Minhacienda ratifica que el diésel no subirá hasta negociar con transportadores y anuncia aumento en el cupo de deuda del país

Pese a que en declaraciones recientes el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, habló de un inminente aumento en los precios del ACPM (diésel), que hasta ahora se ha mantenido en 9.065 pesos por galón y que podrían subir entre 2.000 y 3.000 pesos durante este año, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla aseguró que es un tema que aún no está definido, dado que se debe evaluar con calma.

“Esto por las implicaciones que tiene dicha alza sobre el transporte masivo y el de carga. Nosotros seguimos reuniéndonos con el gremio de transportadores y mirando las condiciones en que se pueda dar ese ajuste”, aseguró al terminar su participación en un debate en la Comisión Tercera de Cámara y añadió enfáticamente. “No vamos a subir el precio del diésel este mes”.

Aunque hay quienes consideran que no iniciar el alza del ACPM, es simplemente darle largas a una situación que, sí o sí se tiene que dar, dado el aún elevado déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc), Bonilla explicó que el descuadre del fondo claramente se mantiene por el subsidio al diésel, pero que este no se puede aumentar de un momento a otro, pues se tienen que ajustar los tiempos con los transportadores, dado que estos a su vez no pueden ajustar sus fletes todos los meses. “Entonces no podemos hacerlo sin concertar con ellos”, reiteró.

Precisamente, para el miércoles 6 de marzo está programado un plantón contra el aumento de precios, el cual es convocado por gremios de transportadores, quienes están temerosos ante el impacto en el aumento del diésel, en especial, si es de las magnitudes anunciadas por el presidente de Ecopetrol. Frente a esto, el ministro de Hacienda insistió en que oficialmente el Gobierno no ha decretado ninguna alza, “Ellos se autodecretan las alzas, hay que decirlo”, dijo para referirse a las preocupaciones de los transportadores.

En el mismo frente petrolero, Bonilla fue cuestionado sobre el tema de la exploración, cuya puerta no ha cerrado por completo, pero también ha asegurado que no hay necesidad de adjudicar más contratos. Explicó su afirmación así: “Lo que pasa es que encontramos 251 contratos vigentes de exploración en 17 millones de hectáreas y cualquier contrato de exploración es una concesión para abrir, no un hueco, sino para explorar un área, así que la pregunta para quienes tienen esas concesiones es por qué no están explorando todas las áreas que tienen adjudicadas. Desde el Gobierno lo que les pedimos es que exploren el área que tienen. Cuando inició el Gobierno se encontraron 40 contratos de exploración que no estaban haciendo nada y el interrogante es: ¿para qué tenían el contrato, para venderlo a otro o qué?”.

Cambio en la deuda

En la misma intervención en el Congreso, el ministro Bonilla anunció que planean hacer cambios para darle un mejor uso al cupo de endeudamiento del país, el cual combina la deuda interna y la externa. En lo que respecta a esta última, el cupo se afectó desde el momento en que se adquirió el crédito con el Fondo Monetario Internacional (FMI), por eso se tomó la decisión de empezar a pagarlo para así poder volver a tener espacio en el cupo de endeudamiento externo.

El crédito con el FMI fue por 5.377 millones de dólares y ya se pagó una primera cuota por 622 millones de dólares. Bonilla explicó que con ese pago no se busca ampliar el cupo de endeudamiento, sino aprovechar el cupo que queda libre para evaluar otras opciones de financiamiento. Para hacer eso van a radicar un proyecto de Ley que establezca un cupo de endeudamiento de 17.000 millones de dólares para las vigencias fiscales de 2024, 2025 y 2026.

Desde el Ministerio de Hacienda aclaran que aún no hay un rango fijo con la estimación sobre cuánto sube el cupo de endeudamiento, pues todo dependerá de las necesidades de mediano plazo que se tengan en moneda externa. Calculan que los 17.000 millones de dólares permiten cubrir las necesidades de financiamiento hasta fin de este gobierno.