Macroeconomía
Malas noticias para la economía de Estados Unidos: empezó la desaceleración
Estos datos serán cruciales para la decisión que tome la Fed la próxima semana.
La ralentización de la economía estadounidense se confirmó en el primer trimestre, con un crecimiento del producto interior bruto (PIB) muy por debajo de las expectativas, la primera señal tangible de los efectos de la subida de tipos de la Reserva Federal (Fed) iniciada hace un año para luchar contra la inflación.
Durante los primeros tres meses de 2023, el crecimiento del PIB se situó en 1,1 % en proyección anual, según una estimación inicial publicada el jueves por el Departamento de Comercio.
Ello representa una fuerte desaceleración frente al 2,6 % registrado en el trimestre anterior, pero la cifra está también muy por debajo de las expectativas de los analistas, que esperaban un crecimiento del 2 % en el trimestre, según el consenso de Briefing.com.
“El crecimiento del PIB refleja un aumento del gasto de los consumidores, del gasto público y de las exportaciones que compensan la caída de la inversión privada e inmobiliaria”, detalló el departamento en su nota de prensa, que también subraya que el crecimiento está sufriendo el efecto de un aumento de las importaciones.
El déficit comercial se amplió en los dos primeros meses del año debido a un incremento de las importaciones, en particular de materias primas y productos farmacéuticos. Los datos de marzo se publicarán a finales de la próxima semana.
Además, si bien el consumo de los hogares se mantuvo durante los primeros tres meses del año, se desaceleró a lo largo de los meses, cayendo incluso un 1 % en marzo, mientras que la confianza del consumidor también se redujo.
Aunque la inflación se ha desacelerado hasta el punto de alcanzar el 5 % anual en marzo, su nivel más bajo en casi dos años, sigue siendo demasiado alta y lastra el poder adquisitivo.
Un alto riesgo de inflación
Los hogares también deben lidiar con el aumento de los costos de los préstamos, que crecieron de manera constante en el año, siguiendo el ritmo de las alzas de tipos de la Fed.
Estas tasas de interés se sitúan ahora entre 4,75 y 5 %, las más altas desde 2007, y deberían seguir subiendo hasta que la inflación vuelva al 2 %, el objetivo fijado por el banco central estadounidense.
“Nuestros datos nos llevan a creer que el endurecimiento monetario y las recientes tensiones en el sistema bancario conducirán a una recesión leve, aunque más fuerte de lo que habíamos anticipado hasta ahora”, subrayó el economista jefe de Oxford Economics, Ryan Sweet, entrevistado por la AFP.
La mayoría de los analistas prevén un final de año más complicado para Estados Unidos, con un crecimiento que debería ser débil, incluso negativo, en los próximos trimestres, en particular por el endurecimiento de las condiciones de financiación.
La Fed se reunirá la próxima semana para decidir si vuelve a subir o no sus tipos, mientras que el mercado prevé una subida moderada en torno a 0,25 puntos porcentuales. La publicación el viernes del índice de inflación PCE, que es el que sigue la Fed, debería dar una indicación del rumbo que tomará el banco central.
El temor de la Fed es ver materializarse un riesgo de inflación “generalizado en la economía”, alertó una de sus gobernadoras, Lisa Cook, el 21 de abril, cuando subrayó que si bien las distintas medidas de inflación “retroceden desde sus máximos, siguen siendo altas, lo que sugiere que la inflación se ha generalizado en la economía”.
“La gran pregunta es si la inflación continuará en su camino descendente hacia nuestro objetivo del 2 %, y con qué rapidez”, agregó.
Las empresas crecen
Las acciones de Meta se dispararon en las primeras operaciones del jueves en la Bolsa de Valores de Nueva York, catapultadas por resultados trimestrales mejores de lo esperado tras varios trimestres decepcionantes. Hacia la media jornada, el título ganaba un 13,57 %, logrando, por sí solo, empujar al alza del índice Nasdaq (+0,89 %).
Esto incidió en Wall Street, que este jueves abrió al alza en medio de una racha positiva de los gigantes tecnológicos y buen desempeño de diversas empresas. Tras las primeras operaciones el Dow Jones ganó 0,36 %, el tecnológico Nasdaq un 0,90 % y el índice ampliado S&P 500 subió 0,25 %.
“Las acciones subieron principalmente gracias a los resultados de Meta”, comentó Karl Haeling, de LBBW. El grupo con sede en Menlo Park (California, sur) tuvo un aumento del 3 % en sus ingresos en un año, una proeza en un contexto de fuerte competencia.
En un comunicado publicado el miércoles, el grupo californiano dio cuenta de una facturación ligeramente más alta en este primer trimestre del año comparado con igual período de 2022, de 28.650 millones de dólares, luego de tres trimestres consecutivos de caída.
*Con información de AFP.