Minería
Política antiminera de Petro dejaría a la Nación y las regiones sin $ 8,8 billones
La Asociación Colombiana de Minería aseguró que no es responsable prescindir de una industria que le aporta tantos recursos al país.
La Asociación Colombiana de Minería (ACM) lanzó una nueva alerta sobre los riesgos que corre Colombia si el próximo siete de agosto llega a la Presidencia de la República una persona que esté a favor de acabar la actividad minera en el país, como lo ha propuesto en varias oportunidades el candidato presidencial del Pacto Histórico, Gustavo Petro.
De acuerdo con la ACM, las exportaciones mineras registraron en el primer trimestre del 2022 las mejores cifras de los últimos diez años, al alcanzar USD 3.752 millones, lo que representa un crecimiento del 44 % con respecto al mismo periodo de 2021.
El crecimiento del valor de las exportaciones estuvo jalonado, principalmente, por el repunte del valor del carbón, el coque y el ferroníquel, los cuales tuvieron un aumento de 108 %, 90 % y 95 %, respectivamente. Así mismo, la producción minera se mantuvo estable entre enero y marzo de este año.
De mantenerse el ritmo actual de las exportaciones y las condiciones internacionales de los mercados, las cuentas de la ACM indican que este año se alcanzaría una cifra récord en aportes fiscales y regalías de $ 8,8 billones.
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“No creo que, en materia de política social, fiscal y económica, sea responsable prescindir de una industria que le aporta tanto al país. Además, el sector siempre ha estado acostumbrado a pasar por coyunturas políticas”, aseguró Juan Camilo Nariño, presidente de la ACM.
Además, manifestó que “es prometedor que todos los candidatos tengan dentro de sus propuestas de país la transición energética y la adaptación al cambio climático, ya que estos solo serán posibles con una política de fomento minero.
Colombia produce varios minerales esenciales y se pueden desarrollar proyectos de cobre que, en un escenario de diversificación energética, son estratégicos.
Al respecto, también manifestó que el país tendrá una gran oportunidad en los minerales que requerirá la transición energética, pues se proyecta un incremento exponencial en la demanda de minerales para el 2050 de litio (539 %), cobalto (460 %), grafito (383 %), indio (228 %), vanadio (189 %), níquel (84 %), aluminio (9 %) y cobre (7 %).
“El mundo y Colombia necesitan minerales y como sector estamos comprometidos a extraerlos con los más altos estándares, compromisos de calidad, participación ciudadana y contra el cambio climático. Lo verde y lo minero van de la mano”, agregó Juan Camilo Nariño.
¿Se pueden sustituir los aportes de la minería?
El presidente de la ACM manifestó que, para reemplazar los aportes actuales de la minería formal, se tendría que incrementar cuatro veces el sector de información y comunicaciones, seis veces el agro colombiano, siete veces el sector cervecero, 16 veces el de las confecciones, 40 veces la producción de cemento y 70 veces la panadería.
En este sentido, Juan Camilo Nariño afirmó que el sector minero aporta 2,1 % al Producto Interno Bruto del país, el 15 % de la inversión extranjera en Colombia. Además, genera más de 160.000 empleos directos y cerca de 700.000 empleos indirectos”.
Esto, sumado a que por cada peso que genera la minería se generan $ 2,4 en otros renglones, aportes por más de $ 5 billones en impuestos y regalías en 2021, y a que representa uno de cada tres dólares de las exportaciones totales del país.
En ese sentido, la minería realizó, entre 2018 y 2020, compras por más de $ 11,4 billones anuales a otros sectores (comercio, energía, construcción, servicios, industria y transporte), de los cuales, $ 8,2 billones fuero en sus áreas de influencia y el país.
De acuerdo con la ACM, los aportes entregados al país en impuestos y regalías equivalen, por ejemplo, a dos veces las transferencias del programa Familias en Acción y Jóvenes en Acción, la mitad del presupuesto de ingreso solidario, a 30.000 unidades de vivienda de interés social, 600 kilómetros de vía, 400 hospitales de segundo nivel, 800 colegios o a un tercio del costo del Metro de Bogotá.