósito y hay muchas bandas y artistas que únicamente giran en estadios, como los Guns N’ Roses o Taylor Swift, entonces no podemos cerrarles las puertas a esos artistas en Colombia por falta de un recinto adecuado para que se presenten. Un concierto en el estadio El Campín genera más de 5 mil empleos, solamente durante el evento. También el impacto económico es muy importante para las ciudades”.