¿Qué le espera al país en materia de conectividad para este 2023? Esto dicen los expertos

¿Qué le espera al sector de las tecnologías de la información y las telecomunicaciones para este año, donde se estima una profunda desaceleración de la economía? Juan Carlos Archila, presidente de América Móvil Colombia; Ramiro Lafarga, CEO de WOM Colombia y Fabián Hernández, presidente de Telefónica Colombia, sostuvieron una conversación para el programa de Dinero en Semana TV sobre los avances que requiere el país en materia de conectividad en 2023.

El mercado de la conectividad presenta constantes incrementos con más personas que se suman a la red e inician su travesía como consumidores de lo digital, por lo que año tras año la brecha de demanda aumenta; sin embargo, esto requiere un aumento permanente en la oferta de conectividad, lo que puede representar un gran desafío durante un año de incertidumbre económica como el actual.

La conectividad y la telefonía son dos sectores claves para la competitividad económica de la nación, y más para un crecimiento necesario en medio de un panorama de desaceleración como el que se presenta para este 2023, a día de hoy, 17 empresas prestan servicios móviles en el territorio nacional, lo que además estima que cada vez que se aumenta la penetración móvil, se genera un incremento del 1,6% en el PIB.

De la misma forma, este es un rubro ha dibujado dinámicas de crecimiento constante incluso en pandemia, y que ha requerido afrontar cada vez más retos, como lo fue el teletrabajo, coyuntura explicada por Hernández, al analizar la operación del año anterior: “Todo pasa por estar conectados tanto las personas como las empresas, los gobiernos, todo se da a través de la de la conectividad, que es la base para que se dé todo el desarrollo del resto de tecnologías, entonces fue un año de mucho de crecimiento, un año también entender el modelo híbrido de las personas estando de nuevo en sus casas regresando al trabajo, donde obviamente nos obligó a seguir apostando a la conectividad en los hogares, siguiendo nuestro proyecto de fibra óptica para llegar a 90 ciudades del país”.

Durante el año pasado, las características de aumento cumplieron su expectativa pero de forma inversamente proporcional los precios también presentaron un gran descenso, algo que se ha vuelto costumbre durante los últimos años, especialmente con la llegada al mercado colombiano de WOM, lo que ha significado mayor competencia y distintas medidas por parte de las demás empresas.

“Cuanto más competidores hay en una industria en general los precios tienden a bajar, sobre todo si hay rentas altas, es teoría de económica básica, la industria de telecomunicaciones, no se escapa de eso entonces ¿Qué ha pasado? Cuando entró WOM bajaron las tarifas, el precio del giga bajó cuatro veces en dos años en lo que es la industria”, explicó Lafarga.

Los precios descendieron en Colombia aproximadamente 12 % tras el arribo de WOM, lo que marca tener los segundos precios más bajos de la región, sin embargo los expertos también explicaron que se debe encontrar un equilibrio ante estas situaciones y que quizás en el espectro de conectividad, no habría espacio para “otro WOM”, debido a que estos precios tan bajos, a pesar de presentar beneficios para el cliente, implican un gran riesgo a la hora de realizar inversiones para infraestructura.

Durante el último tiempo hubo un crecimiento del tráfico digital del 140 %, lo que ha requerido la creación de nueva infraestructura para cubrir estas necesidades que se espera continúen avanzando durante este nuevo año, teniendo en cuenta el aumento de cobertura que planteó el Gobierno de llegar al 85 % para el territorio nacional, lo que requerirá un trabajo conjunto entre las compañías y los entes gubernamentales a nivel económico.

“Vamos a necesitar ayuda del gobierno, este ha venido tomando una serie de decisiones de política pública, hay una gran cantidad de la población que no tiene acceso al Internet de banda ancha, lo que nos va a obligar a las empresas a llevar a incrementar la huella de la infraestructura, y ahí la participación del gobierno va a ser fundamental en crear unas condiciones ajustadas a la realidad de la inflación y la devaluación de hoy, porque realmente sino las empresas no tendrán la capacidad de hacer las inversiones”, estableció Archila, presidente de América Movil.

Esto sumado a que ya, de por sí, el costo del espectro en Colombia es alto y están a la espera de la renovación y las medidas que tome el gobierno actual respecto al mismo para este nuevo año. Lafarga asegura que: “El hardware y el software están muy supeditados a las condiciones del gobierno nos defina, por ejemplo, lo que es el costo del espectro es algo que que hay que revisar porque históricamente Colombia ha tenido un costo muy alto, como también las obligaciones a invertir con las que uno se compromete frente al Gobierno. Es algo que igualmente estamos viendo y creo que hay una buena predisposición por parte del Gobierno para llevar esto adelante, pero es un elemento esencial para ver si realmente el negocio nuestro es sustentable en el largo plazo”.

En temas de gratuidad, fue aclarado que si se busca dar conectividad gratis para sectores de la población, se debe subsidiar a la misma, o sino estos ingresos tendrán que ser reemplazados para las empresas que ya de por sí ofrecen precios de bajo costo.

Finalmente, los expertos coincidieron en que era vital la inversión en infraestructura para las redes 5G, ya que Colombia en materia de conectividad de por sí se presenta un atraso en comparación con otras naciones del continente, según datos expuestos por estos expertos, las personas que utilizan las conexiones 4G en Colombia no excede el 75 %, mientras que en otros territorios ya llega al 90 %, una situación de retroceso teniendo en cuenta que en tiempos anteriores, el país llegó a ser el líder en conexiones 3G.

De la misma forma, esta ligera falta de infraestructura también ha conllevado que las redes en velocidad a nivel nacional estén un 15% más atrás respecto al resto del continente, no obstante, las empresas continúan sosteniendo su compromiso en esta materia, invirtiendo en promedio 800 millones de dólares anualmente por parte de cada organización, por lo que se ha venido avanzando de mejor manera.

No obstante, los retos regulatorios que serán planteados por el Gobierno, significarán un posible obstáculo, pero estas inversiones que serán necesarias para llevar al país a una mayor trascendencia en materia de conectividad, ante lo que la industria tendrá que reposicionarse, como lo puntualizó de manera final Archila: “Yo creo que los temas pendientes regulatorios son un factor de incertidumbre para todos los jugadores de la industria, voy a dar un ejemplo reciente: Se habla de compartición de infraestructura, y la remuneración de la compartición de infraestructura, esto es una facilidad que permite que un operador use la red de otro o viceversa, pero también tiene que tener un mensaje claro de remuneración, de hecho recientemente en esos temas hemos avanzado; si hay un elemento de crear una política pública pero con un marco muy claro de incertidumbre en las inversiones. A veces esos cambios grandes en la regulación alejan a los inversionistas.”