Paro Nacional | Cafeteros alertan porque no pueden recoger y exportar el grano

Un llamado a la cordura y a buscar salidas urgentes a la crisis social y económica que enfrenta en estos momentos el país hizo el gremio cafetero. A través de un comunicado, la Federación Nacional de Cafeteros expresó su preocupación por las dificultades que enfrentan en estos momentos los productores y comercializadores del grano debido a los bloqueos en las principales vías del país.

Esta situación de cierre de vías por parte de manifestantes impide la movilización de trabajadores hacia las fincas cafeteras, para realizar las labores de recolección del grano, pero también impide llevar las cargas a los puertos colombianos con destino a los mercados internacionales.

Estas dificultades se presentan justo en momentos en que los precios internacionales del café colombiano exhiben altos niveles: este viernes 7 de mayo la cotización del grano en la Bolsa de Nueva York alcanzó 1,52 dólares por libra. A esta cifra incluso se le suma una prima de calidad que le reconoce el mercado al café colombiano.

Estos precios internacionales, el reconocimiento de la prima y la devaluación del país han llevado a que el precio interno también alcance niveles históricos: este viernes la carga de 125 kilos de café se pagó a $1.409.000. A esto se suma que la cosecha cafetera muestra condiciones óptimas: entre enero y marzo de este año la producción creció 9 %.

Sin embargo, la buena hora de los cafeteros está amenazada por los bloqueos convocados por los organizadores del Paro Nacional. Desde el pasado 28 de abril las familias cafeteras están pasando un trago amargo por el cierre de vías estratégicas para transportar este producto de exportación.

Por esta razón, los dirigentes cafeteros aseguran que es “una ironía que en momentos en el que el precio interno del café alcanza niveles históricos, por encima del $1.400.000 la carga, las familias cafeteras no vayan a poder sacar sus cosechas para obtener unos ingresos que benefician a más de la mitad de los municipios de Colombia”.

Ante esta situación, el gremio cafetero se pronunció rechazando de manera contundente “los hechos de violencia y vandalismo que han marcado las jornadas” e invitó a buscar de inmediato salidas que lleven a superar pronto la crisis social y económica que tanto está afectando al país en su conjunto.

El gremio, que representa a más de 500.000 familias, hizo un llamado “a la sensatez y a la cordura, y a trabajar unidos para que el país avance por una senda de recuperación y crecimiento, máxime en momentos en que el país y el mundo están buscando cómo adaptarse a la nueva realidad que ha dejado la pandemia, incluidos profundos estragos económicos en amplios sectores de la población”.

Insistieron en que este es un momento de ser ejemplo de valores como el “respeto, la integridad y responsabilidad, así como promotores de serenidad y prudencia para contribuir positivamente a la situación que atraviesa la nación. Respetamos las diferencias, pero es necesario construir sobre ellas y urgente llegar a consensos y velar por el bien común”.

Así mismo, rechazaron los bloqueos, actos vandálicos y desmanes que se han visto en algunas de las principales ciudades del país así como en zonas rurales, que tienen en jaque la despensa agrícola del país, poniendo “en riesgo la seguridad alimentaria de la población y el ingreso digno de miles de compatriotas”.

El calvario para los caficultores no ha sido menor en estos días de paros, ya que muchas familias no han logrado movilizar la mano de obra necesaria para recoger su cosecha y, “peor aún, llevar a venderla (ya sea por cierre de vías o desabastecimiento de combustible), lo que afectará un sector del cual dependen directamente más de 2 millones de personas ubicadas en 604 municipios y 23 departamentos, y que es el soporte social y económico de esas regiones”.

Además de los problemas con la logística interna, uno de los mayores temores del gremio tiene que ver con el riesgo de incumplimiento de ventas internacionales por causa de los bloqueos que impiden llevar el café desde los centros de acopio hasta los puertos. Esto, según el gerente de la Federación, Roberto Vélez, afecta los ingresos del país, así como la imagen y confianza de los clientes que tradicionalmente han preferido el mejor café del mundo.

“Como ciudadanos, puede haber situaciones del orden nacional que nos preocupen o con las cuales disintamos. Pero recordemos que seguimos en pandemia, en una tercera ola grave que hace indispensable evitar aglomeraciones para frenar la transmisión del virus y que los contagios y hospitalizaciones no se disparen en nuestras regiones”, dice el gremio.

Para los cafeteros, hoy más que nunca el país necesita seguir trabajando para ayudar a la recuperación económica y social del país y para que “el mundo siga girando alrededor de una taza del mejor café: el café de Colombia”.