Combustibles
MinHacienda confirmó la fecha en la que dejará de subir el precio de la gasolina en Colombia
Por ahora, el galón de gasolina corriente ya superó los 10.000 pesos en casi todo el país, mientras que el diésel se mantiene con alzas que no superan los 100 pesos.
Uno de los primeros anuncios hechos por el gobierno de Gustavo Petro fue el alza gradual del precio de la gasolina y el ACPM en Colombia. Los motivos del incremento son simples, el fondo de estabilización de los combustibles estuvo tan desfinanciado que la deuda ascendía a más de 17 billones de pesos entre 2011 y 2019; y para 2021, el Gobierno calculó que el déficit llegó a 11,4 %.
Ahora bien, con la medida de incrementos paulatinos, el Gobierno Petro ya ha superado los mil pesos de alza a los combustibles. Octubre fue el primero de los tres meses restantes del año en los que el galón de gasolina tuvo un incremento de 200 pesos. “Es importante resaltar que, incluyendo este ajuste, Colombia sigue teniendo uno de los precios de la gasolina y del diésel más baratos de América Latina gracias a la operación del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepec), el cual ha mitigado la presión inflacionaria de los incrementos de los precios del petróleo y sus derivados en los últimos meses”, señaló el ministro de Hacienda en meses pasados.
Agregó que si no operara el Fondo de Estabilización, en lo corrido de 2022, el precio de la gasolina motor corriente se hubiera ubicado aproximadamente 6.400 pesos por encima del precio de venta promedio vigente en las 13 ciudades principales. “Del mismo modo, el promedio de las 13 ciudades principales, el precio del diésel se hubiera ubicado aproximadamente en 10.000 pesos por encima del precio de venta registrado en este periodo de tiempo”, sostuvo.
Por ahora, el galón de gasolina corriente ya superó los 10.000 pesos en casi todo el país, mientras que el diésel se mantiene con alzas que no superan los 100 pesos. De hecho, el Comité de Regla Fiscal indicó que el fondo estabilización de precios de los combustibles que permitía que el precio de la gasolina en Colombia no subiera cada mes genera un hueco fiscal de 40 billones cada año, lo que equivale a casi dos reformas tributarias.
“El éxito de esta medida dependerá de que se avance en la reducción de los diferenciales de precios, que hoy estarían entre 6.000 y 8.000 pesos para la gasolina y entre 10.000 y 12.000 pesos para el ACPM”, dijeron los miembros del comité.
Después de definir los incrementos, muchos colombianos se han quejado porque el alza golpea directamente sus bolsillos. Sin embargo, el objetivo del Gobierno es que, para 2026, no se tenga que pagar prácticamente nada al Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, por lo que la gasolina debería dejar de subir como lo está haciendo ahora mismo.
“Se proyecta que los diferenciales de precios se cierren a comienzos de 2024 para gasolina corriente, y a comienzos de 2025 para ACPM, con lo cual el Gobierno lograría que la presión de gasto asociada al FEPC desaparezca en el transcurso del cuatrienio”, indicó el documento.
Esto anticipa que van a continuar los incrementos mensuales al precio de la gasolina y, más adelante, vendrán también incrementos al ACPM. Desde octubre, el Gobierno nacional ha aumentado 1.000 pesos el precio del galón de gasolina y 65 pesos el precio del galón de ACPM. Sin embargo, para equiparar los precios internacionales, la gasolina tendría que subir otros 6.100 pesos y el diésel unos 10.400 pesos.
“El déficit del FEPC representa un desafío para la sostenibilidad de las finanzas públicas y para la implementación de una política social progresiva y consistente con la transición energética, por lo que materializar acciones y estrategias encaminadas a reducirlo es fundamental para implementar una estrategia macroeconómica y fiscal responsable y sostenible en el mediano plazo”, agregó en el Ministerio.
Además del aumento de precios internos, el Ejecutivo tiene la expectativa de una reducción en los precios internacionales de los combustibles y espera hacer pagos importantes para saldar las cuentas tanto en 2023 como en 2024. Ya en 2025, el gasto en subsidios sería de apenas 0,5 % del PIB y en 2026 será de apenas 0,1 % del PIB.