PENSIONES

Retiros anticipados de fondos reduce el monto de las pensiones, advierte la FIAP

La Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP) hizo un llamado para que se dejen intactos los ahorros pensionales en Latinoamérica.

11 de junio de 2021
La agencia hizo la advertencia porque en diversos países de la región se ha avalado el retiro parcial de los ahorros pensionales.

Con el fin de hacer frente a las necesidades económicas generadas por la pandemia del coronavirus, algunos países de Latinoamérica han optado por permitir el retiro de una parte del ahorro pensional, una iniciativa, implementada en Chile y Perú, advirtió la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP).

Es lamentable ver a los impulsores de estas medidas vanagloriándose de ser los grandes benefactores de los afiliados, mientras los van despojando de los recursos que habían ahorrado con esfuerzo para la vejez, bajo la protección de una la ley que no dudaron en infringir”, dijo la FIAP.

Según la entidad, el retiro de los ahorros pensionales de los fondos privados va a hacer que los estados tengan que incrementar sus gastos para poder cubrir las necesidades económicas de la población cuando lleguen a la edad de jubilación.

“Con los retiros anticipados de fondos, al dejar a un alto porcentaje de trabajadores sin ahorro suficiente para financiar sus pensiones, el Estado deberá contribuir a su financiación, con lo que tendrían un nuevo pretexto para exigir que las nuevas contribuciones se destinen al Estado junto con su administración. Así se facilita el camino de los que quieren restablecer sistemas de reparto y eliminar la administración privada, no obstante la evidencia de su fracaso en el mundo”, agregó.

Y es que los ahorros en cuentas individuales de las administradoras de fondos de pensiones privados son el pilar el Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad (RAIS) y es la principal diferencia con el Régimen de Prima Media (RPM), en el cual no hay un ahorro individual y los aportes de las cotizaciones se destinan a pagar las mensualidades de los actuales pensionados.

A la fecha, en Chile se han autorizado tres retiros por el valor de hasta el 10 % de los fondos, lo cual ha traído consigo la salida de US$50.000 millones de los fondos chilenos, el equivalente al 25 % del valor total de los fondos actuales.

“Además, un total de 5 millones de personas se quedaría sin recursos en sus cuentas, y el monto de las pensiones caería en casi un 30 %, lo que equivale a unos seis años de cotizaciones”, dijo la FIAP.

En el caso peruano, los diferentes mecanismos de retiro aprobados significan la salida de US$28.000 millones de los fondos, equivalentes al 64 % del valor de estos. “Casi seis millones de afiliados quedarían con saldo cero en su cuenta individual, y el monto de las pensiones podría caer en hasta un 25 %”, dijo la entidad.

La preocupación de los fondos de pensiones es mayor cuando hay propuestas (en Chile y Perú) para que los ciudadanos puedan retirar hasta el 100 % de los ahorros pensionales.

“Si bien una política de este tipo es irracional, ya que genera un daño irreparable en las pensiones de las próximas generaciones, encuentra espacio y asidero en los ciudadanos que quieren evitar que sus actuales recursos y sus futuras contribuciones sean utilizadas para financiar un sistema de reparto que de otra forma no tendría recursos para pagar pensiones”, dijo la FIAP.

En el caso colombiano, es de mencionar que el Congreso no aprobó (como sí sucedió en Chile y Perú) la iniciativa que buscaba permitir el retiro de una parte del ahorro pensional.

La FIAP finalizó su comunicación advirtiendo que las naciones latinoamericanas no deben volver a los sistemas de reparto, ya que estos son insostenibles por sus elevados costos y envejecimiento de la población.

“No es sensato mantener o volver a sistemas de reparto ante los grandes desafíos demográficos. Es necesario fortalecer los sistemas basados en el ahorro. Este proceso debe ser acompañado por instituciones fuertes y gobiernos comprometidos, que eviten que las presiones fiscales y las ventajas políticas de corto plazo incentiven la ejecución de reformas populistas que destruyan el ahorro, deteriorando el sistema previsional y afectando el bienestar de la población en el futuro”, concluyó.