Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, celebra dato de inflación de 2023 y hace su pronóstico para 2024

El anuncio de la Dirección Nacional de Estadística (Dane) de que Colombia registró una tasa de inflación de 9,28 % al cierre de 2023 fue celebrado por el ministro de Hacienda ,Ricardo Bonilla, quien destacó que este importante indicador quedó por debajo de las expectativas de los expertos y de su cartera, que pronosticaba que podría ser 9,5 %.

Para Bonilla, la primera conclusión que se puede sacar del dato de inflación es que el ajuste del salario mínimo para 2024, que fue de 12,07 %, en términos reales, es decir, descontando el IPC, fue de 2,9 %. “Un buen ajuste, que fue moderado y que permite pensar que seguimos la senda de descenso de la inflación en 2024″, precisó.

En cuanto a los factores inflacionarios que le preocupan mencionó los costos de la electricidad, que siguen amenazados por la severidad del fenómeno de El Niño, que aún es incierta, y por el manejo de la llamada opción tarifaria, que consiste en un plan de alivios que se dio durante la pandemia para que los hogares pudieran aplazar el pago de este servicio público. Eso generó un hueco, que ahora hay que pagar y que puede impactar el precio de la luz, golpeando de paso al costo de vida.

El costo de la electricidad aumentó 20,74% a nivel nacional el año pasado, pero en Santa Marta, Riohacha y Barranquilla, subió más de 33 %, caso contrario fue el de Cali, en donde la luz subió 10,37%.

Bonilla también aclaró que los precios de los combustibles y del transporte, que igualmente presionaron la inflación el año pasado, ya quedaron cerrados, pues no se esperan más alzas de la gasolina, aunque aún está pendiente el aumento del Acpm, que es el que genera el mayor hueco en términos de subsidios. “Tendremos que ver qué hacemos con diésel”, precisó el funcionario.

Los precios de los combustibles subieron 44,80 % en todo 2023, siendo el ítem que más se encareció entre los 188 que componen la canasta familiar. Este factor afectó los precios del transporte que subieron 15,42 %, así como la venta de vehículos.

De todas maneras, el ministro de Hacienda insistió en que el resultado final consolidado de la inflación de 2023 demuestra “que tenemos controlado el proceso, tanto en alimentos como en otros bienes. Además, hemos desindexado en buena parte los bienes de la economía que suben con el salario mínimo, eso significa que vamos en la senda correcta”, subrayó.

Con el resultado de 2023, Bonilla se animó a asegurar que para el final de 2024 se puede esperar una inflación de menos de 5% y también que continúe la senda del descenso de la tasa de intervención del Banco de la República.

Aún lejos de la meta

Sergio Olarte, economista principal Scotiabank Colpatria, señaló que el descenso de la inflación en Colombia se está dando de manera gradual, no como en otros países de la región y adicionalmente todavía se está muy lejos de la meta (que está en un rango entre 2% y 4%), “¿qué hace que estemos por fuera de la meta del Banco de la República? principalmente dos elementos muy importantes: el primero son los arriendos, el año pasado tuvimos que subir los arriendos con la inflación de 2022 que terminó por encima del 13 %, y el segundo fueron los bienes regulados de la economía, la energía eléctrica y la gasolina, que tuvieron incrementos muy importantes”.

Este experto espera, sin embargo, que continúen disminuyendo gradualmente los arriendos y los bienes regulados, lo que va a permitir que el Banco de la República continúe su senda de bajada de tasas de interés que comenzó en diciembre del año pasado al pasarlas de 13,25% a 13%. Prevé que este 31 de enero el Banco las pueda bajar entre 0,25 y 0,50 puntos básicos, para quedar alrededor de 12,5 %.