¿Cómo dar una buena primera impresión en grupos de trabajo?

La frase: “cuéntanos un poco sobre ti”, dicha en cualquier contexto, puede hacer que todo el conocimiento sobre sí mismo desaparezca. ¿Qué hay que contar?, ¿qué tan larga debe ser la presentación personal?, ¿cómo se hace una buena introducción de sí mismo?

Según un artículo de Harvard Business Review, escrito por la coach de comunicación Andrea Wojnicki, la fórmula para hacer la presentación personal perfecta está en los tres tiempos: pasado, presente y futuro.

Iniciar por el presente

¿Cuál es su función ahora mismo?, ¿cuál es su cargo?, ¿qué estudia? o ¿en qué proyecto está trabajando? Esta información es perfecta para comenzar y debe ser una frase corta: “Hola, soy Martha Romero, soy estudiante de ingeniería de sistemas y estoy cursando sexto semestre”.

Cabe resaltar que la información que se prioriza depende del contexto en cual se esté presentando. Por ejemplo, en una clase universitaria, el nombre, carrera y edad pueden ser adecuados para comenzar, pero en un ambiente laboral, el nombre, área y especialidad son los datos que se deben incluir.

Dar información del pasado

Mencionar dos o tres datos relevantes acerca de su vida o experiencia. La información que debe ofrecer depende del contexto. Si está en la universidad, es una buena elección mencionar qué clases ha visto o cuáles son sus intereses.

En el caso de un ambiente laboral, es mejor hablar acerca de la experiencia o acerca de otros proyectos en los cuales haya trabajado. Por ejemplo: “He trabajado en proyectos del sector financiero desde hace 10 años y recientemente tuve la oportunidad de ayudar en proyectos de emprendimientos”.

Terminar con el futuro

Para cerrar la presentación con broche de oro, se debe hablar del futuro con entusiasmo, teniendo en cuenta el trabajo que se va a realizar. “Estoy muy emocionada de trabajar con ustedes” o “estoy a su disposición para solucionar cualquier duda”, son cierres adecuados.

Wojnicki también hace énfasis en que esta fórmula no solo ayuda a presentar de manera adecuada, sino también a escuchar mejor a las otras personas. “Al usar este acercamiento, no solo te presentaras mejor, sino que te libera de pensar en qué tienes que decir y te permite escuchar cuando otros hablen”.