Finanzas públicas
Tras caída del recaudo, en el Banco de Bogotá dicen que el Gobierno deberá apretarse más el cinturón este año
En el mejor de los escenarios, estiman un desfase de 10 billones de pesos entre la meta y lo que efectivamente se recolecte en impuestos en 2024.
La Contraloría hizo una revelación que le puede dañar aún más las cuentas al Gobierno, el cual ya se vio forzado a anunciar un duro recorte presupuestal para este año. El ente de control informó que el recaudo tributario del primer semestre habría sido de 129 billones de pesos, una cifra inferior en casi 12 billones frente a lo que se tenía presupuestado y 19,8 % menos a lo observado un año atrás.
El Grupo de Investigaciones Económicas y Análisis de Mercado del Banco de Bogotá señalan que esa caída del recaudo en términos anuales es la más elevada en lo corrido del siglo XXI.
Según la Contraloría, el menor pago de impuestos se originó en varias razones entre ellas la disminución en el recaudo de cuotas de renta y tributos externos, así como la gestión de la Dian para reducir la evasión tributaria, que aún no registra los resultados esperados.
Cálculos de los economistas del Banco de Bogotá estiman que, de seguir así, el desfase entre lo que se tenía presupuestado recaudar y lo que efectivamente se consiga, sería, en el mejor de los casos, de 10 billones de pesos, esto teniendo en cuenta que el recaudo de impuestos podría presentar una mejora en el segundo semestre de 2024 en medio de señales de recuperación económica y el mayor pago de renta de personas naturales.
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“Esto evidencia el retador panorama que tendrá la Nación para honrar la regla fiscal. En los últimos 23 años, del recaudo total recibido por el Gobierno en materia de impuestos, el 52,7 % en promedio fue obtenido durante los primeros seis meses. De este modo, si los 129 billones recaudados en el primer semestre del año representaran el 52,7 % de todo lo que va a percibir en 2024, al final del año estos serían de 244 billones, es decir, 35 billones menos que el objetivo estipulado en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (279 billones). Así, para que las cuentas del Ministerio de Hacienda se cumplan, los ingresos del primer semestre tendrían que representar el 46,2 % de todo lo que recibiría la Nación en 2024, algo que en la historia reciente nunca ha sucedido. De hecho, el mejor caso comparable es el año 2002, cuando los ingresos tributarios entre enero y junio representaron 48 % del total observado. En ese sentido, si 2024 fuese un año equiparable a 2002, los ingresos tributarios rondarían de 269 billones, 10 billones por debajo de la meta”, reiteran.
En su concepto, un desfase tan significativo pone sobre la mesa la necesidad de llevar a cabo un nuevo recorte en el gasto público para cumplir la regla fiscal. Destacan que si bien hay fuerzas positivas para incrementar el recaudo (como una mejor demanda interna que aumentaría los ingresos por IVA e impuestos externos, así como por la entrada en vigencia de la reforma tributaria de 2023 que incrementa la tributación de renta de las personas naturales), estas no serían suficientes.
“De no tomar medidas y materializarse el nuevo escenario, la percepción de riesgo país incrementaría y la probabilidad de ver una rebaja en la calificación crediticia aumentaría”, advierten en el Banco de Bogotá.
Este panorama es el que hace que exista una elevada expectativa alrededor de la reforma tributaria que se cocina en el Gobierno, pues a muchos analistas no les cabe en la cabeza que en plena caída del recaudo se esté pensando en bajar la tasa de tributación de las empresas, del 35 % al 30 %.