Crecimiento Económico
La desaceleración económica en Colombia es cada vez más evidente
Este es uno de los objetivos del Banco de la República con la subida de tasas de interés.
Desde que se dio por superada la pandemia en todo el mundo y muchos países se enfocaron en la recuperación de sus economías y en evitar un nuevo rebrote de esta enfermedad; Colombia ha sido un referente de crecimiento y desarrollo y logró mantenerse a flote pese a las afectaciones que se derivaron del Paro Nacional, ubicándose por encima de grandes naciones como Estados Unidos, Francia, España o Reino Unido; sin contar a sus pares en América Latina y el Caribe.
Los resultados han sido tan buenos que los analistas, expertos, centros de pensamiento, organismos internacionales y el mismo Gobierno Nacional; esperan que para el 2022 supere el 7 %; teniendo en cuenta el dinamismo que mostró en los primeros meses de ese año. Así las cosas, Colombia está por terminar uno de sus periodos más brillantes de crecimiento económico, con dos años históricos, ya que en 2021 logró un avance de 11 por ciento.
El gran motor, sin duda, ha sido el consumo y el gasto de los hogares, que han aportado más del 80 por ciento del crecimiento. La recuperación del empleo, el auge del crédito y las cifras históricas en remesas han sido combustible para el gasto. A eso se suma, más recientemente, la inversión, en especial jalonada por el gasto en maquinaria y al buen momento internacional de los commodities, como el carbón y el petróleo, que –paradójicamente– gracias al conflicto entre Rusia y Ucrania, encontraron pisos en sus precios.
No obstante, debido a la inflación, desde mediados del 2022 el mundo no la pasa del todo bien, ya que las personas están haciendo cada vez más piruetas para lograr que la plata les alcance hasta fin de mes, mientras que los bancos centrales han tenido que subir las tasas de interés para enfriar las economías y reducir el poder adquisitivo de los hogares. Un ejemplo claro se vio en países como Estados Unidos, donde incluso se llegó a hablar de recesión, generando pánico en los mercados de inversiones.
Tendencias
En el contexto local, el Banco de la República tiene hoy en día las tasas de referencia en el 12 % y no se descarta que puedan subir esta semana hasta el 13 %; quedando en niveles que no se veían desde la década de los 90; cuando el país enfrentó inflaciones superiores al 20 %. La intención del Emisor es quitarle de endeudamiento y maniobra a la gente e incidir en una caída de la demanda de productos y servicios para que los precios empiecen a bajar por ley de oferta y demanda.
Ahora bien, estos efectos negativos ya se están sintiendo, puesto que la economía nacional viene dando muestras de desaceleración desde hace varios meses, sin caer todavía en un escenario de recesión o decrecimiento. Prueba de ello se puede apreciar inicialmente en las proyecciones para el cierre del 2023, que hablan de un repunte de apenas el 1,5 %, con lo cual el país se despide de los grandes reportes y balances del 2021 y 2022.
Una clara señal del enfriamiento de la economía se puede apreciar en el índice de seguimiento que presenta el Dane y que para noviembre fue de apenas el 3,0 %; lo cual marca un retroceso respecto al 4,6 % de octubre. No más en agosto del año pasado, durante el primer mes de gobierno del presidente Gustavo Petro, el ISE alcanzó el 8,6 %
Las cifras de noviembre quedaron por debajo de lo esperado por consultoras y firmas analistas del mercado como el Banco de Bogotá, que le apuntó a 3,5 % o el índice Nowcast de Bancolombia, que esperaba un ajuste a la baja hasta el 3,9 %. Con esto queda claro que las medidas del Banco de la República para enfriar la economía están dando resultados, en medio de la lucha contra la inflación.
Además de esto, el ‘Weekly Tracker’, un índice de la Organización para la Cooperación Y Desarrollo Económico (Ocde) que permite hacer seguimiento continuo a las economías, mostró que, mientras que a lo largo del primer semestre, el indicador manejó un nivel entre 7 y 10 puntos, en las últimas semanas del 2022 cayó a 1,23 (semana del 18 de diciembre). En las dos primeras semanas de 2023 se vio una leve mejoría, a un nivel de 5,18 y 5,33.
Por otra parte, hace una semana el Banco Mundial (BM) dio a conocer su informe Perspectivas económicas mundiales, en el que deja en evidencia el menor ritmo de crecimiento que tendrá la economía mundial en este 2023. Se prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) global tan solo crecerá 1,7 %; cayendo significativamente frente a las proyecciones iniciales del organismo internacionales, que se situaron alrededor del 3 %.
Esta revisión a la baja en las expectativas de crecimiento de la economía mundial se deben, principalmente, a la elevada inflación, el aumento de las tasas de interés, la reducción de las inversiones y las perturbaciones causadas por la invasión de Rusia a Ucrania.