Reforma tributaria ya no alcanzaría a recaudar ni $10 billones

El rechazo generalizado de los partidos políticos y la presión social hicieron que el Gobierno desistiera de los pilares de la reforma fiscal que radicó ante el Legislativo semanas atrás.

El viernes pasado, el presidente de la República, Iván Duque, dio instrucciones al ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, para que durante el trámite en el Legislativo se construya un nuevo texto con bancadas y sectores.

El mandatario destacó que no se tocará el IVA a productos básicos y servicios públicos y no se ampliará la base a los contribuyentes del impuesto de renta, temas sensibles que generaron una fuerte discusión en el proyecto original por parte de la oposición y sectores cercanos al Gobierno.

También dijo que no se ampliará al 19 % el IVA a la gasolina. Estas modificaciones van a hacer que el proyecto de reforma ya no recaude los poco más de $23 billones que tenía estimados al momento de la radicación.

“La tributaria en este momento es de $9 billones. Toca salir a buscar entre $9 a $11 billones por otro lado”, dijo una fuente del Ministerio de Hacienda a este medio.

Y es que la reforma tiene un componente de incremento de gasto social, que seguramente va a ser aceptado por los congresistas, por medio del cual se amplían distintos programas de transferencias monetarias como el Ingreso Solidario o el Paef. De acuerdo con cálculos del Ministerio de Hacienda, todo el incremento del gasto social le costará al país alrededor de $7 billones, razón por la cual es indispensable conseguir más recursos.

“Si se recaudan solo $10 billones, el escenario base sería unos $7 billones para gasto y solo $3 billones para ajuste fiscal. Sin embargo, nosotros debemos hacer un ajuste de más de $3 billones y eso implicaría sacrificar programas sociales”, añadió la fuente.

A pesar de que en repetidas ocasiones el Ministerio de Hacienda y el Gobierno en general han dicho que la reforma es fundamental para conseguir los recursos necesarios con los que se pueda ayudar a la población vulnerable, una gran parte de la sociedad sigue estando en contra de la iniciativa y pide retirarla.

La idea del Ministerio de Hacienda es que en medio de los diálogos con los congresistas se pueda llegar a un acuerdo para incluir medidas que aumenten el recaudo de la tributaria a poco más de $15 billones con el fin de poder mantener los programas sociales y hacer un ajuste fiscal.

“Lo que va a pasar es que hay que recaudar 18 billones, utilizando las propuestas que salgan estas semanas y usando los ases bajo la manga que estaban guardados para este momento”, dijo la fuente.

Eso sí, el menor recaudo esperado ya haría que algunas iniciativas incluidas en la propuesta no se puedan llevar a cabo como las iniciativas encaminadas a la reactivación del empleo.

Algunas de las propuestas que suenan para darle un poco más de recursos a la Nación son el aplazamiento de todos los beneficios tributarios a las personas jurídicas (empresas) o la disminución del umbral para pagar los impuestos al patrimonio y dividendos.

“El desafío es reemplazar parte de los $15 billones que le recortaron a la reforma”, dijo la fuente.

De acuerdo con el Ministerio de Hacienda, la reforma es necesaria para estabilizar las cuentas del país a partir de 2022, pues en 2021 se van a usar los recursos de la venta de ISA a Ecopetrol para ayudar a “tapar el hueco”.

“La venta de Isa ayuda a tapar el hueco de 2021. La tributaria ayudaría a tapar el hueco de 2022 en adelante. Si no se hace, el otro año toca salir a vender Ecopetrol y ver qué se hace para 2023”, dijo la fuente.

Se estima que el próximo Gobierno deberá hacer una nueva reforma tributaria si el país quiere reducir el endeudamiento y mantener el grado de inversión, teniendo en cuenta el bajo recaudo que aportaría el proyecto que ya fue radicado ante el legislativo.