Estos serían los riesgos de la renegociación del TLC con Estados Unidos

Casi 12 años se cumplirán este 21 de octubre de la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, el cual se dio durante el gobierno del presidente Santos (Colombia) y Barack Obama (EE. UU.). Desde su puesta en vigencia algunos de los beneficios se han trasladado a las empresas grandes, medianas, micro y pequeñas, ya que les abrió las puertas a exportar EE.UU.

De acuerdo con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos no solo trajo estabilidad en las reglas del juego en materia arancelaria y la inclusión de más de 5.000 bienes, sino que también implicó, para diferentes sectores de la economía, entrar a competir con otros mercados por los más de 320 millones de consumidores del mercado de EEUU.

Por ejemplo, en los sectores de cosméticos, calzado y confecciones, Colombia comenzó a ser competitivo en niveles similares con mercados como Países Bajos, Hong Kong y Corea. Para el caso de cosméticos, Colombia compite por el mercado de Estados Unidos con países como Irlanda, Nueza Zelanda, Países Bajos y Brasil.

Implicaciones en su renegociación

El embajador de Estados Unidos en Colombia advirtió que hay implicaciones para renegociar el Tratado de Libre Comercio con EE. UU., así lo aseguró durante un conversatorio de la Cámara de Comercio Colombo Americana, Amcham Colombia.

El diplomático advirtió que en medio de las circunstancias de polarización que existen mundialmente, “reabrir una negociación de un nuevo tratado no será un camino fácil o productivo realmente”.

Aseguró que es necesario tener precaución sobre las acciones que se tomen, ya que estas pueden jugar en contra del tratado que se tiene. Ante esta situación recomendó que “debemos utilizarlos mecanismos que existen en el Acuerdo, que han servido tanto en los últimos diez años, para lograr mejores entendimientos y proteger lo que tenemos porque hay fuerzas dentro de EE. UU. que quieren analizar en una manera mucho más crítica al concepto de libre comercio con otros países”.

Palmieri también invitó a trabajar en conjunto a Colombia y Estados Unidos para potenciar el acuerdo. “Mi esperanza es que el futuro no sea uno en el que recurramos a acciones que limiten nuestro potencial para abordar estos desafíos como, por ejemplo, control de precios, aranceles o prohibiciones de acceso a productos, sino uno en que se haga realidad todo el potencial del acuerdo”, aseguró.

Perspectiva de AmCham Colombia

La presidenta de Amcham Colombia, María Claudia Lacouture, expresó que el país debe enfocarse en renegociar y revisar las implicaciones. Recalca que el hecho de renegociar implicaría que se vuelvan a tomar otros nueves años en ese proceso.

“Si Colombia entra en una renegociación es como si estuviera volviendo a negociar el acuerdo comercial y podría volver a tomarse nueve años, por lo que cuestionó qué pasará en el interino y qué puede suceder en ese proceso de acciones que se lleguen a concluir después de una renegociación. VER+ Reforma a la salud: creada comisión para la concertación.

Lacouture además enfatizó en que el proceso de renegociar podría llevar a Colombia a un estado de incertidumbre y al tiempo limitar la confianza y estabilidad que hoy se tiene.

“Si queremos renegociar tiene que haber un acuerdo entre los dos países, tiene que haber una aprobación por parte del Congreso de EE.UU. y, entendiendo el contexto, las elecciones, las diferentes variables que están surtiendo en ese país, las posibilidades de un interés de revisar, de renegociar el acuerdo, comercial son bastante limitadas”, expresó Lacouture.

Destacó que es necesario revisar aquellos acuerdo que puedan permitir un mejor tratado. “Hay caminos, hay formatos, pero al final más allá de buscar una renegociación y revisión al mismo tiempo, lo que necesitamos es un mayor aprovechamiento del acuerdo”, expresó.

¿Qué se analizaría en la renegociación del TLC?

El ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña, aseguró este mes que comenzarán a realizar una revisión y no una renegociación, lo que tranquilizó al sector privado. Entre los temas que el Gobierno espera que se estudien están los servicios profesionales y las compras públicas para que Colombia tenga una mayor participación en todos los estados y las instancias del país del norte. También hay preocupaciones por las elevadas protecciones a productos agrícolas, como el maíz.

Para José Francisco Mafla, socio de Brigard Urrutia, la revisión de los tratados por sí sola no tiene implicaciones jurídicas o regulatorias, pero una eventual renegociación conllevaría riesgos en temas económicos previamente acordados, por la posible inclusión de medidas más estrictas relacionadas con las normas de origen, las medidas fitosanitarias para la exportación de productos y los requisitos previos para la comercialización de bienes.