Hundimiento de la Reforma laboral sería oportunidad para que se haga una nueva ‘de verdad concertada’, dice Fenalco

El desenlace de la Reforma Laboral, que este 20 de junio se hundió, por no tener el primer debate en las sesiones ordinarias del Congreso de la República, ha motivado múltiples pronunciamientos, entre ellos, el del presidente de Fenalco, gremio de comerciantes, Jaime Alberto Cabal, quien sostuvo que ahora, “se abre una oportunidad para que se haga un nuevo proyecto, esta vez, de verdad concertado”.

De acuerdo con lo expresado por el dirigente gremial, desde un comienzo se pusieron todos los argumentos alrededor del proyecto de ley, según los cuales, no estaba atacando los verdaderos problemas del mercado laboral. En consecuencia, no promovía la generación de empleo ni las soluciones al grave problema de la informalidad, que, a veces, con empleo precario, lleva a que se bajen las cifras de desempleo que mide el Dane.

Se veía venir

El hundimiento de la Reforma laboral se veía venir. Desde que salió al ruedo el proyecto de ley, le llovieron las críticas, pues todo mundo esperaba que la propuesta fuera una salida a los viejos problemas del mercado laboral en el país, ampliamente estudiados por comisiones de expertos, mientras que el Gobierno destapó una documento que muchos catalogaron como ‘solo una reivindicación de derechos sindicales’.

Por ese motivo, el ambiente en la Comisión Séptima de la Cámara durante este 20 de junio era tenso. Las normas de aprobación en el Congreso indicaban que, en este día, el último de las sesiones extraordinarias, se tenía que contar con el visto bueno de los parlamentarios. No solo no llegaron congresistas para conformar el quórum, sino que tampoco estaba la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez —que se encuentra fuera del país— y otros miembros del Gobierno que habían estado presentes en otros debates anteriores.

Durante varios minutos los congresistas que estaban presentes, que en general respaldaban el proyecto, lamentaron que no se hubiera completado el quórum para dar el debate. Y denunciaron como supuestas ‘jugaditas’ ese hecho que terminó con el hundimiento del proyecto.

Distintos calificativos

El presidente Gustavo Petro manifestó que el hundimiento de la Reforma laboral es algo “muy grave”, expresión a la que agregó que es “una demostración de que la voluntad de paz y de pacto social no existe en el poder económico”.

Entre tanto, varias voces se han escuchado alrededor de la situación, alrededor de la cual aún existe la duda de si en el decreto de convocatoria de sesiones extraordinarias del Congreso, el mandatario podrá pedir que se incluya en la agenda. No obstante, ya hay opiniones, según las cuales, de hacerse de esa manera, ese accionar podría ser demandado ante la Corte Constitucional.

El exministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, sostuvo que “la reforma laboral estaba mal concebida. No es el cambio que necesita Colombia. Pensemos en reformas que generen empleo y reduzcan la informalidad. Esta hacía todo lo contrario. Actuó bien el Congreso”.

Por su parte, los partidos de oposición celebraban desde ya el hundimiento de la iniciativa, en la cual, se incluyeron medidas para encarecer los despidos laborales, fortalecer el sindicalismo y entregar más beneficios a los trabajadores formales, a través de reconocimiento de horas extras y dominicales.

¿Qué dijeron los empresarios?

Entre tanto, Bruce Mac Master, presidente de la Andi, gremio de empresarios de Colombia, señaló que “el proyecto de reforma laboral es incompleto y comete grandes errores de política pública se olvida de los desempleados, genera desempleo, se olvida de los informales, de las mipymes y de los emprendedores. A los congresistas les pedimos ser muy responsables con su voto, pedir evaluación de impacto de cada medida, de cada artículo, y reconocer qué es de sus decisiones dependerá el bienestar de millones de familias”.

Y el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, dijo que el hundimiento de la reforma era la oportunidad para plantear una nueva propuesta que sí le apunte a los problemas estructurales del mercado laboral: el desempleo y la informalidad.