Importante alimento cotidiano está por las nubes y no bajaría pronto de precio, ¿por qué está tan caro?

Los alimentos han sufrido diferentes golpes en Colombia en los últimos años. Los rezagos de la pandemia dejaron a la economía muy mal parada, por lo que la inflación, el precio del dólar y otros indicadores entraron en números rojos.

Aunque el Dane ha asegurado una recuperación en el precio de los alimentos, que están descendiendo continuamente, lo cierto es que hay algunos que no se salvan de las continuas alzas.

Recientemente, varias organizaciones alertaron por la subida en uno de los líquidos que muchos utilizan para cocinar y hacer diferentes preparaciones.

De acuerdo con un informe de BBC Brasil, el aceite de oliva empezaría a sufrir alzas en diferentes países donde se distribuye. Esto debido a que su precio se duplicó en el último año y se cuadruplicó desde agosto del 2020.

Entre las razones para que este producto presente un alza continua está la mala cosecha que se ha tenido en Europa y las expectativas de un avance en el cambio climático de las zonas en las que existen plantaciones.

El precio del aceite de oliva en España, que es la nación responsable de más del 40% de la producción mundial, está en unos 8,20 euros,(36.240 pesos colombianos), pese a que el año pasado se encontraba en un precio menor, de 3,80 euros (16.790 pesos colombianos).

España no es el único país europeo golpeado con el precio del aceite de oliva. En Italia, también ha crecido hasta un 98%. En Gracia el precio ha aumentado hasta un 114%.

Los principales exportadores de este aceite vivieron un periodo muy seco, respecto a las cosechas. Esto debido a que los arboles no tenían suficiente humedad y muchos de ellos no produjeron ningún fruto.

España vivió especialmente esa situación, pues pasó de producir 1,5 millones de toneladas, a producir 610.000.

Estos alimentos están carísimos en Bogotá por el cierre de la vía al Llano

El cierre de la vía al Llano en medio de los reiterados deslizamientos de tierra, producto de algunas lluvias y del fuerte sismo que sacudió a esta región del país la semana pasada, no solo tiene golpeada la movilidad entre Bogotá y Villavicencio, por lo que los conductores ahora deben tardar hasta 10 horas para llegar de un destino al otro por las vías alternas, sino que además ya está empezando a poner en jaque el alza de alimentos en la capital.

La preocupante alerta la lanzó Corabastos, la central de alimentos más grande del país. “Debido a las múltiples afectaciones en las vías principales causadas por el Fenómeno de El Niño y los eventos sísmicos del pasado jueves 17 de agosto, esto sumado a la caída del puente en Los Grillos, vía alterna a los llanos en el corredor el Crucero – Aguazul Km 81, se han presentado complicaciones a la movilidad en este sector del país”, precisó la central de abastos.

Lo cierto es que el gerente de Corabastos, Javier Salcedo, señaló que eran inevitables las consecuencias tras el cierre de la vía al Llano, pues algunos comerciantes ya advirtieron sobre aumento de los precios de los alimentos, así como también de un posible desabastecimiento.

La corporación agregó que por estos motivos se generan cierres y pasos restringidos, principalmente en el municipio de Quetame, y a renglón seguido puntualizó que, “debido a estos hechos, se ha experimentado una reducción en el abastecimiento de alimentos”.

“Analizando los datos del SIPSA y los datos de la Corporación de Abastos de Bogotá, al comparar los meses de julio y agosto, se presenta una reducción generalizada del -33 % de la oferta de productos alimenticios originados del Meta y, para el caso de la Corporación de Abastos de Bogotá, una reducción promedio del -32,5 % de productos producidos y procesados en este departamento”, señaló la entidad.